RICART |
Hoy dibujaremos quiénes son esos psicópatas que paladean ya la libertad y por qué son más peligrosos de cara al futuro que los etarras de Hipercor o del sanguinario comando Madrid. Estos psicópatas sexuales, que tampoco han pedido perdón, tienen un pronóstico criminal peor. Tienen tasas de reincidencia altas, superiores a un 30 por ciento. No han cambiado en la cárcel. Y a diferencia de los etarras, que van a disfrutar de una amplia red de apoyo familiar y social en algunas zonas de Vasconia, ellos no van a encontrar trabajo, ni casi familia que les arrope y el posible castigo, la cárcel otra vez, no les asusta.
Los psicólogos que los conocen dicen que su problema no se cura. Y la mayoría defienden que no se les den permisos de salida. Ya ha salido en libertad uno de ellos en Barcelona, Antonio García Carbonell.
CARBONELL |
El más famoso de esa lista de violadores en serie que pueden salir en libertad es Miguel Ricart, condenado por los crímenes de Alcásser, cometidos en 1992. Miguel Ricart Tárrega, alias El Rubio, fue condenado a 170 años de prisión, que fue descontando con el código franquista haciendo deporte y participando en talleres. El Rubio debía haber salido en 2011, pero se le aplicó la Parot y tiene, en principio y según ese sistema, condena hasta el año 2023. La Audiencia de Valencia ya ha pedido a la prisión los datos sobre su condena. Es muy posible que recupere la libertad, lo más probable es que muy pronto, salvo que estos jueces decidan mantenerlo preso y el caso pase, como el de Inés del Río, al Supremo, al Tribunal Constitucional y luego a Estrasburgo. Pero el final está cantado y saldrá antes de 2023, seguro.
En cuanto a las distintas versiones sobre los tres asesinatos de las niñas de Alcasser, él lo contó con todo lujo de detalles, como algunas de las torturas que sufrieron las niñas (y que luego las autopsias confirmaron), por lo que es evidente que estuvo allí, que violó al menos a una de las niñas y que su colaboración física fue imprescindible para que violaran y torturaran a las otras dos víctimas. Y ese caso, Alcasser, sigue siendo una herida abierta, porque nunca se supo cuántas personas hubo allí.
Lo cierto es que al menos hubo dos criminales: Ricart y su compinche, el líder del grupo, Antonio Anglés, aun hoy fugado y desaparecido. Además de ellos, la sentencia indica que pudieron participar otras personas más. Lo mejor es acudir a las cartas que el propio Ricart envió a la familia Anglés y también al juez del caso poco después de entrar en prisión.
En ellas, leemos, textualmente: “o me mandáis cien mil pesetas o lo vais a pasar peor”; se define a sí mismo como “testigo de lo ocurrido y cooperador de la inhumación de los cadáveres” de las chicas y acusa de los crímenes, además de Antonio Anglés, a su hermano Mauricio, entonces menor de edad, y a un cuarto hombre al que identifica solo como “el amigo de Antonio”.
Pues este tipejo va a salir pronto de prisión. Ricart es aun joven, tiene 44 años. En su contra está que no va a contar con apoyo de casi nadie. Su mujer, por ejemplo, se separó de él tras los crímenes. Pero tiene algunas ventajas: es muy poca cosa, pequeñito, no llega a metro sesenta, no es tampoco demasiado listo, los psicólogos concluyen, más diplomáticamente, que tiene “poca entidad criminal”. Fue un criminal horrible pero todo indica que actuó “en eco” Se llama así cuando un criminal actúa siguiendo a un líder, formando parte de un grupo en el que él es un personaje muy gregario, secundario.
Evidentemente, colabora a causar un daño terrible a las víctimas, pero no toma la iniciativa, no diseña ni prepara los crímenes. Los de Alcasser fueron sus primeros delitos graves contra personas. Lo mismo seguía a Anglés para cometer un atraco a un banco o robar un coche que para los crímenes de Alcásser. Parece menos peligroso, a priori, que otros que van a salir de prisión próximamente.
Los hay aún más peligrosos que este tipo, el asesino de tres niñas. Por ejemplo, Joaquín Villalón Díez, uno de los asesinos con peor pronóstico de cuantos están en nuestras prisiones. Tuvimos ocasión de ver una larga entrevista con él en un curso sobre asesinos en serie en Valencia, hace ya 14 años, y lo cierto es que helaba la sangre escucharle hablar.
