06 abril 2010

Lunes de Pascua (para "Sí bwana" )

El comentarista y bloguero SÍ, BWANA solicitaba ayer que se hiciera un aclaratorio sobre "La Resurrección", casi nada, pero como este blog sólo se rinde ante fuerzas incontrolables, como son las de la Ministra Sinde, vamos a tratar de usar lo conocido por documentos y  el uso del raciocinio.

A partir del siglo III los cristianos europeos empezaron a peregrinar a Tierra Santa, unos por tierra, otros por mar, desafiando peligros e incomodidades.
¿Qué los movía?
Los movía el santo anhelo de recorrer los lugares citados por los Evangelios.

Querían tocar los objetos que tocó Jesús, pisar el suelo que hollaron sus plantas, respirar el aire que respiró y traerse de regreso alguna sagrada reliquia que prestigiara y protegiera a la familia de generación en generación.
En Tierra Santa la accidentada historia lo había trastocado todo. Del tiempo de Jesús sólo quedaban los accidentes geográfi­cos: aquél es el mar de Galilea donde pescaba Pedro; aquél, el mon­te Tabor; aquél, el desierto de Judea; aquel pueblecito es Belén... Poco más.

Del Jerusalén que Jesús conoció no quedaba práctica­mente nada. Después de la rebelión judía del año 60, los romanos lo habían arrasado y sobre sus escombros nivelados habían cons­truido una ciudad helenística.

Causa tristeza reconocerlo, pero el tiempo había borrado cual­quier vestigio de Jesús. En esta tesitura, la Iglesia no desmayó, antes bien, se ató los machos, se puso manos a la obra y proveyó los san­tos lugares que sus fieles demandaban. En pocos años se identifica­ron, sin asomo de duda, diversas piedras y cuevas relacionadas con la vida de Jesús. Ni un solo pasaje evangélico quedó sin testimoniar con su correspondiente marco o reliquia. En su entusiasmo, los pastores de la Iglesia incluso se extralimitaron justificando con nue­vas reliquias pasajes que ni siquiera aparecían en los Evangelios, con lo que bien puede decirse que los aumentaron y corrigieron.

Como era de esperar, los historiadores hipercríticos, cegados por la soberbia intelectual y por su estrechez mental, tildan las pere­grinaciones a los santos lugares de "negocio infame montado sobre la credulidad de gentes sencillas por una cuadrilla de mercaderes embusteros que trafican con la ignorancia de la gente sencilla".

Estos aguafiestas profesionales olvidan que el Concilio de Trento declaró que la tradición es también legítima fuente de conocimien­to de la Iglesia. Por lo tanto, si la tradición dice que Jesús se sentó a charlar con la samaritana a la vera de un determinado pozo es legí­timo que el pozo designado se convierta en un santo lugar y en torno a él se construya un santuario y en torno del santuario tiendas de objetos religiosos y souvenires, así como mesones, casas de co­midas, restaurantes, chiringuitos de falafel, kebab, té moruno y be­bidas gaseosas, pensiones, hoteles de tres o más estrellas, conventos, casas de ejercicios, lavanderías, cererías, incienserías, whisquería y todos los demás servicios que una ciudad moderna demanda.

En 325, Constantino encomendó al obispo Macario que en­contrara el Calvario y el Santo Sepulcro (ya vimos que la piadosa tradición atribuye el descubrimiento a santa Elena).
Macario se enfrentaba a un dilema de imposible solución por­que la ciudad de los tiempos de Jesús había sido literalmente arra­sada y ni siquiera su primitivo relieve era perceptible. El núcleo urbano se había nivelado desmontando las zonas altas y terraple­nando las bajas hasta crear un espacio llano donde instalar el foro y el capitolio de la nueva ciudad.

Pero Macario era hombre de recur­sos y no se amilanaba fácilmente. Con los Evangelios en la mano demolió un par de templos paganos y excavó el solar resultante hasta dar con la roca de vetas rosáceas característica del subsuelo de Jerusalén.
El úl­timo en incorporarse a la larga lista, no hace todavía un siglo, ha sido la sinagoga de Cafarnaún, construida varios siglos después de Jesús, que adjudicó el honor de haber contenido el cadáver de Jesucristo.

