31 octubre 2012

Hermanos Amador y etarras

Son dos hermanos gitanos y han metido el miedo en el cuerpo a los presos de ETA. Cuatro acabaron en la enfermería tras toparse con ellos.

Luis Amador, 34 años y una cabeza de tigre tatuada en su antebrazo derecho, apura la tarde apoltronado en el sofá de su casa. Hoy se ha levantado de buen humor.Sólo se crispa cuando surge un tema de conversación: los terroristas con los que compartió encierro durante 15 años.

-Son todos unos acojonaos. ¡Les pegas una galleta y salen corriendo! 
Luis salió del trullo hace tres semanas. Su hermano Juan, de 36 años, sigue encerrado en la prisión de Puerto I (Cádiz), donde ocupa una celda en el módulo de máxima seguridad. Los funcionarios están obsesionados con que no se cruce con etarras. El lío estaría asegurado.

"Si yo tengo acojonaos a los vascos... ¡Mi hermano mucho más!".

Tal es la paranoia de los reclusos de la banda que han amenazado con amotinarse si meten a un Amador en su módulo. Ellos, terroristas con 800 muertos a sus espaldas, temen a un par de quinquis de Murcia. El terror lo confirma el último informe de Etxerat, la asociación de familiares de presos etarras. Allí se dedica una página a las andanzas de los Amador. "Queremos denunciar la actitud de Instituciones Penitenciarias por trasladar a preso con un historial como el suyo a los módulos donde hay presos vascos... Los familiares vivimos con sufrimiento y miedo este tipo de situaciones".

Luis suelta una risotada cuando escucha la denuncia de Etxerat. No sabía que su leyenda de tipo duro había llegado a "España del Norte", como llama a Euskadi. Pero tampoco se sorprende demasiado. "Mucho matar niños, pero luego son unos cobardes", insiste. "Había ocho o nueve en mi módulo del Puerto I. Yo solito los tenía acojonaos a todos. ¡Y eso que no les hacía nada! Pero oían mi apellido y se asustaban".

Luis es el séptimo de nueve vástagos de un clan de jornaleros de sangre gitana. Mientras sus hermanos se ennoviaban, él cayó en la heroína. Rondaba los 20 años cuando lo enchironaron por un atraco. Fue su perdición: enlazó condena tras condena por peleas, hurtos, atracos... Hasta que, hace tres semanas, recuperó la libertad.

Luis se convirtió en un fanático del código de respeto de la cárcel. Los funcionarios lo conocían por su violencia contra quienes le desafiaban. En general, eran presos comunes, pero en otoño de 2004, en Villena (Alicante), se le cruzó un terrorista. Fue el comienzo de la cruzada antietarra de los hermanos Amador. Su primera víctima fue Aitor Fresnedo, Asterix. Miembro del comando Vizcaya, a Fresnedo lo arrestaron en Galicia en 1994 cuando tramaba un atentado contra Manuel Fraga. Pero este historial no intimidó a Luis, que sintió que Asterix le había faltado al respeto. "Le dije: "Mañana te arreo en el patio"... Y le arreé". -

Etxerat dice que lo apuñalaste.
Que va! Sólo le clavé la uña del pulgar en la mejilla derecha. Eso sí, le hice un buen agujero. Y luego le pegué dos tortas. Namás.

La noticia de la insólita represalia corrió entre los etarras. Era lo nunca visto: un preso común que se rebelaba contra uno de los suyos, en vez de bajar la cabeza ante los vascos. La cosa no se quedó ahí: el 6 de octubre, su hermano Juan se metió en otra pelea con terroristas en la prisión de El Acebuche (Almería). "Se le tiraron encima seis", cuenta Luis. "Le hicieron una encerrona. Él se defendió con un punzón metálico".

Fuera en defensa propia o no, Juan hirió a dos etarras en el pecho, las manos y las piernas. Uno era Patxi Ruiz, asesino de Tomás Caballero (1998), concejal de UPN en Pamplona. El otro, Jon Koldo Aguinagalde, contaba con dos muertos en su currículo: el carnicero Lorenzo Mendizábal (1983) y el guardia civil Ángel Zapatero (1984).

En aquella época, el historial de Juan, de 36 años, ya incluía robos, peleas, tráfico de droga... Su debut carcelario fue en 1993, por un robo con fuerza. El rifirrafe con los etarras sumó otros dos años a su condena, mientras que los etarras sólo tuvieron que pagar una multa.

"Eso sí, el director de la cárcel le felicitó por plantarles cara, cuenta Luis. ¡Incluso le dio whisky y un puro!".

-¿Por qué os peleáis con etarras?
 -Porque se creen los dueños de la cárcel. Son los reyes y nosotros unos pringaos... -Otros presos no se atreven... -Tienen miedo. Saben que pueden buscarse la ruina. Pero a nosotros nos da igual... Somos así. 

Es cierto que los etarras apenas montan peleas. Suelen ir a lo suyo. Apenas se juntan con el resto de presos: los sociales, en el argot batasuno. Pero, cuando hay roces, la mayoría se arredra: el hacha y la serpiente paralizan a los más curtidos.

Sin embargo, todo cambia cuando hay un Amador en el módulo. Los terroristas se tientan la ropa antes de desafiarles. No son víctimas tan fáciles como el preso cojo de Picassent (Valencia) al que dos etarras apalizaron este julio. Su único delito era haberse sentado en la mesa favorita de los terroristas en la cantina. -

Luis, ¿te has peleado con otros etarras?
-Sí, dos o tres veces. Pero nada grave. Enseguida se acojonan. Cuando me reconocen, me amenazan. Pero luego salen corriendo.

Tras varios años de tregua, la cruzada de los Amador se recrudeció este junio. En el módulo 6 de la prisión de Fontcalent (Alicante), Juan se dedicaba a amedrentar a los etarras. Una tarde, dice Luis, su hermano se enzarzó con Aitor Liguerzana, militante de Segi, la cantera etarra. Los funcionarios, al quite, abortaron la discusión y cambiaron de turno de patio a Juan. No sirvió de nada: el 28 de junio, un colega de módulo se vengó en su nombre a cambio de un paquete de tabaco. Le pinchó tres veces con un bolígrafo afilado y el batasuno acabó en la enfermería. En cuanto se sofocó la escaramuza, a Juan lo encerraron en el módulo de aislamiento. De ahí, lo mandaron a la prisión de Puerto I, donde coincidió con su hermano Luis. Allí fue destinado al módulo 1, el de máxima seguridad, mientras los 19 etarras del presidio ocupan los módulos 3-4, más normalizados.

El 13 de septiembre, tres etarras (Oskar Calabozo, Jose Mari Etxeberria y Jon Urretabizkaia) lo aguardaban a la entrada del módulo 13-14 con actitud desafiante.

 -¡Te vas a enterar cuando entres!
 -¡Os váis a enterar vosotros! "

Fue una cagada de los etarras", cuenta un funcionario de Córdoba. "Amenazaron con levantar el módulo si metían al hermano ahí... Vamos, que hicieron el ridículo".

Luis apenas durmió unos días en la prisión de Córdoba. A principios de octubre volvió a su pueblo de toda la vida.

"Ellos son 500 presos y nosotros sólo dos. Ellos matan y nosotros no... Pero, en el fondo, ¡son todos unos acojonaos!".

 Una uña, un punzón, un bolígrafo...

G. Suarez






30 octubre 2012

Hablemos de Israel y los palestinos

Vuestra merced lleva años escuchando que los palestinos son inocentes víctimas de los perversos israelíes. Es el monotema de la prensa progre. No obstante, para juzgar con cierta ecuanimidad conviene escuchar a las dos partes.

Recordará el lector que, en tiempos de Cristo, Judea era una provincia del Imperio romano. Los levantiscos judíos se sublevaron en el año 70. Roma los aplastó, les destruyó Jerusalén y les arrasó el Segundo Templo (del que sólo quedó, para muestra, el Muro de las Lamentaciones).

El quebranto fue tal que muchos optaron por emigrar y dispersarse por el Imperio romano. Por doquier formaron comunidades más cerradas que abiertas y siguieron tercamente apegados a su religión incluso cuando todo el imperio aceptó el cristianismo.

Esta fidelidad o contumacia, según se mire, les iba a costar cara a los judíos porque, a lo largo de la Edad Media y hasta nuestros días, las comunidades cristianas descargaron en ellos los  malos humores, unas veces porque la Iglesia predicaba que habían sido los asesinos del Señor y otras veces porque  les culpaban de las epidemias (se ignoraba todavía la relación entre higiene, contagio y microbios).

En el siglo XIX, cuando el romanticismo impulsó los movimientos nacionalistas, muchos judíos acariciaron la idea de regresar a la tierra de sus mayores y refundar el Estado de Judea, o sea, Israel. Esa idea germinó especialmente entre los judíos rusos, que seguían padeciendo periódicas persecuciones de sus vecinos cristianos (recuerden los jinetes que estropean la boda judía de la peli "El violinista en el tejado").

Los judíos empezaron a emigrar a la actual Israel, que entonces pertenecía a la provincia turca de Siria meridional.  La tierra que la Biblia describe como un vergel que mana leche y miel se había deteriorado bastante desde los tiempos en que reinaba el rey David. Las guerras y el asentamiento de poblaciones pastoriles son dos circunstancias propensas a la tala de árboles. A finales del siglo XIX los cerros estaban deforestados, la erosión había convertido los sembrados en pedregales y los pantanos favorecían un endémico paludismo que aquejaba a la escasa población formada por cristianos drusos, judíos y árabes (con neta predominancia de estos últimos.)

