31 enero 2013

Constitución que funciona

La Constitución de Estados Unidos es el fruto de un largo proceso histórico iniciado en Inglaterra con la Reforma del siglo XVI. Mientras el continente eu­ropeo se desgarraba en el conflicto entre Reforma y Con­trarreforma, la Inglaterra de Enrique VIII optó por un comportamiento cuando menos peculiar.

El monarca inglés provocó un cisma con Roma, pero, a la vez, se manifestó ferozmente antiprotestante persiguiendo a los partidarios de la Reforma.Un sector considerable de la Iglesia an­glicana se sentía a gusto con una forma de protestantismo muy suave que, históricamente se consolidaría como la confesión protestante que amoldaba la realidad eclesial existente a los modelos contenidos en la Biblia.

Los partidarios de esta postura reci­bieron diversos nombres: puritanos, porque perseguían un ideal de pureza bíblica; presbiterianos, porque sus iglesias se gobernaban mediante presbíteros elegidos en lugar de siguiendo un sistema episcopal como el católico romano; y también calvinistas, porque su teología estaba inspirada vehementemente en las obras del reformador francés Juan Calvino.
Sin duda, se trataba de principios que, actualmente, son de reconocimiento prácticamente general en Occidente pero que en el siglo XVI distaban mucho de ser aceptables.
De hecho, los famosos Padres Peregrinos del barco MayFlower no eran sino un grupo de puritanos.
La llegada de los puritanos a lo que después sería Es­tados Unidos fue un acontecimiento de enorme impor­tancia para el futuro desarrollo de la Constitución.
Desde luego, la influencia educativa fue esencial, ya que no en vano Harvard (como posteriormente Yale y Princeton) fue fundada en 1636 por los puritanos.

De los aproximada­mente tres millones de americanos que vivían a la sazón en aquel territorio, 900.000 eran puritanos de origen escocés, 600.000 eran puritanos ingleses y otros 500.000 eran cal­vinistas de extracción holandesa, alemana o francesa.
Así, dos terceras partes al menos de los habitantes de los futuros Estados Unidos eran calvinistas puritanos y el otro tercio en su mayoría se identifi­caba con grupos de disidentes como los cuáqueros o los bautistas.

El influjo de los puritanos resultó especial­mente decisivo en la redacción de la Constitución. Cierta­mente, los cuatro principios del calvinismo político  fueron esenciales a la hora de darle forma.

Conforme a esos principios, el poder político debe dividirse para evitar que se concentre en unas manos  (lo que siempre derivará en corrupción y tiranía) y tiene que ser con­trolado.


Esa misma línea fue la seguida a finales del siglo XVIII para redactar la Constitución americana.
De hecho, el pri­mer texto independentista norteamericano no fue, como generalmente se piensa, la declaración de independencia redactada por Thomas Jefferson sino la obra de la que el futuro presidente norteamericano la copió. Ésta no fue otra que la Declaración de Mecklenburg, un texto suscri­to por presbiterianos de origen escocés e irlandés, en Ca­rolina del Norte, el 20 de mayo de 1775.

La Declaración de Mecklenburg contenía todos los puntos que un año después desarrollaría Jefferson, desde la soberanía nacional a la lucha contra la tiranía pasando por el carácter electivo del poder político y la división de poderes.
Mientras que el optimismo antropológico de Rousseau derivaba en el terror de 1792 y, al fin y a la postre, en la dictadura na­poleónica, y el no menos optimista socialismo propugna­ba un paraíso cuya antesala era la dictadura del proleta­riado, los puritanos habían trasladado desde sus iglesias a la totalidad de la nación un sistema de gobierno que podía basarse en conceptos  que resultaron de una eficacia y solidez incomparables.

Si a este aspecto su­mamos, además, el impulso de la práctica de cualidades como el trabajo, el impulso empresarial, y el énfasis en la educación, con­taremos con muchas de las claves para explicar no sólo la evolución histórica de Estados Unidos sino también sus diferencias con los demás países del continente.



6 comentarios:

  1. Y sobre todo que es una lección para los incultos de nuestros asquerosos políticos que hablan de ir a un estado federal, hay que ser ignorantes, un estado federal se forma con estados preexistentes que desean unirse para ser más fuertes. No olvidemos que tenían distintas constituciones, distintos idiomas e incluso distintas monedas.

    Y otra lección para el mundo, especialmente para España, y es su lema para el sello desde 1782 E PLURIBUS UNUM (de muchos, uno).

    Ejemplar la separación de poderes y los contrapesos (inclusive la prensa), y mucha menos corrupción, y eso que tiene a los lobbys funcionando a toda máquina.

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    1. DON ISRA
      Me alegra que también a tí te guste la Consti Usa. Al menos allí funciona. Y lo de FEDERAL viene porque, como bien explicas, primero crearon una Confederación de Colonias independizadas, cada una con su propia soberania, su gobierno y su moneda. Y de ahí pasaron a la FEDERACIÓN de Estados.
      Como aquí los únicos Estados independientes que hay son VILANOVA y LA GELTRÚ, junto con CARTAGENA, no se pueden federar esos dos pueblos, dejando a los sociatas organizarlos, porque hay poca mamandurria en sólo dos localidades. Y además quedan un poco lejos la una de la otra.

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  2. el trabajo, el impulso emprendedor, el énfasis en la educación... exacto, esos fueron los valores que les hicieron grandes y fuertes, justo lo que hoy está -también allí- de capa caida, sustituidos por la palabrería del Estado del bienestar.
    Gracias, Tella, por informarme d la Declaración de Mecklenburg, que no conocía o no recordaba.
    saludos blogueros

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    1. DON JOSÉ ANTONIO
      Ya ves que coincidimos en que aplicando esos principios que citas cualquier colectividad avanza y se enriquece, como les ocurrió a los estadounidenses. No tuvieron que hacer ninguna revolución con guillotinas ni soportar dictaduras. Les bastó con aplicar unos principios que estaban implícitos en los Ilustrados y la Enciclopedia Francesa.

      Con ese espíritu religioso-humanístico redactaron su Consti y su modo de organizar la vida en común. Por algo habían vivido y respirado algunos de sus fundadores como Francklin el ambiente encicolpedista de los Diderot, D´Alambert, Montesquieu, etc.

      Cordiales saludos

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  3. Estados Unidos dista muchísimo de nuestra vieja Europa. Mientras que aquí queremos hacer el batiburrillo de todo lo que había, cediendo para todos y conservándolo todo, allí hicieron justamente lo contrario. Empezaron de cero. Empezaron igualando derechos y obligaciones y planteándose ser un nuevo Estado en que la Libertad, la igualdad y la prosperidad fuera la nota imperante. No es extraño que, tras tantísimos años, se siga hablando del sueño americano.

    Un saludazo.

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    1. DON PEDRO
      Es tal como lo explicas.
      Se basaron en los principios de los Ilustrados que habían adsorbido como esponjas y mezclándolo con sus ideas calvinistas consiguieron algo que en Europa unicamente Gran Bretaña y Francia tienen proximidad. Pero sólo proximidad porque en Europa aún se reverencian los títulos nobiliarios y para los gringos los únicos títulos son los obtenidos por méritos propios.

      Un cordial saludo

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