Sobre este lugar se levantó una gran basílica que ocupaba tanto la cima de la colina, el supuesto Gólgota, como la gruta sepulcral, convenientemente próximas. Esta basílica se llamó Martirion y la del sepulcro, Anastasis (es decir, "Ascensión"). Macario lo inven­tó todo y el tiempo hizo el resto con su morosa maquinaria que digiere, justifica y legitimiza cualquier patraña.

Jesús resucitó cuando llevaba tres días muerto. Es un dogma y como tales cristianos lo acatamos sin discusión. Pero faltaría a la verdad si no informara de la existencia de algunas ovejas descarria­das que no aceptan la muerte de Jesús y creen que todo fue un truco de los suyos (¡trucos llaman a los milagros estos desgraciados!) para fingir que resucitaba y cumplir dolosamente las profecías.

Lo malo (y confuso, me temo) es que desde otra perspectiva forense, cuando se examina la Sábana Santa, resulta que no murió, que lo bajaron vivo de la cruz. Bastante fastidiado, ciertamente, eso nadie lo pone en duda, pero vivo.

¿Y la lanzada, entonces? Nada: por lo visto lo pilló de refilón, como las heridas que recibe Bruce Willis: una lanzada venial aplica­da rutinariamente por un militar chusquero y descuidado.

Veámoslo despacio. Sólo transcribir estas insensateces produce náuseas, pero, una vez más, haré de tripas corazón y las expondré brevemente a fin de refutadas.

Es el caso que los Evangelios contienen pasajes que dan que lucubrar a esos autores, por ejemplo cuando dice: "¿Por qué buscáis entre los muertos a Aquél que está vivo?" (Lc. 24,5), lo que, leído torcidamente desde una óptica puramente materialista, que coinci­de con el sentido común, el cual rechaza que un muerto resucite, parece más plausible que Jesús no hubiera fallecido en el patíbulo, si aceptamos que lo vieron diversas personas después de su cruci­fixión y que compareció ante los discípulos en carne y hueso. La teoría no es nada nueva y ya fue formulada en el siglo XIX. .

Si se recha­za el prodigio de la Resurrección, todo el cristianismo cae por su base y de un plumazo se quedan sin trabajo y sin prebendas cerca de un millón de eclesiásticos (entre cardenales, obispos, curas, frai­les y monjas) que generan a su vez otros tantos puestos de trabajo indirectos entre sacristanes, administrativos, amas del cura, mante­nidas, etc.

Algunos estudios científicos insisten en la posible superviven­cia de Jesús a partir de los elementos observados en la Sábana Santa o sobre deducciones generales. El profesor Bonte (1992), director del Departamento de Ciencias Forenses de la Universidad de Düs­seldorf, comentó: "Desde mi punto de vista todo apunta a que la actividad de la circulación sanguínea no había cesado aún, y, por lo tanto, la persona en cuestión debía de estar viva", aunque luego se extraña de la presencia de la rigidez cadavérica para poner en duda sus propias observaciones sobre la supervivencia.

Los estudios de Rodney Hoare (1994) también lo llevaron a sospechar la supervi­vencia de Jesús al comprobar que para que se pueda formar la ima­gen sobre la tela de la sábana era necesaria la temperatura corporal de una persona viva, hasta el punto de que, si se hubiera tratado de un cadáver, nunca podría haber formado imagen alguna sobre el lienzo. En esa misma dirección apuntan los trabajos de Elmar R. Gruber y Holger Kersten (1998), los de Gerhard Kuhnke (2004) y, más recientemente, los de Helmut Felzmann (2005), que añaden otros elementos relacionados con la supervivencia de la persona retratada en la Sábana Santa.

Según la ley romana, los condenados a muerte no tenían dere­cho a una sepultura decente y sus cadáveres iban a párar a una fosa colectiva.
Algunos estudiosos están convencidos de que el cadá­ver de Jesús, como el de cualquier ajusticiado, especialmente si lo fue por sedición, acabaría en una fosa común donde, por razones higiénicas, se rociaba con cal viva. Sin embargo otros autores, más fiables por pertenecer a la facción católica, suponen que alguien lo robó (o lo compró a los sepultureros).
¿Quién rescató el cadáver de nuestro Redentor? El trabajo de retirar el cadáver y darle cristiana sepultura (en realidad todavía judía sepultura) recae, según la tradición, en un simple simpatizan­te, un sujeto que ni siquiera figuraba en la nómina de los apóstoles, un hombre piadoso y cabal al que conocemos por José de Arima­tea.