Los árabes llamaban a aquella tierra siria. Los cristianos la conocían por Tierra Santa. ¿De dónde ha salido el nombre de Palestina? De los propios judíos que, cuando empezaron a instalarse allí, se esforzaron por diferenciar la antigua tierra de Israel, que aspiraban a restaurar, del resto de la Siria otomana.

Imagen idílica: desde un cerro, un mozalbete árabe que apacienta un rebaño de cabras contempla con curiosidad los afanes de los colonos judíos que se empeñan, con mil sudores, en cultivar las tierras bajas y pantanosas que le han adquirido al rentista turco dueño de la comarca.

Aquellos colonos vestidos de negro a pesar del sol abrasador resultaron, a la postre, ser menos lerdos de lo que parecían. Aclimataron un extraño árbol procedente de Australia, el eucalipto, que ayudaba a desecar los pantanos  y lograron erradicar la malaria y hacer la tierra cultivable. Mientras tanto no dejaban de llegar judíos, especialmente de Rusia y Polonia, que fundaban kibbuzim o granjas colectivas.

No sólo estaban recuperando para los cultivos el antiguo reino de Israel, también estaban recuperando su idioma, el hebreo, la lengua de la Biblia, que ya en tiempos de Cristo estaba en desuso (Cristo y los apóstoles hablaban arameo).

Los árabes que veían prosperar a los extranjeros en el secarral comenzaron a preocuparse. Espoleados por el ejemplo de los judíos, también ellos reclamaron su propia nación independiente de los turcos, una gran nación que abarcara las tierras del antiguo califato de Bagdad o de Damasco, la época dorada del islam,

En 1916, durante la primera guerra mundial, los ingleses estimularon la rebelión de los árabes, sometidos al Imperio turco, por medio de agentes como el legendario Lawrence de Arabia.
De este modo los aliados lograron arrebatar a los turcos buena parte de su imperio asiático, incluida la Siria otomana. Al finalizar la guerra (1918), Francia e Inglaterra se repartieron aquellas tierras y trazaron las fronteras de Siria, Líbano e lraq, de una manera bastante caprichosa que obedecía a sus necesidades del momento.

Durante la guerra, los británicos habían prometido a los árabes las tierras arrebatadas a los turcos. Lo malo es que también habían prometido a los judíos un "hogar nacional judío" en Palestina.

Terminada la guerra, la Sociedad de Naciones asignó a los británicos las tierras que hoy ocupan Israel y Jordania con el estatus de "territorio bajo mandato". Inmediatamente crecieron los problemas entre las dos comunidades (un 80 por ciento de árabes y un 20 por ciento de judíos).

La llegada de los nazis al poder en Alemania fomentó la emigración judía, con el consiguiente descontento de los árabes, que veían fortalecerse a su potencial enemigo. Después de la segunda guerra mundial, el conflicto se enconó. Arreciaba la llegada de judíos supervivientes del Holocausto (recuerden la novela de León Uris que inspiró la película Éxodo).

El Reino Unido, deseoso de abandonar aquel avispero, transfirió el problema a la recién creada ONU, que optó por una solución salomónica: repartió el territorio entre judíos y árabes (1947).

Los judíos aceptaron el plan de la ONU. Los árabes, por el contrario, lo rechazaron. Sus enardecidos líderes prometieron echar a los judíos al mar. "Hermanos (avisaron a sus correligionarios), retiraos a este lado de la frontera. Ya regresaréis a vuestros hogares cuando hayamos aniquilado a los judíos."

Unos cientos de miles de palestinos los creyeron y se fueron; otros, por el contrario, permanecieron en sus aldeas.
Israel declaró su independencia. Aquel mismo día, los ejércitos regulares de los países limítrofes lo invadieron. La guerra duró unos meses. Contra todo pronóstico, los judíos resistieron la embestida y devolvieron los golpes. Hasta ganaron terreno al enemigo.

Como resultado del conflicto, el Estado palestino previsto por la ONU quedó repartido entre Israel, Jordania y Egipto. Se había logrado un armisticio (impuesto por las superpotencias), no la paz.
Israel cerró sus fronteras a cal y canto.

Paradoja: Israel aceptó e integró a las comunidades judías procedentes de los países árabes (donde los musulmanes les hacían la vida imposible), pero los Estados árabes limítrofes no aceptaron ni integraron a sus hermanos palestinos (que se hacinaron en los famosos "campamentos palestinos", hoy verdaderas ciudades caóticamente urbanizadas que en nada se distinguen de las de cualquier ciudad árabe de la zona).

Los hijos y nietos de aquel exilio cultivan el victimismo que les permite vivir de las subvenciones de la agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos, de ONG internacionales y de las ayudas humanitarias de diversos países.
Aleccionados por la propaganda, estos palestinos en el exilio reprochan su atraso y su desgracia a Occidente, en especial a Estados Unidos, lo que explica que "inteligentemente" se echaran a la calle, con grandes manifestaciones de júbilo, para celebrar los atentados contra las Torres Gemelas de Nueva York.

Sucesivas guerras entre Israel y sus vecinos árabes (1956, 1967, 1983) enconaron el conflicto. Egipto y Jordania han reconocido el derecho de Israel a existir. Incluso han intercambiado embajadores. El resto de los países árabes insisten en la idea de aniquilar a Israel y echar a los judíos al mar.

Complejo problema el de Israel y sus vecinos. Para los árabes no se trata tan sólo de defender los derechos de los palestinos (que, recordemos,jamás tuvieron un Estado propio) sino de eliminar lo que ellos consideran un bastión del imperialismo occidental. A las dictaduras islámicas de la región, ancladas en regímenes feudo fascistas,  les molesta la vecindad de un Estado moderno, libre y democrático, dotado de justicia independiente, derechos cívicos, libertad de prensa, igualdad de oportunidades, igualdad de la mujer, tolerancia religiosa y libertad de expresión  (o sea todo lo que les falta a ellos)  y se sirven de él  como justificación de sus carencias sociales y su retraso.

Paradójicamente, la población árabe que vive dentro de las fronteras de Israel goza de mayores derechos y de un nivel de vida más elevado que la de cualquier otro país árabe.

En los decenios de 1970 y 1980, los palestinos liderados por Yassir Arafat,  fundador de la organización terrorista Al Fatah,  perpetraron numerosos atentados en Israel y Occidente (secuestros de aviones, asesinatos ... ). Eso duró hasta que los países occidentales adoptaron el infalible método saudí de sobornar regularmente a Arafat  (y hoy a sus sucesores) bajo la especie de ayudas humanitarias. Incluso lograron que los palestinos dejaran de entrenar a terroristas europeos (entre ellos a los de ETA).

Es un hecho comprobado que los palestinos, en su "noble afán" por afirmar su identidad nacional, desestabilizan a los países que generosamente los hospedan. Expulsada de Jordania a causa de sus constantes abusos, la OLP se instaló en el vecino Líbano en 1970 e inmediatamente perturbó el equilibrio del apacible país que hasta entonces se había considerado "la Suiza de Oriente Medio". Expulsados los líderes de la OLP del Líbano (donde provocaron una cruenta guerra civil y la invasión israelí) se instalaron en Túnez. Allí dejaron de incordiar, demasiado lejos de Israel y de los campamentos de refugiados.

En 1987 los líderes palestinos cambiaron de táctica e iniciaron la Primera Intifada: niños y adolescentes que apedreaban a los israelíes. Simultáneamente el Consejo Nacional Palestino proclamó la creación del Estado palestino (1988). En 1993 los acuerdos de Oslo establecieron una administración autónoma palestina en Gaza y Cisjordania, embrión de un futuro Estado palestino.

Un débil rayo de esperanza iluminó la escena cuando Arafat y el primer ministro de Israel, Isaac Rabin, se estrecharon las manos ante el presidente Clinton. Fue un espejismo: a los Estados de la región no les interesa la paz con Israel. En el año 2000 se produjo la Segunda Intifada. A la oleada de ataques suicidas palestinos respondió Israel con bombardeos y asesinatos selectivos de líderes terroristas.

Así siguen las cosas: al lanzamiento de cohetes sobre poblaciones israelíes, responde Israel puntualmente con bombardeos o asesinatos de líderes terroristas. Israel impone su superioridad militar, pero los palestinos le han ganado la batalla de la propaganda. Para la maniquea progresía occidental, los palestinos son muy buenos y sufridos y los israelíes muy malos.

Se criminaliza a Israel cuando bombardea un campamento (siempre en respuesta por algún atentado) pero se disculpa a los palestinos que cotidianamente bombardean las localidades israelíes.  Eso explica, también, que la progresía tan presta a condenar los abusos de Israel desvíe la mirada y prefiera ignorar ciertas características de la llamada cultura palestina: la sistemática conculcación de los derechos humanos, los asesinatos familiares por honor, la esclavización de las mujeres, la predicación del odio en las escuelas, la corrupción gubernativa, el adiestramiento de niños como bombas humanas, el casamiento de niñas púberes con ancianos ... 
La prensa occidental participa de esa concepción maniquea. Jalea las condenas a Israel de las Naciones Unidas, pero guarda silencio ante los genocidios que los países árabes cometen sobre sus minorías étnicas o ante la represión de sus disidentes.

