03 abril 2017
Modalidades terroristas con objetivo igual
ETA era una organización armada jerárquica, organizada en comandos y aparatos. El Estado Islámico (IS) es una red difusa de consignas y manuales de uso bélico que termina en un delincuente radicalizado.
Donde hubo zulos, armas y comandos robacoches, hoy hay un cuchillo y un vehículo de alquiler. Del talde, al lobo solitario. Del gudari en nómina, al autónomo. De Egin a las redes. Del plan de escape, a morir matando. De la cárcel, al paraíso.El terrorismo, como el periodismo, el turismo y el sector del taxi, vive ya en la época de la desintermediación.
ETA es ya un resto (putrefacto) del pasado. Sus ritos fúnebres sólo tienen interés para la Policía y las víctimas que esperan, sin mucha esperanza, resolver los más de 300 asesinatos sin autor.
¿Saben cuánto espacio dedicó el pasado sábado la edición europea de The New York Times al anuncio de ETA? Cero líneas. Lo de los gudaris no mereció ser impreso. ¿Y Financial Times? Cero líneas. En cuatro planas hubo sitio para 11 noticias y cuatro breves, pero ETA no cupo.
Unos días después, las calles de Londonderry (Derry para los republicanos) veían pasar el féretro del Carnicero de Bogside. El que fuera número dos del IRA Provisional devino viceprimer ministro de Irlanda de Norte gobernando en coalición con los protestantes de Ian Paisley. ¿Se imaginan a Otegi como vicelehendakari de Mayor Oreja en una Euskadi con las competencias de Murcia?
Pues eso pasó y los dos viejos lobos se hicieron amigos. Eso sí, el terrorista que negoció los Acuerdos de Viernes Santo de 1998 fue enterrado con elogios. La reina Isabel II envió un mensaje de condolencia a su viuda y el finado tuvo el reconocimiento de la premier Theresa May.
Es lo que tiene saber parar a tiempo, Arnaldo.
Ahora bien, hay cosas que no cambian con el tiempo. El ansia de propaganda del terror.
Su querencia por hitos simbólicos. Y el dolor. Sobre todo el dolor causado a las víctimas, ejecutadas sin juicio previo. Sentenciadas por su uniforme, entonces y ahora, o, simplemente, por pasar por allí. Por eso, es clave ganar la batalla del relato, el cómo contaremos a nuestros hijos esa página violenta de nuestra Historia.
La fascinación por fechas señaladas y lugares emblemáticos es común al terrorismo de la vieja y de la nueva escuela: el atentado del pasado miércoles tenía el mismo objetivo simbólico, el parlamento más antiguo del mundo, que uno del... 17 de junio de1974. Ese día, el IRA hizo estallar, dentro del recinto donde mató y murió el islamista del cuchillo, una bomba con nueve kilos de explosivos que causó heridas a 11 personas.
Hoy como ayer, el terror sabe que no puede ganar la guerra. Por las armas. Su ánimo es amedrentar a las sociedades a las que desprecian. Ganar la guerra... de la propaganda.
Acciones espectaculares, ciudades con gran cobertura mediática, el máximo número de víctimas.
IÑAKI GIL
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La inmensa pena y el dolor sin límite, eso es lo que consiguen al final.
ResponderEliminarDON TRECCE
EliminarLa verdad es que lo único que queda tras los atentados es lo que dices : DOLOR SIN LÍMITES.
Habría que hacer como el Newyork Times : silenciar al máximo el volumen de los daños para no darles satisfacción a los terroristas. Porque eso es lo que ahora buscan con sus barbaridades : publicidad.
ResponderEliminarDOÑA SOFIA.
EliminarDado que lo que buscan los terroristas es PROPAGANDA, lo mejor sería que los medios no les dieran satisfacción.
Como dice TRECCE de todos esos destructores de vida lo único que al final les queda es el inmenso dolor y pena y de los familiares de las victimas.
ResponderEliminarDON JOSÉ.
EliminarEsa es la realidad más palpable tras el terrorismo : un inmenso dolor.
Siempre ha sido objeto de comentarios, a lo largo de la carrera criminal de Eta, el que habría que limitar mucho la información de los medios sobre los atentados a efectos de NO HACER PROPAGANDA de ellos. Porque eso es lo que busca todo terrorista.
ResponderEliminarDON LUCIANO.
EliminarEstoy de acuerdo. Habría que buscar el modo de que se sepa por todos lo acontecido pero con información en páginas interiores de la prensa.
El terrorismo, como ha escrito, no puede ganar guerras, es por eso que SIEMPRE hay un aparataje politico alrededor que aprovecha las famosas nueces que decía Arzallus. En nuestro caso, PNV y HB (y ropajes) se aprovechaban perfectamente. En el caso de los terroristas islamistas, hablamos de un aparataje a nivel global.
ResponderEliminarEn todo caso, lo que vemos por desgracia es una debilidad pasmosa en las democracias occidentales, que son los evidentes blancos. De esa debilidad ya sabemos muchos, sabemos de donde viene: pensamiento debil, nihilismo, cobardia, izquierda cainita, miras cortas, politicos ineptos y cobardes, etc.
Y claro esta creo yo, que a pesar de estar ETA casi finiquitada en lo policial, realmente lo que se ha hecho es aposentar unas solidas bases que pueden ayudar a germinar nuevos horrores.
SEÑOR OGRO
Eliminar"lo que vemos por desgracia es una debilidad pasmosa en las democracias occidentales, que son los evidentes blancos. De esa debilidad ya sabemos muchos, sabemos de donde viene: pensamiento debil, nihilismo, cobardia, izquierda cainita, miras cortas, politicos ineptos y cobardes, etc. "
Esa es la cuestión con el terrorismo de todo tipo : unas democracias occidentales de miras cortas y políticos ineptos o cobardes.