El crimen de Villalón fue tremendo: estranguló a su novia, Francisca, la descuartizó y repartió su cuerpo en bolsas por el cauce del río Bixerrai. No tuvo ningún reparo a la hora de confesar el crimen. Dijo que la mujer, que trabajaba con él en un supermercado, se inmiscuía demasiado en su vida, quizás porque le había ocultado que ya se había casado y tenía dos hijos con otra pareja.
VILLALON |
Así, Villalón asesinó a Juan Manuel, alias Joanna, y Darío, alias Carmen, dos transexuales cuyos servicios contrató. Al primero le dio una brutal paliza y lo ahogó en la bañera; al segundo le quemó vivo. Su pronóstico, cuando está a punto de salir de prisión tras 21 años, es tan malo como el de otros violadores y asesinos, tales como Pedro Luis Gallego o Valentín Tejero.
(Por los investigadores Luis Rendueles y Manu Marlasca).
los otros
Los que no emigran por motivos económicos van a tener que hacerlo cuando suelten a estas joyitas.
ResponderEliminarDON ULTIMO DE FILIPINAS
EliminarYa pueden los maderos estar al loro cuando vayan soltando a todos estos carne de garrote vil, porque los vecinos de ellos de donde se asienten tendrán que emigrar, como dices, o mudarse a otra localidad. Y está claro que con varios de ellos habrá nuevos asesinatos facilmente programables.
El día que el TEDH decidió a favor de lo que el gobierno de España les dijo debían fallar, en COPE salió la madre de una niña violada y asesinada por una de estas joyas. Yo iba en el coche y tuve unos escalofrios tremendos, hablamos de psicópatas de lo peor, auténticos tarados.
ResponderEliminarY con esto España se enfrenta a sus propias contradicciones. Si el fin de la carcel es reinsertar, y por eso tenemos penas de la señorita pepis, pero es imposible reinsertarlos, ¿porque se excarcelan?. Es tremendo, pavoroso.
Voy a decir lo que todos pensamos, ojala alguien los reviente segun salgan de la carcel, ojala.
SEÑOR OGRO
EliminarLo dices de manera perfecta :
" Si el fin de la carcel es reinsertar, y por eso tenemos penas de la señorita pepis, pero es imposible reinsertarlos, ¿porque se excarcelan?. Es tremendo, pavoroso.
Estos bestias jamás debieran de abandonar celdas especiales de alta seguridad ni tener trato con otros presos hasta que se pudran del todo.
Quizá haya alguna víctima de ellos que les busque con una escopeta recortada.
Una pena.
ResponderEliminarDON MAMUNA
EliminarSí, una PENA y una criminalidad que el Estado no tenga otra opción que soltarlos. Por inepcia de los gobernantes.
A ver si alguno de los familiares de las víctimas de todos esos criminales tiene los arrestos suficientes para aplicarles la pena que se merecen, aunque se expongan, me temo, a recibir el castigo que los jueces dejaron de aplicar en su momento. Lo que más me irrita es el paripé de esas ficticias penas de 100 años o más que dejan tan satisfechos a jueces y fiscales.
ResponderEliminarDON BWANA
EliminarEs como para para cortarles un testículo a cada ropón que impone penas de cientos y miles de años para soltarlos antes de cumplir 20 años de prisión.
Todos estos son unos criminales irrecuperables que jamás debieran de pisar nada ajeno a una prisión. Pero los gobernantes que en los últimos mil años nos han tocado soportar no son capaces de remediar nada ajeno a sus emolumentos personales.
Ojalá, como dice, algún cabreado les vacie en el cuerpo una docena de cartuchos de cazar jabaliés.
Cuando la ciudadanía siente la necesidad de ajusticiar a los criminales, puede decirse que la Justicia ha entrado en barrena. Recuerdo el caso de los padres de Marta del Castillo que, ante la impotencia de lo que estaba sucediendo en el caso de su hija, pedía que algún preso le aplicara a los asesinos de la niña "la ley de la cárcel"... y eso, a cualquier político digno de ese nombre, le haría caer la cara de vergüenza.
ResponderEliminarEn España, pero, no existe esa variedad de político.
DON HEREP
EliminarNo, no existe en España esa variedad de político : el que SIENTA VERGUENZA DE ALGO.
Es ya un clamor que a todos esos criminales, etarras y violadores, se les pase por la afiladísima hoja del hacha. Y asunto resuelto.
Franquito en eso era imperturbable : fusilamiento o garrote vil. A propósito tengo un post para mañana sobre algunas "intimidades" del Invicto que son muy curiosas.