Tellagorri






29 octubre 2012

Europa "civilizó" al Mundo

En la segunda mitad del siglo XIX, la Europa verde, rica e industrial (Inglaterra, Bélgica, Holanda, Francia, Alemania) se llenó de fábricas, altas y humeantes chimeneas, trenes, intenso tráfico portuario y fluvial ...

Las emergentes potencias tecnológicas y financieras (Alemania y Estados Unidos) disputaban el cetro del comercio mundial al Reino Unido. En cada uno de estos países, la plutocracia financiera se había enriquecido hasta extremos impensables en tiempos de sus abuelos. Los mercados interiores comenzaron a dar señales de saturación, sus cuencas mineras no daban más de sí.

 ¿Cómo mantener en marcha la máquina del dinero?

Los tiburones industriales escudriñaron el planeta en busca de nuevos mercados y renovados yacimientos de materias primas. Ingenieros y técnicos enviados a explorar la tierra regresaron con la buena nueva: los resultados colmaban sus esperanzas. Pingües yacimientos, filones de metal, canteras de piedra, arboles de caucho, pesquerías, bosques de ricas maderas Inmensas riquezas aguardaban al blanco colonizador.

El mundo era ancho, rico y subdesarrollado. Asía, Africa y América del Sur aguardaban a las potencias industriales, ajenas a cuanto se les venía encima. Se desató una carrera.

En poco más de un cuarto de siglo, los países industriales se adueñaron de! mundo. El nuevo imperialismo era más sutil que el antiguo (bueno, no siempre). En algunos lugares, es cierto, se abrieron camino a cañonazos (no existía país alguno que pudiera resistirse a sus flotas blindadas o a sus bien equipados y entrenados ejércitos, pero en otros se limitaron a sobornar a las elites gobernantes, que se pusieron a sus órdenes, fascinadas por el progreso.

El hombre blanco colonizaba la tierra.

Un negocio redondo para todos: los europeos colocaban su exceso de producción en mercados cautivos (y de paso colocaban como funcionariado de las colonias a sus excedentes de población, con lo que se evitaban problemas laborales).

Las oligarquías de los países colonizados estaban encantadas de imitar las costumbres del civilizado hombre blanco al tiempo que se enriquecían y vivían en lujosas residencias equipadas con las novedades llegadas de Europa.

ADDENDA: Sólo en Africa el reparto quedó como sigue : Reino Unido se quedó con Egipto, Sudán, Zimbabue, Zambia, Botsuana, Unión Sudafricana, Gambia, Sierra Leona, Nigeria, Ghana y Malaui.
Francia recibió Argelia, Tunez, Marruecos, Mauritania, Senegal, Mali, Guinea, Camerún, Costa de Marfil, Burkina Faso, Benin, Gabon, Congo Medio, Centroafrica, Chad, Yibuti, Madagascar y Comoras.
Alemania tuvo que conformarse con  con Camerún, Burundi, Ruanda, Tanzania, Namibia, Togo y parte de Ghana.
A Portugal le correspondieron  Angola, Mozambique, Guinea Bissau, y las Islas Cabo Verde, Santo Tomé y Príncipe. A Italia  le tocó Libia, Eritrea y Somalia.
España tuvo que conformarse con  el Sahara, Rio de Oro, Saguia el Hamra, Marruecos español, Tarfaya Ifni, Tetuan, Fez, Guinea Ecuatorial,  Rio Muni y Fernando Poo. O sea las migajas.


Tellagorri

NOTA
Entre 1876 y 1914 media docena de Estados blancos (Reino Unido, Estados Unidos,Francia, Alemania, Bélgica e Italia)  se repartieron la cuarta parte del Mundo. Los británicos consiguieron diez millones de kilómetros cuadrados; los franceses nueve millones; los alemanes dos millones y medio; y los belgas e italianos , dos millones. Estados Unidos arrebató cerca de doscientos mil kilómetros cuadrados a México.


28 octubre 2012

Damasco y Cadiz

Hay conocimientos que la mayoría de los lectores tienen pero que no me resisto a recordar,
y que los resume muy bien "tododragones.blogspot.com", a los efectos de olvidarnos durante un rato de Rajoy, de Mas Menos, de Kurkullus y de tantos y tantos indeseables ( no deseados).

Con seis mil años de vida, Damasco es la ciudad más antigua del mundo (increiblemente y como muchísimos pensaban no es Bilbao) y constituye una bulliciosa mezcla de culturas y épocas.

Ciudades antiguas como Damasco y Aleppo se pueden encontrar en cada continente. En la misma Asia, mas al este, la ciudad china de Qufu tiene una historia que se remonta cinco mil años atras. Era un gran centro cultural, fue capital de Shengnong, tambien capital del estado de Lu durante las dinastias Shang y Yin.

Caral es la ciudad más antigua del Perú (más de 5000 años desde el presente) y sede de la primera civilización andina que forjó las bases de una organización social propia y singular, que junto a Mesopotamia, Egipto, india, China y Mesoamérica son los focos originarios de cultura en el mundo.

De todas las ciudades actualmente habitadas, Cádiz es la más antigua de España y también de Europa, además de ser la que está situada más al sur de todo el continente. Fue fundada hacia 1100 a.C. por colonos fenicios de Tiro bajo el nombre de Gadir, que significa "recinto cerrado", sobre una isla situada en el extremo de una bahía asomada al Atlántico.

Otras ciudades europeas que pueden considerarse "abuelas" del continente son Atenas (siglo XI a.C.); Sofía, capital de Bulgaria, fundada por tribus tracias en el siglo VIII a.C.; y Palermo, en Sicilia (s. VIII a.C.).

Tellagorri









26 octubre 2012

Los fenicios

Legaron a la Humanidad dos inventos fundamentales: la moneda y el alfabeto, tan necesarios para las transacciones y la correspondencia comercial.

Por cierto, estas letras con las que yo escribo y vuestra merced  lee, el "alfabeto latino", son las mismas que inventaron los fenicios hace tres mil años. Si acaso algo alteradas después de pasar por los griegos, por los etruscos y por el ordenador.

En Fenicia, el comercio lo determinaba todo, incluso el sistema político. En un mundo gobernado por reyes divinizados y despóticos, los fenicios constituían una federación de empresarios. El verdadero gobierno de cada ciudad estaba en manos de una oligarquía financiera, la asamblea de ancianos, una especie de consejo de administración, aunque, por cuestiones de protocolo, existía también una dinastía real representada por la familia más poderosa.

No tenían ejército. Cuando lo necesitaban, contrataban mercenarios. De todos modos, sus ciudades, asentadas sobre islas próximas a la costa (Tiro, Arados) o sobre penínsulas de estrechos istmos (Biblos, Sidón, Beritos -hoy Beirut-),estaban defendidas por el mar.


La moneda se inventó en Lidia, una región de la actual Turquía, hacia el siglo -VII, pero fueron los fenicios los que la divulgaron por el Mediterráneo. Su valor dependía del contenido metálico, especialmente si era de oro o de plata, aunque con el tiempo fue valorándose también el prestigio de la ciudad o estado emisor, que garantizaba su valor.

A los catalanes los llaman "fenicios" por su afición exacerbada al dinero, pero ya quisieran ellos parecerse algo a los auténticos. Mientras vivan pensando en "MadriT y en soberanías de campanario, serán unos palurdos envidiosos sin más. Necesitan sustituir en la Generalidad a los políticos por una Asociación de Empresarios, para ser algo. Lo que ya sucede en la ciudad de Hamburg desde hace siglos, y que la convierte, a la ciudad,  en un Estado federal de Alemania, por sí misma.

 Tellagorri







Narcos y Ropones

El sicario jefe de Escobar revela que en 1984 dieron 30 millones de dólares a jueces de la Audiencia Nacional y miembros del Gobierno español para frenar dos extradiciones

Asesinaron y descuartizaron al etarra que les enseñó a explotar coches-bomba a control remoto. Después, recuerda John Jairo Velásquez, alias Popeye, jefe de sicarios de Pablo Escobar y un activo ventilador de los secretos del desaparecido cartel de Medellín, arrojaron sus restos al caudaloso río Magdalena. Al instructor le llamaban Miguelito, "un hombre bien presentado, no usaba desodorante, que para nosotros es muy llamativo, blanco, de 1,72 de estatura, 42 años, gordito, inteligente, muy bien hablado, jovial".
Nunca conoció su verdadero nombre.

El terrorista llegó a Colombia en 1986, cuando ya había estallado la guerra de Escobar contra el cartel de Cali y comenzaba el narcoterrorismo, una de las etapas más sanguinarias de la nación sudamericana. Miguelito ayudó a recrudecerla.

Popeye habla en un pequeño pabellón de la cárcel de máxima seguridad de Cómbita, a 130 kilómetros de Bogotá, que comparte con otros dos peligrosos reclusos. Lleva 20 años preso y aún le faltan otros 18 meses para recobrar la libertad. Pero, antes de salir, pretende rescatar de su memoria todo lo que vivió en los años en que la mafia colombiana era capaz de arrodillar al Estado.

