02 enero 2018

DE MITOS Y NULIFICACIONES


La compleja realidad del nacionalismo hace difícil acomodarlo en esquemas rígidos y universales, aunque todas sus variantes sean fruto de una actitud vinculada más a los sentimientos y emociones que a sensatas reflexiones racionales.
El gran déficit de racionalidad de las sociedades contemporáneas se manifestó, y lo sigue haciendo, en las numerosas luchas y desastres acaecidos en el siglo pasado y que, en todos los casos, bebieron de las fuentes nacionalistas.
Elevar a la nación a la categoría de valor social supremo y relegar al hombre a un papel complementario y subordinado son los ejes de cualquier nacionalismo.
El poder que esto ofrecía, y ofrece, a las élites dominantes hizo que éstas, conscientes de su enorme poder movilizador, procuraran dominarlo.
Y ello choca frontalmente con el pensamiento ilustrado que superó las estructuras medievales, los reinos de taifas y los planteamientos imperiales, para situar el problema político en la igualdad ante la ley, e incluso, en una cierta igualdad económica.
Lo demás es retroceso.
Sólo con apelar a la patria y desplegar una bandera muchos ciudadanos saltan como catapultados por un muelle.

Daniel Reboredo-Historiador.








2 comentarios:

  1. Y que haya tanta gente que se la da de progresista alineada con estos retrógrados, es buena muestra del nivel intelectual de algunos de ellos, que no saben ni donde están.

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    1. DON TRECCE
      Es la ALDEANADA de un pueblo campesino durante siglos y ajeno a las ideas racionales de la Ilustración. Algo parecido sucedió con los alemanes y su Adolf.

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