Casi 2.000 unidades del mítico Citroën 2CV se han dado cita en la localidad portuguesa de Ericeira para celebrar un nuevo encuentro de aficionados de este modelo de Citroën, un coche que sigue levantando pasiones. Una reunión de amigos en la que el principal objetivo es disfrutar de los coches históricos y pasar momentos divertidos.
Esta entrañable reunión, la mayor concentración dedicada a este mítico modelo francés, comenzó en el año 1975 cuando la ciudad elegida fue Helsinki, y desde entonces cada dos años se reúnen en una ciudad distinta. La vigésima edición, en 2013, se celebró en España, en concreto en las instalaciones de Motorland en la localidad turolense de Alcañiz.
En esta reunión se vieron coches de todas las nacionalidades. Además de los numerosos vehículos portugueses llegaron coches de España, de Francia, de Alemania, de Holanda y de muchos otros países. Coche de todos los colores, algunos con unas pinturas muy llamativas, auténticas creaciones artísticas.
Ya tienen mérito los que conducen esos coches desde Alemania, Holanda, Francia, etc. hasta Portugal. Y vuelta a casa.
ResponderEliminarDOÑA CASILDA.
EliminarCierto. Con la velocidad que alcanzan realizar varios miles de kilómetros en ellos debe de resultar muy largo.
En los años 50 y 60, dado que no había ni autopistas ni carreteras dignas, esos coches se adaptaban de maravilla a aquellos caminos. Yo tuve un "Mehari", una versión del "dos caballos" en modelo jeep de juguete y disfruté como un enano con él.
ResponderEliminarDON SERGIUS.
EliminarAsí es. No había problema de velocidad porque la que tienen era más que suficiente para aquellas carreteras.
El Mehari era precioso y la lástima es que tenian techo de lona y con mucho viento casi volaban.
En aquellos años más de una vez nos metimos 8 o más personas en un coche de esos que tenía una chica, y el muy valiente aguantaba todo.
ResponderEliminarDON VILLAR.
EliminarNo me extraña nada lo que cuentas porque abriendo la capota de lona de encima se podian meter unos encima de otros.
Eso va a Helsinki, Alcañiz, San Petersburgo y hasta Pekin. Son como de titanio. No llevan ni bomba de agua ni refrigeración por líquido por lo que nunca se calentaban los motores dado que se refrigeraban por aire.
ResponderEliminarEfectivamente, por lo general casi todos los modelos de la Citroen de refrigeraban por aire y la ausencia de un radiador con refrigerante era una gran ventaja.
EliminarPeculiares y magníficos automóviles.
ResponderEliminarMás de un verano tuve a mi disposición uno que me prestaban y bien que me vino.
DON TRECCE.
ResponderEliminarEran una gozada para trasladarse en verano. Y duros como el acero de Toledo.