Al etarra le contrataron por medio millón de dólares, siempre según la versión de Popeye, porque hizo amistad con uno de los principales jefes del cartel de Medellín, Jorge Luis Ochoa, cuando éste estuvo recluido en España.

Corría el año 1984 y tanto Ochoa como Gilberto Rodríguez Orejuela, líder del cartel de Cali y aún aliados, habían viajado a nuestro país para ampliar el mercado de la coca y blanquear parte de su inmensa fortuna. Adquirieron pisos, chalés, coches lujosos y otras propiedades, hasta que un banquero denunció a la policía sus sospechas por las cantidades enormes de dinero que transaban.

Ambos vivían con identidades falsas, pero, el 15 de noviembre de 1984, los capturaron por orden del fiscal especial antidroga, Antonio Jiménez, cuando salían de una casa en la calle del General Oraá de Madrid. La idea inicial era remitirlos a EEUU, para que pudieran ser juzgados por narcotráfico.

Pero nada temían más los capos que ese destino. Por esa razón, movieron sus fichas en Colombia y, con el inmenso poder corruptor de su organización criminal en su país natal, lograron que la Justicia colombiana solicitara en tiempo récord su extradición.

Ahora Popeye señala que no sólo compraron voluntades en la nación sudamericana, sino que entregaron 30 millones de dólares a jueces de la Audiencia Nacional y a miembros del Gobierno español, entonces presidido por Felipe González.

Transportaron el dinero "en el avión privado del patrón", un Lear-Jet 25", afirma Popeye. Una cantidad que, en la actualidad, equivaldría a 300 millones.

"Yo soy un miserable, un bandido, un asesino, por eso estoy en la cárcel. Pero se supone que los de la Audiencia española son gente muy honesta, que el Gobierno español es impoluto. Una decisión de éstas trajo que perros como nosotros acabáramos con este país", asegura.

No sabe cómo repartieron la fuerte suma, porque quien se ocupó de todo fue Diego Londoño White, persona encargada de las relaciones sociales del cartel de Medellín y ya fallecido.

"Sé que eran para la Audiencia Nacional y para el Gobierno, porque se necesitaban de los dos para poderlos extraditar a Colombia, ellos tomaban la decisión. El lobby de EEUU fue brutal, porque ellos los querían allá, y lo ganó el Gobierno colombiano. Gratis no hay nada", asegura Popeye.

"Esa decisión de personas corruptas en España causó miles de muertos en Colombia. Porque, si no regresan y van a EEUU, no existiría la guerra del cartel de Medellín contra el de Cali", agrega.

En cuanto a Miguelito, le mataron porque el terrorista español, que recibió medio millón de dólares del grupo criminal que comandaba Escobar, también prestó, en secreto, sus servicios al cartel rival de Cali.


Salud Hernandez-Periodista

NOTA
Tras la liberación de Ochoa por los ropones españoles se inició una guerra entre éste y Escobar. Miles de bombas y petardos estallaron por todo el país, se presentaron asesinatos de jueces, fiscales, testigos, periodistas etc. Se destaca la muerte del procurador Carlos Mauro Hoyos, el líder político de la UP Jaime Pardo Leal, tres candidatos a la presidencia de 1990, Bernardo Jaramillo Ossa, Luis Carlos Galán, Carlos Pizarro Leongómez, periodistas como el director del Espectador, Guillermo Cano, atentados contra el director de DAS, Miguel Alfredo Maza. Uno de ellos, el Atentado al edificio del DAS con un carro bomba de 500 kilos de dinamita frente a la sede del organismo dejó 70 muertos.

En Medellin se afirmaba que Pablo Escobar pagaba 2 millones de pesos (US$1000) por cada policía que fuera muerto, en consecuencia cayeron entre 300 y 600 agentes del orden, entre ellos el Comandante de Policía de Antioquía, Valdemar Franklin Quintero. El año 1987 pasó a la historia como el año más violento en la historia reciente del país, sólo en Medellín hubo más de 10 homicidios al día; en noviembre de 1989 un avión de Avianca en pleno vuelo explotó cerca de Bogotá 107 víctimas, no hubo sobrevivientes.



25 octubre 2012

Información para los de las flotillas a Palestina

La principal razón por la que miles de palestinos se apresuran a solicitar la ciudadanía israelí es su temor de que Israel cediera el control sobre Jerusalén Oriental a la Autoridad Palestina. Su mayor pánico es que perderían todos los privilegios de que disfrutan los residentes que viven bajo soberanía israelí, incluidas la atención de salud gratuita y educación, y la libertad de circulación y de trabajo

No se puede negar que al solicitar la ciudadanía israelí, desafiando las advertencias de la OLP y Hamas, en realidad están dejando en claro que prefieren vivir bajo Israel que bajo cualquier gobierno árabe.

La Autoridad Palestina dice que está preocupada por el aumento en el número de palestinos de Jerusalén que están procurando la ciudadanía israelí. Hatem Abdel Kader, quien está a cargo de la “Cartera de Jerusalén” en la gobernante facción de Fatah en la Margen Occidental, reveló que a más de 10.000 palestinos de Jerusalén se les ha concedido la ciudadanía israelí.

Además, los residentes palestinos de Jerusalén se dieron cuenta de que, a pesar de todas las dificultades que enfrentan en Israel, sus condiciones de vida eran todavía, por lejos, mucho mejores que las de los que viven bajo la jurisdicción de la Autoridad Palestina.

 Como lo explicó un palestino: “Prefiero el infierno de los judíos al paraíso de Hamas”.


 Tersites ("Patria Judia")










24 octubre 2012

Ramón y Cajal en 1934

"...No soy adversario, en principio, de la concesión de privilegios regionales, pero a condición de que no rocen en lo más mínimo el sagrado principio de la Unidad Nacional..."

Don Santiago Ramón y Cajal escribe en el Madrid de 1934 lo siguiente :

 "Deprime y entristece el ánimo, el considerar la ingratitud de los vascos, cuya gran mayoría desea separarse de la Patria común. Hasta en la noble Navarra existe un partido separatista o nacionalista, robusto y bien organizado, junto con el Tradicionalista que enarbola todavía la vieja bandera de Dios, Patria y Rey. 

 En la Facultad de Medicina de Barcelona, todos los profesores, menos dos, son catalanes nacionalistas; por donde se explica la emigración de catedráticos y de estudiantes, que no llega hoy, según mis informes, al tercio de los matriculados en años anteriores. Casi todos los maestros dan la enseñanza en catalán con acuerdo y consejo tácitos del consabido Patronato, empeñado en catalanizar a todo trance una institución costeada por el Estado. 

A guisa de explicaciones del desvío actual de las regiones periféricas, se han imaginado varias hipótesis, algunas con ínfulas filosóficas. No nos hagamos ilusiones. La causa real carece de idealidad y es puramente económica. El movimiento desintegrador surgió en 1900, y tuvo por causa principal, aunque no exclusiva, con relación a Cataluña, la pérdida irreparable del espléndido mercado colonial. 

En cuanto a los vascos, proceden por imitación gregaria. Resignémonos los idealistas impenitentes a soslayar raíces raciales o incompatibilidades ideológicas profundas, para contraernos a motivos prosaicos y circunstanciales. 

¡Pobre Madrid, la supuesta aborrecida sede del imperialismo castellano! ¡Y pobre Castilla, la eterna abandonada por reyes y gobiernos! 

Ella, despojada primeramente de sus libertades, bajo el odioso despotismo de Carlos V, ayudado por los vascos, sufre ahora la amargura de ver cómo las provincias más vivas, mimadas y privilegiadas por el Estado, le echan en cara su centralismo avasallador. 

No me explico este desafecto a España de Cataluña y Vasconia. Si recordaran la Historia y juzgaran imparcialmente a los castellanos, caerían en la cuenta de que su despego carece de fundamento moral. A este respecto, la amnesia de los vizcaitarras es algo incomprensible. Los cacareados Fueros, cuyo fundamento histórico es harto problemático, fueron ratificados por Carlos V en pago de la ayuda que le habían prestado los vizcaínos en Villalar, ¡estrangulando las libertades castellanas! 

Cuánta ingratitud tendenciosa alberga el alma primitiva y sugestionable de los secuaces del vacuo y jactancioso Sabino Arana.  La lista interminable de subvenciones generosamente otorgadas a las provincias vascas constituye algo indignante. Las cifras globales son aterradoras. Y todo para congraciarse con una raza (sic) que corresponde a la magnanimidad castellana (los despreciables "maketos") con la más negra ingratitud. 

A pesar de todo lo dicho, esperamos que en las regiones favorecidas por los Estatutos, prevalezca el buen sentido, sin llegar a situaciones de violencia y desmembraciones fatales para todos. Estamos convencidos de la sensatez catalana, aunque no se nos oculte que en los pueblos envenenados sistemáticamente durante más de tres decenios por la pasión o prejuicios seculares, son difíciles las actitudes ecuánimes y serenas. 

No soy adversario, en principio, de la concesión de privilegios regionales, pero a condición de que no rocen en lo más mínimo el sagrado principio de la Unidad Nacional. Sean autónomas las regiones, mas sin comprometer la Hacienda del Estado. 

Preciso es recordar –así lo proclama toda nuestra Historia– que somos incoherentes, indisciplinados, apasionadamente localistas, amén de tornadizos e imprevisores. El todo o nada es nuestra divisa. 