Apartir de aquí, dado que el bloguero firmante es un desmitificador pero no un fabulador, que cada quién elabore sus teorias al respecto.

Tellagorri


22 comentarios:

  1. MAESE TELLAGORRI....CON LA VENIA...

    Ciertamente tenéis fijación con mi persona y con mi pasado, rediós. Mediante vuestros escritos os complace hurgar en mis recuerdos, por lo que utilizando vuestra Máquina del Tiempo no me queda más remedio que penetrar en el jodido invento, cerrar la escotilla y poner el conmutador de fechas marcando Marzo de 1959, cuando a la sazón quien esto escribe tenía 17 abriles y viajó desde Roma a Tierra Santa en un viaje ciertamente alucinante a la vez que pecaminoso.

    Digo bien al mencionar la palabra alucinante, puesto que en el avión de Alitalia viajábamos 35 seminaristas acompañados de una docena de curas preceptores, más una veintena de monjas, monja arriba, monja abajo, en trance místico, todas más feas que la madre que las parió.

    Sin embargo en la sección de cola viajaban unas colegialas de Milán que estaban de toma pan y moja, lo que hizo que entre nosotros hubieran hostias con el fin de ir a mear a los lavabos situados en cola y de paso tirarnos el rollo con las nenas.

    A todo eso, los curas carabinas mosqueaos como un pavo en Nochebuena y las jodidas monjas dándonos la vara, llamándonos sinvergüenzas y pecadores pero comiéndonos con la mirada.

    Téngase en cuenta que en aquellos años nuestro grupo tenía una media de 18 años, con todas las hormonas disparadas y desparramadas de proa a popa del avión. O sea, que a bordo se montó una especie de salvaje aquelarre pre-orgásmico.

    El viaje fue una auténtica aventura, porque nuestro vuelo que tenía que tomar tierra en el aeropuerto Ben Gurion en Tel-Aviv, fue desviado al aeropuerto de Beirut, por no sé qué coño de avería técnica. Total, que aquella noche la pasamos todos revueltos en una minúscula sala de espera libanesa a media luz. Curas, monjas, seminaristas y nenas milanesas en común revoltijo de cuerpos y mentes. Y no prosigo, que simplemente recordando aquella noche me condeno.

    Lo cierto fue que al día siguiente tras aterrizar en Tel-Aviv, perdimos de vista a las colegialas y nos quedamos muy salidos y con ganas de meterla en caliente, pero con los curas y monjas por única compañía, pues ya me diréis vos qué plan. Después de pegarnos una panzada de autobús llegamos a Jerusalén.

    (SIGUE)

    ResponderEliminar
  2. (CONTINUACIÓN)

    Bueno, la verdad es que me he apartado de lo que en realidad quería comentaros, Maese Tellagorri.

    Cuando en vuestro texto citáis lugares de Jerusalén como "restaurantes, chiringuitos de falafel, kebab, té moruno y be­bidas gaseosas, pensiones, hoteles de tres o más estrellas, conventos, casas de ejercicios," etc,etc.... os habéis olvidado de un lugar preferente y mágico soñado por todos los seminaristas que formábamos aquella expedición de pecadores irredentos….

    Posiblemente sea por vuestro pudor innato, pero habéis obviado mencionar las casas de putas. Puterío y del fino el que se ejercía en un lupanar situado en una calleja que desembocaba en la Vía Dolorosa.

    Antes de efectuar nuestro primer Vía Crucis oficial, tres de nosotros tuvimos que pasar por el vía crucis de cambiar liras italianas por dólares USA, que en aquellos tiempos, las putas hebreas para abrirse de piernas, eran de la misma opinión que las putas italianas. Sólo aceptaban divisas.

    Y no os atreváis a dudar de cuanto os digo, porque vuestra Máquina del Tiempo funciona que te cagas y mi memoria todavía no me falla.

    Maese Tellagorri, quedad con Dios o con el diablo, pero ahora mismo me voy a flagelar la entrepierna y a hacer una novena a San Prepucio de Penetieso.

