18 marzo 2014

El "Cesar" Putin

Las claves para entender al hombre que se zampa territorio ajeno, esto es Crimea, son : creció en la pobreza, se hizo espía a los 23 años, tiene una novia gimnasta... La crisis le pilla en su momento de máxima popularidad.

Bucea, cabalga, le gustan los animales y los relojes muy caros. Tres veces presidente de Rusia, Vladimir Putin se desenvuelve con soltura entre armas de fuego. Sibilino, reservado y orgulloso, sirvió en los servicios secretos soviéticos durante 16 años. Los libros que recomienda a sus colaboradores fueron escritos por tres filósofos nacionales (Vladimir Soloviov, Nikolai Berdiayev e Ivan Ilin) que defendieron entre finales del XIX y principios del XX el renacimiento espiritual ruso.

Vladimir Vladimirovich conserva todavía tics de espía. Ingresó en el KGB con 23 años, tras su paso por la universidad. Después de 1977 trabajó brevemente en el Segundo Directorio, encargado del contraespionaje, antes de ser transferido al Primer Directorio (operaciones en el exterior), donde debía espiar a los extranjeros y a los funcionarios consulares en Leningrado. Sus principales misiones consistían en el reclutamiento de extranjeros y la coordinación con la Stasi.

Llegó a la cumbre de la organización cuando fue nombrado director del FSB, heredero directo del KGB, en julio de 1998. Reconoció ante las cámaras de la televisión estatal rusa que se separaba de su mujer, Ludmila, después de 30 años de convivencia. "Nuestras hijas han crecido y tienen sus propias vidas", añadió Desde 2008 no ha cesado el rumor de su romance con una famosa gimnasta ya retirada. Su nombre: Alina Kabayeva. Tiene 30 años, es diputada de la Duma Estatal (Cámara Baja del Parlamento) y fue una de las últimas portadoras de la antorcha olímpica en Sochi.

Putin es tan celoso de su vida privada que los detalles sobre sus dos hijas se han convertido en un secreto de Estado y se escuda en una ley que permite cerrar a un medio de comunicación que "transmite rumores o mentiras".

JEFE CHECHENO BASAYEV
Implacable con sus enemigos, a los terroristas oriundos de Chechenia que se inmolaban en estaciones de ferrocarril o secuestraban hospitales enteros les fue persiguiendo "hasta los retretes" y exterminando como "ratas en su madriguera". Sin pelos en la lengua. Sin contemplaciones. Así los trataba ya en 1999, siendo primer ministro de Boris Yeltsin, cuando una ola de atentados sembró el pánico en el transporte de Moscú y en ciertas regiones del Cáucaso.

Ha estado marcado, además, por los asesinatos de dos personas que se enfrentaron con valentía al poder que él encarna. El caso más sonado fue probablemente el de Alexander Litvinenko; su vida pero sobre todo su muerte parecen sacadas de una novela de John le Carré. Alexander Litvinenko tuvo la osadía de denunciar una serie de irregularidades dentro del FSB y teminó envenenado con polonio-210 radiactivo.

 Alexander Litvinenko
La segunda muerte violenta, también ocurrida en 2006, tuvo como protagonista a Anna Politkovskaya, una incansable periodista y activista defensora de los derechos humanos que denunció sin ambages las palizas, violaciones y torturas que las fuerzas de seguridad rusas practicaban a los sospechosos de los campos de filtración del Cáucaso.

Hasta ahora se ha llevado bien con dos ex jefes de Gobierno europeos: el alemán Gerhard Schröder y el italiano Silvio Berlusconi.
Pero no se puede decir lo mismo de Barack Obama. La falta de química entre ambos líderes ha sido tan evidente que quedó plasmada en más de una instantánea. Pese al pragmatismo de Putin, las relaciones con EEUU no habían mejorado ni un ápice hasta ahora. Con la UE, los vínculos habían sido más correctos, sin llegar a ser nunca excelentes.

La que fuera consejera de Seguridad con George Bush hijo cree que el actual inquilino del Kremlin intentará que vuelvan para atrás las agujas del reloj de la Historia, "mientras se lo permita la intimidación mediante el poder militar, el apalancamiento económico y la inacción occidental". Rice habla ruso y es especialista en la URSS. Sabe pues lo que dice.