Nos falta el culto de la Patria Grande

Si España estuviera poblada de franceses e italianos, alemanes o británicos, mis alarmas por el futuro de España se disiparían. Porque estos pueblos sensatos saben sacrificar sus pequeñas querellas de campanario en aras de la concordia y del provecho común. 

Santiago Ramón y Cajal.
Premio Nobel de Medicina en 1906












23 octubre 2012

De Malvinas a Perejil

Mientras repaso las Memorias de Winston Churchill, caigo sobre el relato de Dunkerke. Como saben ustedes, cuando los alemanes invadieron Francia y Bélgica en 1940, la fuerza expedicionaria británica se replegó hacia esa ciudad de la costa.

Y allí, bajo duros bombardeos, la Armada Real evacuó de modo ejemplar a 340.000 hombres, incluidos franceses y belgas. Los británicos, según su envidiable costumbre, dieron la vuelta a la derrota para convertirla en episodio heroico: omitieron mencionar los episodios de saqueo, destrucción, alcoholismo colectivo e indisciplina que sus tropas protagonizaron en la retirada, pusieron el acento en la proeza de rescatar a las tropas cercadas, y adornaron el asunto con detalles patrióticos eficaces, entre los que destacó el hecho real de que en los dos últimos días, una flotilla de pequeñas embarcaciones tripuladas por navegantes particulares y miembros de clubs náuticos ingleses, que acudieron con carácter voluntario al llamamiento del Gobierno, cruzaron el canal y estuvieron recorriendo la costa francesa para rescatar a grupos de rezagados.

Coincide mi repaso a Churchill con tiempos de agitación mediática por las elecciones en Cataluña y otras discutibles lealtades periféricas, pasto de columnistas de prensa y tertulianos varios. Y escuchando a la peña, oigo subrayar la diferencia entre tener una Escocia o un Gales británicos, tener una Bretaña, una Córcega, una Cataluña o un País Vasco franceses, o tener aquí el espectáculo que tenemos.

 ¿Cuál es la diferencia?, inquiere retóricamente el tertuliano.

Y claro. Mi imaginación calenturienta, tocada de refilón por Dunkerke, se pone al tajo. La diferencia, concluyo, es la que va de las Malvinas a Perejil. De Gibraltar a Vélez de la Gomera. De la Batalla de Inglaterra a los reinos de taifas. De la guillotina que nunca tuvimos al confesor de Fernando VII. De la reina Victoria al putón de Isabel II. De Churchill, De Gaulle o Ángela Merkel a Franco, Azaña o Companys para acabar en Aznar, Zapatero y Rajoy. Y metidos en hazañas bélicas, de Dunkerke a Ceuta. O Melilla.

Porque ahora, háganme el favor, imaginen una crisis gorda, de las nuestras, al otro lado del agua. En Melilla, por ejemplo. Estimen el paisaje: esas masas musulmanas con velo y barba, sus imanes a la cabeza, bajando del Gurugú camino del paraíso del Profeta. Esa intifada moruna en la ciudad, con los barrios más duros, que son unos cuantos, llenos de barricadas y patas arriba. Esos minaretes comunicando al personal, por megafonía, que Alá ilá-lá ua Muhammad rasul Alá.

Esos legionarios y soldados regulares que se llaman Alí, Mimún y Mohamed diciéndole a la sargento Maricarmen que sí, en efecto, que faltaría más. Que están dispuestos a defender la ciudad como fieras. Que la duda ofende.

E imaginen, también, al enérgico Gobierno español diciéndole a la población europea de allí que tranquila, que todo está bajo control; y la población europea, en lógica respuesta a las ya famosas garantías gubernamentales, corriendo acto seguido maleta en mano hacia el puerto, despavorida, en plan mahometano el último.

Y en pleno pifostio, como España ni tiene barcos de guerra, ni tiene flota mercante ni tiene una puñetera mierda, al ministro de Defensa de turno se le ocurre la idea: "Vamos a hacer como en Dunkerke –dice–. Con dos cojones".

Y en el telediario sale Ana Blanco pidiendo a los capitanes y patrones de embarcaciones deportivas, a los particulares que tienen velero o motora amarrados en los clubs náuticos, a los cuatro pescadores con barco que nos quedan, a Álvaro de Marichalar con su moto náutica y a Borja Thyssen con el yate Mata-Múa de su madre, que acudan a Melilla para evacuar a la peña. Por la cara.

Y los antedichos, imagínense, dándose bofetadas en los pantalanes para embarcar los primeros rumbo a donde haga falta; y en vez de irse a Ibiza ponen todos el cabo Tres Forcas en el Gepeese y tiran millas para el norte de África, haciendo sonar las sirenas mientras cantan emotivos himnos solidarios, con sus bermudas rojas de raya y dobladillo, sus náuticos Rockport y sus polos Lacoste

–La flotilla de la esperanza, titularía ABC–, húmedas las mejillas con lágrimas de emoción fraterna, a rescatar compatriotas jugándose el todo por el todo. Y una vez allí, bajo las bombas de la Luftwaffe moruna, a arrimarse heroicamente a las playas y al puerto, con un ojo en la sonda y otro en la enseña nacional, para evacuar a civiles y militares mientras, en tierra, los ciento cuarenta panchitos de la compañía Bravo de la XXXIII bandera paracaidista se sacrifican hasta el último cartucho para asegurar la defensa del perímetro.

 Y claro. Luego me preguntan por qué a veces –a menudo, últimamente– me gustaría ser inglés. O francés.

Lo que fuera.


Arturo Perez Reverte
Académico



22 octubre 2012

Hermanos Amador, "O terror dos etarras"

Son dos hermanos gitanos y han metido el miedo en el cuerpo a los presos de ETA. Cuatro acabaron en la enfermería tras toparse con ellos.

Luis Amador, 34 años y una cabeza de tigre tatuada en su antebrazo derecho, apura la tarde apoltronado en el sofá de su casa. Hoy se ha levantado de buen humor.Sólo se crispa cuando surge un tema de conversación: los terroristas con los que compartió encierro durante 15 años.

-Son todos unos acojonaos. ¡Les pegas una galleta y salen corriendo! 
Luis salió del trullo hace tres semanas. Su hermano Juan, de 36 años, sigue encerrado en la prisión de Puerto I (Cádiz), donde ocupa una celda en el módulo de máxima seguridad. Los funcionarios están obsesionados con que no se cruce con etarras. El lío estaría asegurado.

"Si yo tengo acojonaos a los vascos... ¡Mi hermano mucho más!".

Tal es la paranoia de los reclusos de la banda que han amenazado con amotinarse si meten a un Amador en su módulo. Ellos, terroristas con 800 muertos a sus espaldas, temen a un par de quinquis de Murcia. El terror lo confirma el último informe de Etxerat, la asociación de familiares de presos etarras. Allí se dedica una página a las andanzas de los Amador. "Queremos denunciar la actitud de Instituciones Penitenciarias por trasladar a preso con un historial como el suyo a los módulos donde hay presos vascos... Los familiares vivimos con sufrimiento y miedo este tipo de situaciones".

Luis suelta una risotada cuando escucha la denuncia de Etxerat. No sabía que su leyenda de tipo duro había llegado a "España del Norte", como llama a Euskadi. Pero tampoco se sorprende demasiado. "Mucho matar niños, pero luego son unos cobardes", insiste. "Había ocho o nueve en mi módulo del Puerto I. Yo solito los tenía acojonaos a todos. ¡Y eso que no les hacía nada! Pero oían mi apellido y se asustaban".

Luis es el séptimo de nueve vástagos de un clan de jornaleros de sangre gitana. Mientras sus hermanos se ennoviaban, él cayó en la heroína. Rondaba los 20 años cuando lo enchironaron por un atraco. Fue su perdición: enlazó condena tras condena por peleas, hurtos, atracos... Hasta que, hace tres semanas, recuperó la libertad.

Luis se convirtió en un fanático del código de respeto de la cárcel. Los funcionarios lo conocían por su violencia contra quienes le desafiaban. En general, eran presos comunes, pero en otoño de 2004, en Villena (Alicante), se le cruzó un terrorista. Fue el comienzo de la cruzada antietarra de los hermanos Amador. Su primera víctima fue Aitor Fresnedo, Asterix. Miembro del comando Vizcaya, a Fresnedo lo arrestaron en Galicia en 1994 cuando tramaba un atentado contra Manuel Fraga. Pero este historial no intimidó a Luis, que sintió que Asterix le había faltado al respeto. "Le dije: "Mañana te arreo en el patio"... Y le arreé". -

Etxerat dice que lo apuñalaste.
Que va! Sólo le clavé la uña del pulgar en la mejilla derecha. Eso sí, le hice un buen agujero. Y luego le pegué dos tortas. Namás.

La noticia de la insólita represalia corrió entre los etarras. Era lo nunca visto: un preso común que se rebelaba contra uno de los suyos, en vez de bajar la cabeza ante los vascos. La cosa no se quedó ahí: el 6 de octubre, su hermano Juan se metió en otra pelea con terroristas en la prisión de El Acebuche (Almería). "Se le tiraron encima seis", cuenta Luis. "Le hicieron una encerrona. Él se defendió con un punzón metálico".

