BERMEJIN, rojo, chulo y gorrón

El ministro Bermejo es cazador. Muy bien. Yo también. Y un millón de españoles. Luego hay clases. Hay cazadores ricos y pobres.La mayoría se acerca más a este último plano que al primero.
Y están los aprovechados. Este es el apartado en que se enmarca Bermejo.

El ministro es un jeta que se aprovecha del cargo para cazar de rico sin gastarse un duro. Así es como entiende Bermejo que debe socializarse el patrimonio del Estado, y como prístino ejemplo del asunto ahí están sus disfrutes de la finca de Quintos de Mora.

Pero ahora resulta que al aprovechado Bermejo además hay que apuntarle otra cosa en el debe. Y esta ya como cazador. Resulta que el señorito estuvo cazado de furtivo. Se le "había pasado" sacarse la licencia. A mi y al millón de cazadores en España nos pilla la Guardia Civil cazando sin licencia y nos quita de entrada la escopeta y luego nos casca una multa de abrigo: entre 601 y 4.000 euros (sanción prevista por la Ley 8/2003 de 28 de octubre sobre Flora y Fauna de Andalucía).

Y la cosa nos puede ir incluso a mayores, pues según el art 83 de la citada ley, "la comisión de infracciones tipificadas en esta ley podrá llevar aparejada las siguientes sanciones accesorias": la «suspensión o inhabilitación para la obtención de la correspondiente licencia o autorización del aprovechamiento por un período comprendido entre un mes y cinco años, cuando la infracción sea calificada como grave". Y cazar sin licencia lo es.

Pero eso a nosotros, porque al ministro no le pasa nada. El se troncha de risa en la tele , como si con él no fueran las leyes, como si la "infracción muy grave" que ha cometido no tuviera la menor importancia. Porque al fin y a la postre él es un señorito ministro que caza en Andalucía o en los Quintos de Mora, cuando y como le da la gana . Y a él la Guardia Civil no le pide la licencia. A el se le cuadra.

Y esto ya si que nos ha rebosado el vaso a los demás cazadores.

Sometidos a 17 legislaciones diferentes, quienes tenemos que sacar religiosamente las licencias de todas la comunidades, que andamos siempre aperreados con tantos y tantos papeles (no saben la burocracia que tenemos que salvar para cazar en España), que este tipo se chulee de que con él no va la cosa porque es ministro y encima sus compañeros de partido lo aclamen en el parlamento al grito de "torero", nos está sonando caza vez más a mofa, befa y escarnio.

Este señorito del nuevo cuño socialista, alardeando desvergonzada e impunemente de sus privilegios, se nos está riendo en las barbas a todos los españoles. Especialmente y de manera muy precisa al millón que además somos cazadores. Entre ellos, muchos centenares de miles que votan socialista. A todos, votemos lo que votemos, a los que no se nos puede "pasar" el sacarnos la licencia.

ANTONIO PEREZ HENARES

Y para colmo, el mutiko es hijo de un Jefe Provincial del Movimiento (falangistas en estado puro y chulesco en tiempos de Franco) que estudió la carrera gracias a las prebendas que tenian los jerarcas franquistas.
Y tiene el morro de decir, en otra ocasión, que "primero luchamos contra los padres y ahora contra los hijos", refiriendose a la guerra civil y como si el hubiera sido un Carrillo más.

El hijo de puta éste de Ministro, al igual que sus compas Garzón y ZP, vivieron durante todo el franquismo como señoritos y chuleando a los demás, además de despreciar olimpicamente a los que habían perdido la guerra.

¿Porqué será que cuanto más franquista era el padre los hijos son más fantasmones y antifranquistas de boquilla?

En el caso concreto de Bermejin merecía haber tenido un padre que fuera, además de falangistón, OBISPO y VASCO, para poder calificarlo como tal : "hijo de obispo cabrión"

Tellagorri


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