Proviene de la segunda ciudad del país, San Petersburgo, que hace 61 años (cuando él nació) se llamaba Leningrado. Allí se crió y estudió Derecho, donde se graduó en 1975 con un trabajo sobre la política de Estados Unidos en África. Vladimir era el tercer varón de una familia de clase media-baja. Sus dos hermanos mayores, Viktor y Albert, fallecieron antes de que él llegara al mundo. En resumen, creció solo. Eso marcó definitivamente su carácter. La niñez estuvo marcada por las estrecheces económicas: vivió en una komunalka o piso comunal donde sus padres compartían espacio con otras familias. Ese detalle forma parte de su autobiografía,

Su primer padrino en Leningrado fue Anatoli Sobchak, quien más tarde se convertiría en el alcalde de la ciudad a orillas del río Neva. Sobchak, un reputado político reformista, le reclutó como asesor internacional en 1990. De San Petersburgo también procede Dimitri Medvedev, con quien Putin ha formado una especie de tandemcracia, pues ambos ocupan los dos más altos cargos del Estado (presidente y primer ministro) y se los intercambian para no violar la Constitución y seguir así al mando.

Finalmente el nuevo zar construyó una red de hombres de confianza situados en las carteras gubernamentales más destacadas. Ahí están Igor Shenin (viceprimer ministro), Alexei Kudrin (Finanzas) o Serguei Ivanov (Defensa), entre otros nombres.

Cinturón negro, cazador de ballenas, piloto de Fórmula 1... A Putin le gusta hacer deporte. Practica judo desde la infancia y es cinturón negro sexto dan. También es experto luchador de karate. La caza es, al parecer, su hobbie preferido. También nada y pesca, a menudo con el torso desnudo como atestiguan los documentos gráficos. Dispara con pistola y fusil. Tan pronto sale a lanzar tranquilizantes a una ballena gris para que los científicos tomen muestras de su piel como se monta en un ultraligero diseñado para investigar las migraciones de aves. Ha pilotado un coche Fórmula-1 Renault. Ha usado una imponente Harley Davidson. Ha cogido los mandos de un caza de combate Sujoi-27. Ha jugado al hockey sobre hielo con su selección en 2012 en un partido contra Finlandia…

La lista de eventos tipo macho resultaría interminable. .

Boris Yeltsin fue su "padre" y Abramovich, su "hermano". Sin Boris Nikolayevich Yeltsin, Putin no habría tenido ninguna opción de éxito. El primer presidente de la Rusia postsoviética le dejó una herencia caótica, con el prestigio internacional por los suelos y un sistema financiero debilitado por la crisis del rublo de 1998. Hacía falta un restaurador del orgullo patrio. El binomio Yeltsin-Putin funcionó lo suficientemente bien para que alcanzara un acuerdo entre caballeros.

Odia el fracaso: su peor drama fue el hundimiento del Kursk. Putin encaja fatal el fiasco. Su peor revés sociopolítico se produjo en agosto de 2000, nada más saborear la miel del poder, cuando el submarino ruso K-141 Kursk se fue a pique con 118 personas entre oficiales y marineros a bordo, mientras participaba en unas maniobras navales. Putin estaba de vacaciones en su residencia de Sochi y tardó ¡cinco días! en presentarse en el mar de Barents para consolar a los familiares de las víctimas. Muchos no le perdonaron el error. Por fortuna para él, la tragedia del Kursk se produjo cuando arrancaba su carrera. .

En la cumbre de su popularidad: le apoya el 68% de los rusos. Nuestro hombre hace gala de un profundo paternalismo, entendido como la tendencia a aplicar a las relaciones políticas las formas de autoridad y protección propias del padre en la familia tradicional. Esa tendencia le está reportando ahora pingües beneficios en cuanto a imagen. Según los estudios realizados a finales de febrero por los dos principales institutos demoscópicos del país  su popularidad ha llegado a una cota récord, situándose en el 68%, nueve puntos porcentuales más que en el mismo periodo de 2013. Ese paternalismo se mezcla con otros ingredientes no menos fuertes.

El putinismo, en definitiva, combina el autoritarismo paternalista y nacionalista con la corrupción, el amiguismo, el liberalismo económico y la falta de transparencia gubernamental. .

Ahora la línea roja no es Crimea sino la partición de Ucrania.

(Con información de F. Herranz)


13 comentarios:

  1. De todas formas no se que es peor si un déspota tirano como este o un maricomplejines pijoprogre como el conguito

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    1. DON CHAFACHORRAS
      En esa elección entre los dos personajes que citas, escojo al ruski. Porque para golfadas estilo Putin el de aquí y sus "compas" los superan o igualan, y para ausencia de democracia ambos van parejos, y puestos a resolver asuntos, el ruso lo hace. Cosa que el Maricomplejines jamás lo hará por miedo a hacerse "pupa".
      Y no estoy defendiendo a un tirano sino siendo práctico en los asuntos que nos incumben.

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  2. Al neozar este no lo querria a menos de 2000 km de distancia. Es un exKGB que sigue aplicando los metodos de la union sovietica: purga en forma de asesinato soterrado, un tipo peligrosisimo que ha violado la legalidad interancional.