Fuera en defensa propia o no, Juan hirió a dos etarras en el pecho, las manos y las piernas. Uno era Patxi Ruiz, asesino de Tomás Caballero (1998), concejal de UPN en Pamplona. El otro, Jon Koldo Aguinagalde, contaba con dos muertos en su currículo: el carnicero Lorenzo Mendizábal (1983) y el guardia civil Ángel Zapatero (1984).

En aquella época, el historial de Juan, de 36 años, ya incluía robos, peleas, tráfico de droga... Su debut carcelario fue en 1993, por un robo con fuerza. El rifirrafe con los etarras sumó otros dos años a su condena, mientras que los etarras sólo tuvieron que pagar una multa.

"Eso sí, el director de la cárcel le felicitó por plantarles cara, cuenta Luis. ¡Incluso le dio whisky y un puro!".

-¿Por qué os peleáis con etarras?
 -Porque se creen los dueños de la cárcel. Son los reyes y nosotros unos pringaos... -Otros presos no se atreven... -Tienen miedo. Saben que pueden buscarse la ruina. Pero a nosotros nos da igual... Somos así. 

Es cierto que los etarras apenas montan peleas. Suelen ir a lo suyo. Apenas se juntan con el resto de presos: los sociales, en el argot batasuno. Pero, cuando hay roces, la mayoría se arredra: el hacha y la serpiente paralizan a los más curtidos.

Sin embargo, todo cambia cuando hay un Amador en el módulo. Los terroristas se tientan la ropa antes de desafiarles. No son víctimas tan fáciles como el preso cojo de Picassent (Valencia) al que dos etarras apalizaron este julio. Su único delito era haberse sentado en la mesa favorita de los terroristas en la cantina. -

Luis, ¿te has peleado con otros etarras?
-Sí, dos o tres veces. Pero nada grave. Enseguida se acojonan. Cuando me reconocen, me amenazan. Pero luego salen corriendo.

Tras varios años de tregua, la cruzada de los Amador se recrudeció este junio. En el módulo 6 de la prisión de Fontcalent (Alicante), Juan se dedicaba a amedrentar a los etarras. Una tarde, dice Luis, su hermano se enzarzó con Aitor Liguerzana, militante de Segi, la cantera etarra. Los funcionarios, al quite, abortaron la discusión y cambiaron de turno de patio a Juan. No sirvió de nada: el 28 de junio, un colega de módulo se vengó en su nombre a cambio de un paquete de tabaco. Le pinchó tres veces con un bolígrafo afilado y el batasuno acabó en la enfermería. En cuanto se sofocó la escaramuza, a Juan lo encerraron en el módulo de aislamiento. De ahí, lo mandaron a la prisión de Puerto I, donde coincidió con su hermano Luis. Allí fue destinado al módulo 1, el de máxima seguridad, mientras los 19 etarras del presidio ocupan los módulos 3-4, más normalizados.

El 13 de septiembre, tres etarras (Oskar Calabozo, Jose Mari Etxeberria y Jon Urretabizkaia) lo aguardaban a la entrada del módulo 13-14 con actitud desafiante.

 -¡Te vas a enterar cuando entres!
 -¡Os váis a enterar vosotros! "

Fue una cagada de los etarras", cuenta un funcionario de Córdoba. "Amenazaron con levantar el módulo si metían al hermano ahí... Vamos, que hicieron el ridículo".

Luis apenas durmió unos días en la prisión de Córdoba. A principios de octubre volvió a su pueblo de toda la vida.

"Ellos son 500 presos y nosotros sólo dos. Ellos matan y nosotros no... Pero, en el fondo, ¡son todos unos acojonaos!".

 Una uña, un punzón, un bolígrafo...

G. Suarez






21 octubre 2012

El "Capone" chino

Blanqueo de dinero. Usura. Bolsas de dinero. Extorsiones. Sicarios. Drogas. Prostitución. Corrupción de funcionarios… Gao Ping fue detenido el martes antes de que el sol saliera. Lo hizo un grupo especial de la Policía.
Le permitieron apenas vestirse. Que se pusiera lo que tuviera a la mano. Acostumbrado a cuidar su apariencia, siempre con trajes hechos a medida y corbatas de seda, le tocó combinar rápidamente una chaqueta de piel marrón, un pantalón de chandal Nike oscuro y una camiseta celeste.

Dentro de los millonarios orientales que habían hecho fortuna en España, Gao Ping, 45 años, era el aspirante a emperador. Había superado a otros self made man. Lo demostraba con hechos. Él y su clan no sólo habían acaparado la gran distribución de los Todo a 100 en España y parte de Europa, acumulando una facturación que se estima en más de 1.000 millones de euros en los últimos cuatro años.

Se había convertido en el prestamista por excelencia. Eso derivó en más dinero en su poder. Dinero sucio que tenía que limpiar. Sus empresas principales: Gold City e International Trade City (ITC), ubicadas en el polígono de Cobo Calleja, Madrid, estaban limpias. También la galería de arte Gao Magee / Fundación Arte y Cultura, al lado del museo Reina Sofía. Cuentas claras, envíos correctos.

Pero bastaba con ver su volumen de ventas para descubrir que era una burla al sistema. Sólo siete millones de euros de facturación anual.  Según fuentes de Hacienda, "pagaba tan poco y era tan descarado que sólo faltaba que declarase a devolver. ¡Si en un sólo día le han encontrado 16 millones de euros en efectivo!".

Gao Ping arribó a España en 1989. Llegaron huyendo de la pobreza y se encontraron con una sociedad en crecimiento donde podían hacer negocios. Con 22 años, apenas sabía español. Lo comenzó a aprender en Sevilla, acogido por una tía acomodada, dueña de una cadena de restaurantes de comida asiática. Lo tenían de chico para todo. Para él fue frustrante, casi humillante. Poco a poco ascendió.

Montó un restaurante, que vendería. Después se mudó a Madrid, a ese emporio que se iba forjando en el polígono industrial de Fuenlabrada. Aprovechó la coyuntura. Se iniciaba el boom y compró barata su primera nave. Después, gracias a sus nexos en China, con un padre que sabía moverse allí, comenzó con la importación de productos para minoristas. Hasta ahí todo legal. El grueso de sus business, al principio, lo hacía con chinos.

Al casarse con Lizhen Yang, Gao Ping buscó acercarse a una sociedad que le era ajena. Lizzy  era de esas familias chinas con buena posición en España. Heredera de varios negocios, el ambicioso chico de Hangzhou forjó un matrimonio con una chica con buena dote. También serían claves Wei Lin y Haibo Li, sus esbirros, los ejecutores en la trama.

Gao Ping, para el año 2005, ya era uno de los empresario chinos más ricos de España. Pero, de ningún modo, el más acaudalado. Un importante hombre de negocios de China comenta que su vida cambiaría a partir del siguiente año. La mafia china ya estaba en España pero se convirtió en un magneto para las triadas cuando Cobo Calleja se asentó como el mayor centro de negocios oriental de Europa.

Y empezaron a aparecer coches de alta gama frente a sus garajes. Sus marcas favoritas entonces eran BMW y Mercedes. Hasta que al polígono, en la calle Villablino, la misma donde estaban sus naves, comenzaron a aparcar Ferrari y Bentley. Su respuesta: un Maserati, hoy incautado.

Comenzó a recurrir a los mejores abogados chinos de España, entre ellos uno que tiene su despacho en la Gran Vía madrileña. Era un paso adelante. Llevaba ya tiempo defraudando a Aduanas, enviando contenedores desde China a España con un valor declarado menor al que tenía. Oficialmente eran 150 al año, aunque serían miles en realidad. Una vez aquí vendía a su precio real.

Ping no se sentía protegido y quería llevarse su dinero a China. Además se habría encargado de gestionar los envíos de las mafias de drogas y prostitución que operan desde España. De ahí que estos delitos formen parte del innumerable grupo de delitos que se le atribuyen a esta trama criminal... Su ambición terminó por ser su ruina. Fueron cayendo sus peones. Tenía que sacar cientos de millones de euros. Por tierra, mar y aire. Por tierra iban los fajos hasta en los depósitos de combustible de los coches. Por mar, en contenedores, dentro de juguetes incluso. Por aire, en maletas con doble fondo, hasta en cajetillas de cigarrillos donde iban doblados billetes de 500 euros...

Tal era el nivel de la cacería policial que se ha llegado a investigar a un pasaje completo de un vuelo directo España-China.  Se hizo con el puente aéreo del arte entre Pekín y Madrid. Su Iberia Art Center se convirtió en un referente en China. Tal era el prestigio del exitoso emprendedor y reputado galerista que llegó a dar clases maestras en el MBA de la Escuela de negocios de la Universidad de Jiangnan. Acudía a los cócteles más selectos e incluso logró estrechar la mano del todopoderoso presidente chino Hu Jintao. Se retrataba en la gloriosa plaza de Tiananmen, junto a los más exitosos emprendedores. Eso en su tierra.

En estos lares, su caché, subiendo. Se fotografiaba en recepciones con el rey Juan Carlos , con el ex ministro de Exteriores Miguel Ángel Moratinos, con el difunto Juan Antonio Samaranch e incluso con el seleccionador Vicente del Bosque...

Alcanzó la plenitud cuando apareció en una entrevista en televisión en Antena 3. Mostró a millones que era riquísimo. Se jactaba en antena de abastecer a más de la mitad de los comercios minoristas chinos del país. Mintió al declarar que tenía un piso en Pozuelo, cuando vive en una mansión en Somosaguas.