    ResponderEliminar
  3. MAESE DE VALERO

    Con vuestros recuerdos venís a dejar constancia de dos hechos básicos en vuestra hoy honorable persona :
    UNA : Que habeís sido, ya desde muy jovencito, aficionado a hurgar en el fondo de los lugares visitados para no tener susperficiales conocimientos de cada insula visitada.

    DOS que habeís sido un magnífico ejemplar de macho ibérico con todas las consecuencias, y aún a pesar de las túnicas seminariles, que os hubieran podido encadenar a ser un cordero del montón borreguil.

    Por San Petunio El Oloroso, que no soís curángano de faz escondida sino Caballero del Buen Facer.
    Ahhh, las escolares milanesas, quién las volviera a tener en cola de avión.

    Estas peregrinaciones a Lugares santos confortan mucho cualquier cosa menos el espíritu, afortunadamente.

    Quizá el gran teólogo Pandemio de Alzacorta os inspire una nueva tésis doctoral para vuestro blog y solaz de los visitantes.

    ResponderEliminar
  4. Tellagorri, yo respecto a estos temas siempre digo lo mismo: fuese quien fuese Cristo, hijo de Dios o un inteligente que se supo aprovechar de la situaciòn, l ùnica verdad es que fue una persona que cambiò para siempre la historia del mundo. Y es que cientos de guerras se han dearrollado en su nombres, mile sy miles de templos se han levantado en su honor, miles de personas han dedicado y dedican su vida a su recuerdo...por tanto, como figura històrica y bastante demostrada que existiò merece ser tenida en cuenta y respetada.

    Las demàs teorìas sobre su resurrecciòn o no muerte siempre m han interesado, ya desde joven leìa todos los libros sobre estos temas: su huida a Cachemira tras su fingida muerte, los evangelios apòcrifos, sus posibles hijos (los merovingios), sus hermanos, la sàbana santa, etc etc

    Por cierto, y hablando de la Sàbana Santa, como bien sabes vivo en Turìn, cuya catedral alberga tan santa reliquia (la màs santa de las santas), pues bien este 10 de abril tiene lugar la santa "ostensione de la sacra sindone", es ecir, que la haràn ver tras muchos anos, con presencia papal incluida (estarà del 10 al 23 de abril por si interesa)...para verla hay que reservar y yo ya lo he hecho porque tengo gran curiosidad, por cierto que tengo cita para el 13 de abril, martes y 13 paar màs senas y màs inrri, asì que ya te contarè mi experiencia mìstico-religiosa-divina de la muerte...

    Un saludo.

    ResponderEliminar
  5. CAROLVS II

    Me alegra lo que dices porque también yo respeto y mucho a los CREYENTES de cualquier religión que sea social, no exterminadora.

    Pero en estos temas entro por razón de que hay auténtica necesidad de DESMITIFICAR tanta patraña de tantos siglos y que eran absolutamente innecesarias para sostener la idea de un Jesús, dívino o no, que modificó durante dos mil años el modo de actuar de las gentes.

    Espero nos contarás con precisión lo que vieres el día 13 ese en el que tendrás opotunidad de tener cerca la Sábana Santa. Suerte inmensa la que tienes. Aunque sospecho que os la dejarán ver a una bastante alejada distancia.
    En fin, quedamos, los visitantes de blogs, a la espera de tus informaciones.

    ResponderEliminar
  6. Apreciado D. Javier:
    Me siento honrado por su mención a mis dudas sobre la resurrección de Cristo y, a la vez, impresionado por la estupenda explicación sobre tan discutido asunto. Me gustaría aportar mi punto de vista acerca del caos que produciría en el cristianismo si fuera cierto que Jesús no murió en la cruz. No creo que tal cosa destrozara la base del cristianismo por las siguientes razones:
    1) Las condiciones físicas en que lo retiraron de la cruz debían de ser lamentables.
    2) la medicina del año 33 no parece que estuviera capacitada para evitar el fallecimiento de Jesús después de las torturas a que fue sometido.
    3) El hecho de que fuera capaz de sanarse de sus mortales heridas, ¿no es, en si mismo, un milagro menos exagerado y más aceptable que la muerte y resurrección?
    De nuevo, muchas gracias por su magistral exposición.

