JUAN DAVID OCHOA |
Amable, educado, callado, el más discreto del clan pese a ser el primogénito, un hombre que huyó siempre de los flashes y que, según la agencia norteamericana que lucha contra las drogas, era un ser "débil".
Juan David Ochoa Vásquez fundó en los 60, con sus dos hermanos (Fabio y Jorge Luís) y el capo di capi Pablo Escobar, el cartel de Medellín, el más sanguinario de la historia reciente colombiana. Baste recordar que pusieron una bomba en un avión y mataron a más de un centenar de pasajeros.
Los Ochoa, a diferencia de Pablo y su íntimo amigo y socio Gonzalo Rodríguez Gacha, alias El Mejicano, pertenecían a la clase acomodada de la capital de Antioquia.
Hijos de un próspero empresario, Don Fabio, fanático de los caballos de paso fino y con la mejor cuadra del momento, pudieron aprovechar las oportunidades que le brindó su progenitor y convertirse en buenos profesionales. Pero optaron por aliarse con los narcotraficantes que iniciaban en Colombia un negocio que terminaría reportándoles ingentes beneficios. Lo hicieron en contra del criterio de su padre. Su ambición desmedida y la absoluta falta de escrúpulos, unidos a un personaje de mente despiadada como Escobar, convirtieron Colombia en un infierno.
Cientos de policías cayeron a manos de sicarios porque pagaban por cada cadáver; además del avión de Avianca y de asesinar a tres candidatos presidenciales, de secuestrar y matar periodistas, pusieron bombas en lugares públicos concurridos, causando miles de muertos y heridos.
En plena contienda contra la nación, en 1981, la guerrilla del M-19 secuestró a la única chica de los Ochoa, Martha Nieves, solidaria con sus hermanos pero ajena al negocio. Para rescatarla, crearon el MAS (Muerte a Secuestradores), un grupo implacable que a la mínima sospecha mataba a mansalva. La liberaron y demostraron a sus rivales que nada les detendría y que resultaba un suicidio retarles.
La cacería emprendida contra Pablo Escobar dio sus frutos y en diciembre del 1993 murió acribillado por la Policía. Dos años antes, y para evitar que los atraparan, los Ochoa y otros mafiosos optaron por acogerse a una ley generosa, aprobada por el Gobierno de César Gaviria, que les aplicaba condenas ridículas por sus infinitos crímenes, a cambio de someterse de manera voluntaria a la Justicia.
El 16 de febrero de 1991 ingresó en prisión, pero cinco años más tarde, con los mencionados beneficios y los obtenidos por trabajar en prisión, estaba en la calle. Abandonó el tráfico de cocaína, o nunca le pudieron probar lo contrario, y se dedicó a la ganadería y a los caballos, al igual que Jorge Luís, el segundo de los Ochoa.
Pero Fabio, el menor y el consentido de la familia, siguió delinquiendo y en 2001 le extraditaron a Estados Unidos, donde cumple una pena de 30 años. Su condena fue un mazazo para él.
Ha muerto de un infarto en el hospital más elegante de Medellín.
Juan David Ochoa Vásquez, narcotraficante, nació en 1948 en Medellín (Colombia) y murió en esa ciudad el 25 de julio de 2013.
Por Salud Hernández
juan david
Y todo eso sin necesidad de hacerse político.
ResponderEliminarDON ULTIMO DE FILIPINAS
EliminarBuena conclusión. Aquí no se concibe ese tipo de actividades, que ejercía el mutiko, estando FUERA DE LA POLÍTICA.
Además de los crímenes directamente cometidos por estos asesinos, hay que agregar la destrucción de vidas por drogadicción y su impacto en las familias afectadas. Mucha gente habrá celebrado, con alegría, el paso a los infiernos del Juan David.
ResponderEliminarDON BWANA
EliminarClaro, además están las cientos de miles de vidas arruinadas por culpa de las drogas. Y ahora que lo menciona, ¿No será que nuestros políticos de todo color son adictos, desde la infancia, a las drogas? Eso explicaría tanta majadería y desmadre.
Es muy posible lo que dice, Don Javier. Posiblemente el humo de los petardos que fumaban sus progenitores les enviciaran desde tan temprana edad.
EliminarADD: Había olvidado comentar la preciosidad de playa con que adorna su cabecera. Maravillosa.
DON BWANA
EliminarEs prima Mirandita que ha perdido una lentilla y la está buscando en la arena.
Ma satisface que estas playas que traigo de adorno de Portada le gusten. Al menos hay alguien que tiene buen gusto.
¿narcotraficante y caballo?... no veo relación, ah, y la prima un poco gamba.
ResponderEliminarDON ISRA
EliminarTampoco la hay entre un complutense y una moto, pero creo existen complutenses que van en moto. La prima ¿gamba?. Gambas las hay en VIP y bien buenas.
¿Estás recluído o secuestrado?
"El cocinero" me pregunta por vosotros con frecuencia y le digo que estás missing y que por tanto ni idea de qué haces.
¿Te has enteredo de la buena nueva de que pasado mañana comienza agosto con 52 grados en la Meseta y 40 en Vasconia? Ahhh y que celebres con fruición mañana el día de San Ignacio, patrón de "Euskadi" y del Peneuve.
En la puta vida me ha pasado lo de este último mes... he trabajado casi todas las horas que he estado en la oficina, menos mal que el viernes toca descansar.
EliminarCon la ola de calor que viene estoy pensando en encender el horno y meterme dentro para estar fresquito.
Mira que tener un patrón con nombre apañol... si escuchasen más a Elvis no estarían tan tontos.
Jodo, casi lo olvido, recuerdos de todos, especialmente de la princesa, para nuestro cocinero... la loca desde la visita a los fogones sigue empeñada en ir a Le cordon bleu (al de Paris, ese que por sólo 6000 euracos te da para un curso de unos meses) a aprender a cocinar (pa mí que con lo que tiene en la hucha de momento no le llega).
EliminarDON ISRA
EliminarA tus treinta y un años debieras de estar ya ACOSTUMBRADO a esas temperaturas de clima MEDITERRANEO que gozaís en los Madriles y alrededores.
Fíjate si serán borregos los que implantaron el patronazgo de SAN IGNACIO que en sí él se llamaba IÑIGO, nombre completamente ajeno a IGNACIO, y que adoptó porque al ser ordenados sacerdotes les obligaban a elegir el nombre de un santo, y en el caso el Iñigo de Loyola eligió el de San Ignacio de Antioquía, como podía haber elegido el de San Hermenegildo. Y ahora dirian que Hermenigildo e Iñigo son lo mismo.
Lo de la afición a los fogones ya se le pasará a la Princesa en cuestión de un par de años. Siempre te queda la opción de mandarla al CULINAY CENTER de San Sebastián en donde los Arguiñanos y Arzacs conceden título universitario al que aprende a hacer una tortilla francesa.
Es un buen chico, lo que ocurre es que es un poco cortito y no se entere-.
ResponderEliminarDON MAMUNA
EliminarEs posible que sea eso. Que se cargó a miles de personas a punta de metralleta y de sicarios pero no se daba cuenta de que "no está bien visto" actuar así.