En verano de 2012, la Policía ya tenía identificados a todos los miembros de su clan. Se coordinaría el operativo para después de vacaciones: 500 policías, 60 agentes de aduanas (la plantilla al completo)...

Mientras ultimaban los detalles, Gao Ping inauguraba las nuevas oficinas de su empresa ITC en su ciudad natal.
Se creía invulnerable. No tenía dónde guardar más dinero.

Su fortuna, aún después de las incautaciones podría permanecer casi intacta. Sus cuentas en China son, por ahora, intocables. Para cuantificar su ritmo de vida basta señalar que tenía medio millón de euros para gastos corrientes en efectivo en su mansión...

Ping caería como Al Capone, por Hacienda. La Policía actuó con tal efectividad que ni sus sicarios, que tenían rifles en su poder  pudieron actuar.

M. Mucha








19 octubre 2012

Ser español

Resumo algunas realistas verdades que ha escrito la periodista Victoria Prego.

Resulta que las consultoras están aconsejando a nuestras grandes empresas que abandonen España y se instalen en cualquier otro país europeo. Lo peor de ese consejo es que, hechos los números, las consultoras tienen razón: a Telefónica, al Banco Santander y a tantas otras grandes compañías les traería mucha más cuenta hacer las maletas y radicarse fuera de aquí porque les saldría infinitamente más barato financiarse.

La conclusión desalentadora de esta noticia, y de otras que se reciben sin cesar en los últimos meses, es que, ahora mismo, esa Marca España que tan heroicamente se empeña en vender el ministerio de Asuntos Exteriores, es en la práctica un baldón y no un sello de prestigio.

Y que eso es así para las empresas, para las instituciones y también para las personas. No hay más que echar una ojeada al trato que nuestro país está recibiendo de los medios de comunicación extranjeros. Ahora olisquean vientos de tragedia y nos dedican casi tanta atención como la que nos dedicaron cuando el fracaso de la República y el comienzo de la guerra.

Estamos a un paso de sumirnos colectivamente en  la amargura que embargó a los intelectuales de la Generación del 98, aunque con una decisiva diferencia en contra nuestra: que ellos tenían muchos menos motivos que nosotros para sustentar aquella tristeza del ser español.

Lo que pocos años antes era un clima de tranquilidad y confianza en el futuro, una satisfacción por lo logrado en política y en nivel de vida, ahora es una crispación, una desconfianza, un miedo y un regreso a la pregunta que creíamos ya respondida: qué es España, por qué es así, cómo debería ser y cómo querríamos que fuera.

Necesitamos con urgencia líderes políticos, no sólo excelentes contables. Quizá aparezcan.



Ciencia y cuentistas

La periodista Turrau entrevista al catedrático de Ciencia Nuclear don Manuel Lozano Leyva y he aquí las muy interesantes respuestas.

 ¿Porqué ha titulado su libro "El fin de la Ciencia?

Quería mostrar las amenazas a las que está sometida la ciencia,que la pueden llevar a su final. También quería hacer ver cuál es la finalidad de la ciencia en las próximas décadas y describir cómo va a aumentar el bienestar de la población a nivel mundial. Es un juego de significados.

- ¿ Cuáles son las amenazas que se ciernen sobre la ciencia?

 -La mayor es la incomprensión de los políticos en momentos históricos y en algunos países; posiblemente porque no conocen qué hacen la Ciencia y la tecnología por la sociedad. Otra es la invasión de las pseudo ciencias en las instituciones, todos los cursos de astrología, parapsicología, ufología, homeopatía o medicinas alternativas, que cada vez se meten más en instituciones como la Universidad y en los medios de comunicación.
 La homeopatía ha alcanzado un gran desarrollo. Sus ingredientes son agua y simpatía: no pueden prohibirla, porque no puede hacer daño. Pero tampoco resuelve nada.

-¿Hay más?

-Están los ataques que todavía protagoniza la religión. Hay que tener en cuenta que una persona de credo mormón puede llegar a presidente de los Estados Unidos, la nación más tecnologizada y más basada en la ciencia. Los morrnones defienden el creacionismo y niegan a Darwin. Par otra parte, la propia comunidad científica puede acabar con la ciencia, si deja prosperar la mediocridad y la endogamia.

-¿Cuáles son hoy los principales objetivos de la ciencia?

-Está el desarrollo de la biomedicina,que ha logrado aumentar la esperanza y la calidad de vida de la po- blación de forma espectacular, Una enfermedad como el sida se ha convertido en crónica. Hay cada vez una mayor supervivencia al cáncer. La genética, por otra parte, está dando grandes posibilidades en preven- ción.
La tecnología se aplica a la medicina con buenos resultados y la ingeniería que hay tras la medicina es fantástica. Hay que tener también en cuenta que la comunicación on line están.permitiendo que en países poco desarrollados se esté  haciendo una medicina de vanguardia. Y también está el reto de la ali- mentación mundial.

-¿Qué puede aportar la ciencia en ese campo?

-Somos 7.000 millones y nunca ha habido menos hambre en el mundo.  Por eso hemos puesto en marcha en Internet 'la lista de la vergüenza.es' en la que denunciamos los cursos y actividades pseudocientíficas.

-¿Está a favor de la energía nuclear?

-Solo por ser catedrático de Física Nuclear se supone que estoy a favor de ella, y puede que sí, porque lo que hago es desmontar las mentiras que se dicen. Estoy convencido de que es inevitable en el futuro. En las energías renovables o se sustituye la subvención por la investigación, o tienen poco recorrído. Si vamos a un mundo más justo, otros querrán vivir como nosotros, y para progresar necesitarán energía nuclear.

En todos los hospitales del mundo hav servicio de Medicina Nudear. En el terremoto de Japón, una catástrofe con más de 15.000 muertos, la  energía nuclear no causó ninguno,  y ninguno de los trabajadores han superado las cifras marcadas de irradiación. No ha habido afectados ni  se esperan. Sobre Fukushima hubo ingentes cantidades de información alarmista y exagerada. Con eso no quiero decir que no haya que tomar medidas, porque es un accidente extraordinariamente serio.

 -¿Defiende los-alimentos transgénicos?

-Es lo que se ha hecho toda la vida. Es encontrar nuevas especies en el laboratorio. No van a terminar con el hambre en el mundo, pero pueden ayudar. No se puede atacar a los genetistas que investigan la mejora científica de los alimentos.






16 octubre 2012

Los kurkullus, historia de traiciones

El día 21 próximo se celebran los comicios al Gobierno Vasco (a su parlamento autonómico) y los peneuveros sacarán mayoría por desidia de sociatas y peperos. Como es habitual ya tienen pactado los Kurkullus su oculto mutuo apoyo con los pro-etarras.

Por ello, es conveniente hacer un repaso de lo que este Partido-Religión ha sido desde su creación, para aquellos que lo desconocen.

Tanto durante la Monarquía como durante la República, el PNV acudió en numerosas ocasiones en coalición con otros partidos de derechas, algu­nos de ellos abiertamente clericales y reaccionarios, como los carlistas.

En los primeros años de la República estu­vieron alineados en las Cortes, con el nombre de Minoría vasconavarra, en la que se fundían el PNV, los carlistas y otras fuerzas de la derecha monárquica. Dirigentes del PNV participaron en varias conspiraciones dirigidas a derrocar la República mediante un golpe de Estado, llevadas adelante por militares como el general Orgaz y que no llegaron a fraguar porque, según el propio Aguirre (primer dirigente y lehendakari), no les daban garantías para sus aspiraciones.

El enemigo mortal del PNV durante los años de la II República con­tinuó siéndolo el PSOE de lndalecio Prieto. A los enfrentamientos elec­torales hubo que añadir un creciente número de enfrentamientos vio­lentos, que causaron varios muertos por ambos lados.  La política de euskaldunización promovida por los nacionalistas se encontró con la particularmente férrea oposición del PSOE.

En 1934, con las derechas en el poder, según se iba definiendo la antipatía que en ellas causaba el discurso antiespañolista del PNV, éste fue oscilando gradualmente en sus fidelidades, llegando a colaborar con la izquierda, su tradicional enemigo, en la labor de desestabilización del gobierno derechista.

Llegó 1936 y, ante los preparativos de golpe militar, de nuevo impor­tantes sectores del PNV se inclinaron del lado de los conspiradores con­tra la República. Pero el dirigente de Renovación Española, José Calvo Sotelo, en un acto celebrado en el frontón Urumea de San Sebastián pronuncia su célebre frase:

-Antes una España roja que una España rota-,

lo que hace ver a los peneuvistas que, a pesar de lo mucho que les unía ideológicamente con los partidos de derecha no nacionalistas, sus aspiraciones independentistas y, en su defecto, autonomistas, no obtendrían buenas perspectivas en el caso de una victoria derechista.

Aquel mismo día los jefes peneuvistas que hasta ese momento habían estado en conversaciones para renovar la coalición con las fuerzas dere­chistas y católicas no nacionalistas (Renovación Española, Unión Regionalista Guipuzcoana), vieron claro que con personas como Calvo Sotelo no podía caber entendimiento alguno. Y advirtieron a sus posi­bles socios derechistas que obtendrían de la izquierda lo que la dere­cha les negaba, es decir, el estatuto de autonomía.