    ResponderEliminar
  7. Que los judios disponían de una tecnología avanzadísima a su época no cabe la menor duda: control de la meteorología a capricho, inseminaciones artificiales, levitaciones, óptica láser para curar la ceguera... pero lo mejor fue lo de su señor Jesucristo, tras bajarlo de la cruz estabilizaron las constantes vitales de su lider criogénicamente durante tres días pera que hiciese su aparición estelar en el show de la Oprah Winphrey de la época (no podía salir antes porque había firmado una exclusiva y algún paparazzi le podía haber hecho un bajorrelieve "pillado").

    Labor documental exquisita.

    ResponderEliminar
  8. Apasionantes temas y muy bien documentados.
    Desde luego hay explicación lógica -por parte de los expertos- para todos los milagros de la época, incluso para la separación de las aguas atribuida a Moisés.

    También está claro el montaje y manipulación que a lo largo de los años ha hecho la iglesia para hacerse con la fe de las gentes sencillas y de mentes débiles.

    A pesar de todo ello siempre nos quedan las dudas:
    -Cómo pudo sobrevivir a tan brutal linchamiento.
    -Si sobrevivió, cómo pudo presentarse ante los apóstoles sin muestra de debilidad o dolor.
    -¿No mostraba su rostro cicatrices?
    -Cómo desapareció posteriormente sin ser descubierto o reconocido por nadie.
    -Etc, etc., etc.

    ¿Sabes? Yo he optado por no comerme el tarro con estos asuntos, pues está claro que no me van a llevar a ninguna postura concluyente razonada (por ahora).
    Así que me limito a escuchar la voz de los expertos y sus estudios; pero me temo que las demostraciones han de ser muy exactas y contundentes para acabar con la fe, esa fe que -no nos olvidemos- mueve montañas.

    Besos.

    ResponderEliminar
  9. Os veo a todos muy metidos en la Semana Santa, yo como no podía ser de otra manera, leo con atención todo lo que comentáis al respecto, de lo que seguro salgo sabiendo más.
    Saludos

    ResponderEliminar
  10. SÍ BWANA

    Muy correctos y racionales los argumentos que deduces sobre el post.

    Comprenderás que no estoy capacitado para contestarte.

    ResponderEliminar
  11. ISRA

    Eres un hipercrítico con soberbia intelectual y eso te va a llevar al Infierno. Eres de los que llaman TRUCOS a los milagros. Qué descreído estás y no pones la buena voluntad que pone, por ejemplo, De Valero quien en los Lugares santos o Santos lugares se dedicaba a buscar lo que las milanesas le habían intuído.

    ResponderEliminar
  12. DOÑA ELENA

    Tú, como siempre, práctica y razonada.

    Respecto a las preguntas que haces tienen su lógica y no hay contestación.

    No es posible, en este tipo de temas, PODER SABER con exactitud lo que es patraña y lo que no lo es.
    Unicamente he puesto la descubierto lo que la Historia explica : que los santos lugares se reinventaron en el siglo III y exprofeso.

    Respecto a la Sábana de Turín, ahora que los científicos van diciendo que no cerreponde a un CADAVER, sabemos que los cardenales están en la onda de difundir que ES FALSA.

    ResponderEliminar
  13. No si al al final unos pobres blogueros tumbaran el chiringuito de la verdad verdadera. Como ya sobre la resurrección o no muerte, esta casi todo dicho. Yo después de estos días donde el palomo me visito en forma de distintos documentales sobre la sabana de Turín, me niego a escribir santa ya que ni el Vaticano se atreve a tanto, y yo, ¡oh! pobre pecador no "osare" a ser más papista que el Papa. Pero si tengo una teoría de la sabana de marras, eso sí reconozco que es sórdida a más no poder, y solo podía salir de una mente retorcida como la mía.

    Pero es tan simple que a la fuerza tiene que ser verdad, verdadera. La sabana esa que apareció como por arte de magia es la sabana donde la Excelentisima Dama de las Camelias, más conocida como Teresita Fdez. de la Vega realizo su conocido como última subida a la exploración de su clito... allá por el siglo IV d.c.


    Lo siento pero soy incapaz de seguir, se me revuelven las tripas, pero mi alma demoníaca y consumida por las fotos que a colgado el bloguero reconvertido en fustigador de los hombres don Isra. Humildemente pido disculpas por los malestares generales que mi desgraciado comentario pudiera ocasionar a tan distinguidos comentaristas, así como al titular de este blog.


    Un saludo

    ResponderEliminar
  14. Maese Tellagorri...por alusiones pictóricas...