    Pero de lejos, aún peor es lo que estoy leyendo a no pocos europeos con todo esto de crimea. Estoy leyendo lo de "ucrania esta en manos de neonazis" "ucrania fue atacada por Merkel y alemania", etc, hasta la nausea. El fin es claro, "justificar" lo que ha hecho este payaso peligroso.

    Incluso ayer, youtube me sacaba como anuncio, ergo patrocinado por alguien, este video:
    https://www.youtube.com/watch?v=IQW_Miknqt0

    Señores, occidente se ha tragado una campaña claramente rusa para "justificar" lo que no es sino un ataque militar a una nacion soberana. Ahora, las cosas como son, desde Kosovo, todo vale, y la culpa tambien es nuestra.

    Aparte, están los argumentos de si Crimea era rusa, de si su poblacion es tal o cual, o de si la historia fue injusta cuando la u.sovietica regalo esas tierras a ucrancia. Eso es un debate aparte, que no deberia mezclarse con todo esto.

    En fin, realpolitik sustentada en armas nucleares, bombarderos y tanques. Los buenistas y mentecatos pacifistas no se en que agujero se habran escondido estas semanas.

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    1. SEÑOR OGRO
      Claro que es un tipo peligrosísimo. Pero lo mismo decían los zurdosos de Bush por invadir Irak, Kosovo y otras muchas zonas del Mundo bajo su influencia. Y por las mismas e idénticas razones.

      Ni los unos, los milicos del Pentágono, ni los otros , los KGB que gobiernan en Rusia, son nada parecido al concepto de democracia y de libertades.
      Tampoco lo ha sido nunca el Vaticano en su práctica diaria y no por ello había excelentes hombres y mujeres dedicados a ayudar al prójimo en nombre de esa Entidad.

      Los europeos nada podemos decir porque bastante tenemos cada uno en su país con los cencerros secesionistas : Escocia, Euskadi, Cataluña, Liga del Norte italiana, Bretaña en Francia, flamencos en Bélgica, etc. etc.

      Usa ha abusado de su poder militar en las últimas décadas más y mejor que los rusos y los chinos. Lo que es un milagro es que China no se haya tragado aún a Taiwan.

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  3. Veremos por dónde salen las cosas, porque estos asuntos se sabe como empiezan, pero no como acaban y nuestros brillantes políticos, economistas y demás, harán los oportunos análisis, en los que siempre aciertan, claro, como los hacen a toro pasado.
    Mientras habrá muertos, desplazados, afectados varios, con los que se jugará como si fueran naipes de una baraja, porque a los que juegan la partida, poco les importa que el 3 de picas tenga alma, familia y dignidad.

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    1. DON TRECCE
      Los economistas mejor que se dediquen a la metereología, que es lo suyo, y los políticos están incapacitados fisica y mentalmente para decir una VERDAD.

      Por tanto, por lógica, cabe pensar que los ucranianos se van a callar no vaya a ser que se encuentren un día con tankes rusos en sus casas. Putin no hará, de momento, nada de nada. Esperar a que los pro-rusos de Ucrania le pidan que se enexione media Ucrania, la pro-rusa. Ese es mi parecer y sometido a totales errores.

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  4. EXCELENTE ENTRADA, AMIGO TELLAGORRI, QUE NADA TIENE QUE ENVIDIAR A LOS TEXTOS DE MÁS DE UN PLUMILLA DE RELUMBRÓN.
    LO QUE MÁS ME INTERESA DEL "CASO RUSO", MÁS ALLÁ DE SUS REPERCUSIONES INTERNACIONALES, ES SU PARECIDO CON EL DE ESPAÑA, YA QUE COMPARTIMOS EL MISMO ENDÉMICO MAL: SÓLO CONOCEMOS LA PSEUDODEMOCRACIA COMO COARTADA DE SEÑORITOS PARA HACER DE ESTO UN CORTIJO REVESTIDO DE OROPEL, O LA DICTADURA QUE NOS PONGA EN NUESTRO SITIO PARA QUE SEAMOS BUENECITOS.
    SOSPECHO QUE TANTO EL PUEBLO RUSO COMO EL ESPAÑOL HAN DE LLEVAR ETERNAMENTE LA TOGA VIRIL. SON DOS ADOLESCENTES CON DERECHO A VOTO.
    UN ABRAZO. QUEDA A SU DISPOSICIÓN,

    M...