Así, en el último momento, y no sin grandes dudas y resistencias, la postura oficial del PNV fue la de apoyar a un gobierno republicano que, al fin y al cabo, les garantizaba la concesión del estatuto a cambio de que no se uniese a la rebelión.

Ésta fue la postura oficial, si bien muchos de sus miem­bros optaron por unirse a los sublevados, como la dirección del PNV en Álava y en Navarra. El Napar Buru Batzar, mediante comunicado del 20 de julio, desautorizó contundentemente la declaración de adhesión a la República emitida por el Euzkadi Buru Batzar en Bilbao dos días antes. La mayoría de los militantes peneuvistas de Álava y Navarra se adhirieron al alzamiento y se alistaron al ejército franquista.

Muchos dirigentes peneuvistas admitirían pos­teriormente que el 18 de julio estuvieron esperando que se confirmase que uno de los dos bandos se había alzado definitivamente con la vic­toria, para así no tener que elegir. Por ejemplo, el entonces presidente del Bizkai Buru Batzar, Juan Ajuriaguerra, explicó al respecto:
-Tenía la esperanza de escuchar alguna noticia que nos ahorra­se el tener que tomar una decisión: que uno u otro bando ya hubiese ganado la partida.  A las seis de la mañana, tras una noche en blanco, tomamos una decisión unánime. Promulgamos una declaración dando nuestro apoyo al gobierno republicano. Tomamos esa decisión sin mucho entusiasmo, pero convencidos de haber elegido el bando más favorable para los intereses del pueblo vasco.

Cuando se decantaron a favor del gobierno republicano, todos con­fesarían haberlo hecho sin ningún entusiasmo y teniendo la seguridad de que, de llegar una victoria republicana, las izquierdas arremeterían acto seguido contra el derechista PNV. Varios dirigentes nacionalistas han dejado testimonio sobre su actitud hacia el bando escogido a rega­ñadientes. Por ejemplo, Juan Manuel Epalza, vicepresidente de los men­digoizales, recordaba:

Hasta la noche antes, nuestro verdadero enemigo había sido la izquierda. No porque fuese la izquierda, sino porque era española y, como tal, intransigente. Vacilamos durante dos semanas o más, titu­beando sobre si aliamos con nuestros anteriores enemigos. De haber sido posible, nos hubiéramos mantenido neutrales. Estábamos entre la espada y la pared. Era algo absurdo, trágico: teníamos más cosas en común con los carlistas que nos atacaban que con la gente con la que de pronto nos encontramos aliados.

Tan incierto fue el alineamiento del PNV con uno u otro bando que no se decidió hasta la misma noche del 18 de julio de 1936.

José María de Areilza, vecino, coparroquiano y amigo de José Antonio Aguirre (y futuro primer alcalde franquista de Bilbao), lo explica así:

-En las ajetreadas negociaciones y contactos entre militares y civi­les que precedieron al Alzamiento, el tema del nacionalismo vasco y de su posible actitud siguieron vigentes hasta el último momento. No faltaron enlaces, propuestas y generosos intentos para lograr su adhesión, o al menos su neutralidad pasiva ante el eventual y espe­rado golpe de Estado. Al regresar yo de Madrid, del entierro de Calvo Sotelo, comprendiendo la inminencia del estallido, pensé en hacer el día 17 una última gestión directa cerca de las dos personas que me parecieron más asequibles al intento: José Horn, al que me unían lazos de cercano parentesco, y don Ignacio de Rotaeche. 

Me encontré con que el primero se hallaba gravemente enfermo (falleció a los pocos días) y el segundo, encamado también, no podría verme hasta el lunes 20 de julio. Me recomendó que viera a José Antonio Aguirre. No lo encontré durante todo el día por hallar­se ausente de Bilbao, adonde según me dijeron regresaría al ano­checer. Comprendí que ya era tarde porque la radio francesa había dado la noticia del levantamiento de Melilla. 

El sábado 18 de julio lo pasé en casa de unos amigos en contacto cercano con el núcleo militar comprometido que daría la señal de la intentona en Vizcaya. El domingo amaneció espléndido, y para disponer bien del día, pensé en oír misa lo antes posible. A poco de empezar el sacrificio, entraron en la iglesia por la puerta lateral una serie de hombres con señales evidentes de insomnio y rostros contraídos y sombríos que parecían venir de alguna reunión. Eran los directivos del BBB, órgano superior del partido nacionalista en Vizcaya, que habían estado deliberando toda la noche en la sede del partido. Salí de la iglesia y compré 'El Liberal' y 'Euzkadi', órganos respecti­vos del socialismo y del nacionalismo. Lo que publicaba el dia­rio nacionalista me interesó más. Allí aparecía, en efecto, en recua­dro y en primera página, una declaración oficial. 

El partido, al parecer después de una larga y tensa discusión, tomaba la posición de solidarizarse con el Gobierno de la República y de combatir a su lado. Era un compromiso cerrado, sin salida, que significaba para la derecha católica, en el país vasco, la guerra fratricida con todas las consecuencias. Leí y releí el texto, parado ante las escaleras del tem­plo, sintiendo un escalofrío de emoción al comprender que algo se desgarraba en aquellos momentos en las entrañas de nuestro pue­blo. 

En esto observé que muy cerca, en un grupo, los directivos del nacionalismo también leían la prensa con ansiedad. José Antonio Aguirre me vio y comprendió sin duda mi pesadumbre al ver que la suerte estaba definitivamente echada. Me saludó de lejos sin que hicié­ramos nada por conversar ni el uno ni el otro. Las palabras habían dejado paso a las armas.. Sin embargo, la fidelidad del nacionalismo vasco a la República fue siempre cuestionada por numerosos dirigentes republicanos, que des­confiaban de un partido tan de derechas y clerical como el PNV, cuyo doble juego, sus contactos para firmar una paz por separado con Franco, y sus deserciones hacia el bando nacional, entorpecieron muy gravemente el esfuerzo militar republicano en el frente Norte. Durante la guerra las tensiones con el gobierno republicano fueron con­tinuas, como puede leerse con detalle, por ejemplo, en los diarios de Azaña, temiéndose continuamente el paso al enemigo de las fuerzas dependientes del PNV.

 Ante el avance de las tropas franquistas el PNV buscó, en repetidas ocasiones y a espaldas del gobierno, una paz por separado con Franco y sus aliados italianos, desentendiéndose de la común tarea de defensa del régimen republicano.

Ya en diciembre de 1936 empezaron los con­tactos del PNV con el bando franquista a través del Vaticano y de la Italia Fascista. Las gestiones se sucedieron durante los primeros meses de 1937, participando en ellas el entonces cardenal Pacelli -posterior­mente Pío XlI-, el cardenal Maglione, el cardenal Gomá, el nuncio en España Antoniutti, el cónsul italiano Pietro Marchi, el arzobispo de París, el canónigo Alberto Onaindía, Pantaleón Ramírez Olano, el delegado vasco en París, lturzaeta, Francisco Horn, Julio Jáuregui, Andrés lrujo, Juan Ajuriaguerra y probablemente el propio lehendakari Aguirre. Su intención era, dada la inminente derrota en el frente Norte, desenten­derse de continuar la lucha por la causa republicana.

En mayo de 1937 el Gobierno republicano interceptó un cable pro­cedente del Vaticano dirigido a Bilbao en el que se establecían los tér­minos acordados por Franco y Mola para la rendición del ejército dependiente del Gobierno vasco. Y se ejecutó en el llamado Pacto de Santoña, en cuya virtud tanto Aguirre, Ajuariaguerra, Landaburu como los demás jefes del PNV quedaron libres de persecución alguna por parte de Franco.

A continuación Aguirre (lehendakari y jefe supremo del PNV) se marchó a Berlín a negociar con Hitler el establecimiento de un "Protectorado Alemán Nazi" en Euskadi. Y colaboró activamente con los de la Gestapo en la detención de Companys en Paris y su entrega a Franco.

 Tellagorri


NOTA DEL BLOG
Partido Nacionalista Vasco (pnv) en vascuence se escribe : EAJ y significa "Partido de Dios y de las Leyes Viejas". (Eusko Jeltzale Alderdia).





 

15 octubre 2012

Patrás, no palante

Santacreu dice que en la época que España era Una, Grande y Atada, los españoles disfrutábamos de uno de los mejores sistemas sanitarios en todo el territorio nacional. En esa época no teníamos problemas para ser atendidos en cualquier centro sanitario de toda España, sólo teníamos que demostrar que éramos españoles.

Después de separarnos en Autonomías ya no nos atienden en cualquier parte del país, sólo en las consultas de nuestros chiringuitos autonomistas.

Tengo que aclarar que en toda esta involución han salido ganado los “sinpapeles”, ya que si no eres español te atienden en cualquier parte de la nación.

España va “patrás” en lugar de ir “palante”, y siempre llegamos a la misma conclusión, la culpa de este desmadre nacional la tiene el nivel de formación, preparación o, si se prefiere llamar a las cosas por su nombre, el nivel de educación. La de los votantes y la de los votados.

Mientras en España vamos haciendo experimentos irracionales con la Patria y la Nación, y mientras jugamos a ser los más imbéciles del mundo mundial, Europa avanza lentamente y de forma segura para salir del lastre que supone la banda del sur: España, Grecia y Portugal.