    Observo con cierto pasmo la pintura de El Greco que campea y encabeza a la diestra de vuestro blog.

    No sé si os acordaréis que hubo un pacto entre caballeros mediante el cual os comprometísteis a no difundir mi imágen de cuando yo era Inquisidor General del Reyno. Os hago tal observación puesto que desde el reducto de las iluminadas por un candil, ya se están haciendo chascarrillos a costa de mi semejanza con tal sujeto.

    Aunque a decir verdad me complacen tales veleidades y semejanzas, desde que a una de las iluminadas mis espías de StatCounter la han pillado cagando fuera del tiesto, puesto que desde un blog del Opus se le ha ocurrido inmiscuirse en mi labor inquisitorial.

    Ante tal desmán no he tenido más remedio que lanzar desde los comentarios de mi blog, un parte de excomunión destinado a esa hereje y a sus seguidores.

    Dios o el Diablo nos asistan, Maese Tellagorri, pero os prometo que estoy preparando un Acto de Fe para convertir en chicharrones a todas esas iluminadas con un candil.

    ResponderEliminar
  15. CABALLERO ZP

    Estamos todos bajo el sindrome de los pasos, no sé si perdidos o hallados, pero llevamos una semana de Santa Semana.

    ResponderEliminar
  16. JAVIER POL

    Eres terrorífico cuando fabulas en busca de soluciones porque sólo a una mente inducida por ISRA puede ocurrirsele semejante horror.

    ResponderEliminar
  17. SEÑOR DE VALERO

    Cuando el humilde bloguero que honraís con vuestra visita se ha enfrentado a la figura que EL GRECO había pintado del Inquisidor General, me ha sido imposible sustraerme a la idea de exhibirla y comprobar, y da a comprobar a los demás, que cuanto decís de vuestros pasados es TOTALEMENTE CIERTO.

    No repareís en INSIGNIFICANTES que como personas son dignas de una hoguera, ya que sus iluminaciones acaban en cuanto rozan a un macho, sea cabrío o sotanado.

    ResponderEliminar
  18. Solución: UNIVERSOS PARALELOS
    Método:Migración de un universo a otro del Nazareno no crucificado y viceversa a traves de un agujero blanco de Schwarzchild. Cumpliendo así con la resurección a la vida en el universo del calvario.
    Conclusiones:
    a)Cristo era judio y Einstein también
    b)Según la mística rabanita existen incontables futuros, los cuales existen todos al mismo tiempo. Los antiguos mekabelim y los físicos contemporáneos concuerdan:
    ¡Los universos paralelos son una realidad!.
    c)Los cabalistas antiguos enseñan que los universos paralelos crecen progresivamente con más orden, alcanzando finalmente un mundo de paraíso, felicidad y vida interminable.

    Los caminos del Señor son inescrutables

    ResponderEliminar
  19. Interesante post Tellagorri de mis entretelas.

    Creo que me moriré sin ver ni pisar Tierra Santa, ya me gustaría pero..., de todas maneras no está nada mal vivir en la Tierra Bendita, Andalucía.

    Zparo tiene que estar contento con Sevilla, se han "colocao una jartá de sevillanos/as" y de nuevo hemos superado los beneficios y las visitas turísticas, Él no nos visitó pero se fue de vacaciones el muy ladino, vamos a ver qué pasa en la Feria de Abril. Abrazos

    ResponderEliminar
  20. JODÓ, DAMS

    Boquiabierto me he quedado con tus teoría.

    Una pregunta =

    El blanco ese de Schwarzchild no sirve para que nos traslademos a un lugar en donde no exista ZP?

    Brillante comentario el tuyo.

    ResponderEliminar
  21. PASION

    No creo que te pierdas nadapor no ir a Tierra Santa porque todo lo existente ahora es inventado y no tiene nada que ver con la de la época de Jesucristo.

    Creo, por lo que cuentas que el 50% de los sevillanos están "colocaos" por los sociatas. Y eso os trae turistas, bueno, un ingreso más a contabilizar, aunque sospecho que si es así hasta los negocios de hostelería estarán en manos de esa cuadrilla de mangantes.

    ResponderEliminar
  22. DAMS

    Se me olvidaba la recitación diaria del :
    "Alá es grande y los caminos del Señor son inescrutables".

    ResponderEliminar