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    1. DON MISÁNTROPO
      Muchas gracias por tus elogios.
      Estoy de acuerdo : no creo tampoco yo que haya muchas diferencias en cuanto a corrupciones, ausencia de control del ejecutivo por los diputados y jueces vendidos a los partidos políticos o al oro de los narcos, prebendas de jeques árabes todos los carguillos políticos, etcv. etc., entre la RUSIA DE PUTIN y la ESPAÑA post-franquista.

      Ese recuerdo a las costumbres de los optimates romanos es muy bonito.

      Saludos

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  5. Menos mal que alguien recuerda el glorioso palmarés del andoba porque es el héroe del momento para muchos y no todos a siniestra (conste que su inteligencia y estrategia en no pocas ocasiones hay que reconocérsela) pero hay que contarlo todito tó...y ya te digo que ando todo el día discutiendo por ahí en foros y no salgo de mi asombro.

    By the way, aparte de echar en falta los berridos antiimperialistas de rigor, lo mismo a cuenta del lujerío que gasta saliendo por esas puertas de oro que no las hay en el Vaticano ni en la Casa Blanca.

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    1. DOÑA
      Temía perderme tu juiciosa opinión de Reina de Bloggueras respecto al mozo ruski y sus fazañas, pero ahora me siento contento tras leer que no te ha parecido tan mal la semblanza. En los foros esos de Twiter seguro que hay montones de chocholos que lo tienen por el Señor de las Gambas o el no va más de la "democracia" a lo griego.

      En cualquier caso y aunque te parezca una "varvaridaz" prefiero la forma de gobernar putinesca que la del memo que nos caído no se sabe de dónde, ya que para ahora habría exterminado a todos los Bildus, y no quedaban en Melilla ni vendedores de helados.

      Ví hace un par de días el salón en donde era aclamado, no sé si ruso oficial o ruso particular, y ya hubiera querido Felipe II tener uno parecido en el El Escorial.

      Para mi gusto al Ruski éste le falta al lado una belleza como la Vicegallina que tuvimos para que saliera con cara más alegre en las afotos.

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  6. Putin, ese ex-KGB que, siendo fiel a su palabra y creencias, está actuando con el objetivo de volver a colocar a Rusia a la cabeza de los órganos que rigen el tinglado.
    No seré yo quien justifique al Oso Ruso. Su acción para con Crimea es, bajo mi punto de vista, ilegal desde la A hasta la Z... pero, ¡ah, amigo! Rusia no está por la labor de ver cómo, unos pocos países, se reparten el mundo a su antojo, sin contar con la que, antaño, fue superpotencia. Los rusos, orgullosos ellos como cualquier otra nación histórica (menos España, claro, que aquí estamos hechos de otra pasta), quieren recuperar su posición en el escenario internacional. Un país enorme, repleto de recursos naturales y gente capaz que, como sucede en gran parte de los países, sucumbe ante la propaganda nacionalista y los deseos futuros. Putin, y Rusia, quiere tener voz en el panorama internacional, y lo está consiguiendo. Principalmente porque los USA, con el Noble de la Paz, está por no hacer nada, demostrando lo "zapateril" que nos salió el presidente, y la UE... bueno... la UE nunca pintó nada.
    Rusia, aliada de China y con relaciones fuertes en Hispanoamérica, está jugando sus cartas, sin mostrar ni pizca de remordimiento a la hora de violar las leyes internacionales, los mandatos de la ONU o apoyar regímenes como el de Maduro y demás...aunque, siendo realistas, ¿qué es la ONU? ¿Qué las Leyes Internacionales? ¿Quién osará defenderlas cuando el Tío Sam escurra el bulto? ¿Margallo? ¿Rajoy? ¿Merkel?
    No seamos ingenuos. La fuerza de A se contrarresta con la fuerza de B... y si B no está, el problema no puede hacer otra cosa que no sea crecer.

    Un saludo.

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    1. DON HEREP
      Lo ves con el realismo que es necesario tener para nalizar estas cosas, dejando las visceralidades ideológicas en el cajón.
      Desde los tiempos de Pedro I El Grande han sido superpotencia mundial y ahora no quieren perder esa condición. Como bien dices, exactamente lo contrario que los españoles que eramos los amos del Mundo y sólo queremos ser como Marruecos.

      Putin hace lo mismo que los presidentes yankees en cada momento, y que los dirigentes chinos desde Mao.

      Las que llamas FUERZAS B unicamente se movilizan cuando les toca en su propia zona. Y respecto a Europa ni así, porque si los chinos invadieran Europa con portaviones y bombarderos, las Merkel y Hollande irían corriendo a Washington.

      Las leyes internacionales jamás han tenido aplicación y ahora tampoco. Ni a Cayo Julio Cesar, ni a Napo ni a Felipe II ni a Theodoro Roosvelt les han impedido jamás hacer los que el cuerpo les pedía.

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