14 marzo 2014

Origen de las "Fallas"

Del origen de las Fallas se puede afirmar que se remontan a principios del siglo XVIII.

Una teoría dice que los carpinteros hacían quemar sus "parots", unas estructuras en las que colgaban los candiles ya que al llegar la primavera, dejaban de ser necesarios.

La Iglesia, para combatir el paganismo de la fecha terminó haciéndola coincidir con la víspera de la festividad del patrón de los carpinteros, San José.

Poco a poco, ese parot fue vistiéndose con ropas para adoptar figura humana y entonces comenzó también a aludir a personajes, en un principio del propio barrio. Así surgió el ninot y posteriormente los aldeanos comenzarían a confeccionar también los catafalcos, de forma que se creaban monumentos con varios muñecos, que de las telas y la cera evolucionaron ya en el siglo XX al cartón piedra.

En el siglo XX el cartón piedra facilitó este arte y actualmente se utilizan materiales fácilmente moldeables como el poliexpan, aptas también para plasmar todo el cromatismo del que hacen gala estos gigantes. Todo este conjunto de imaginería popular será consumido en las llamas la noche del 19, último día con la famosa "cremá", nada menos que la incineración de todas las fallas, salvo una.

6 comentarios:

  1. Una demostración impresionante del arte de los valencianos. Lástima que vayan acompañadas por tanta pirotécnica. Conozco a varios valencianos que salen de Valencia cuando empiezan las fallas porque no aguantan las "mascletás".

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    1. Sí, hay que reconocer, SEÑOR BWANA, que esos "carpinteros" valenciás son unos artistas. Y más cuando saben previamente que van destinadas sus obras al fuego.
      Tampoco a mí me gustan los abusos de ruídos y aquello es terrorífico en eso. Casi tan molesto como oir discos de Rock and Roll.

      Imagino que se irán fuera muchos valencianos durante esos días al igual que lo hacen muchos pamplonicas en los "sanfermines".

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  2. Así es, Don Iñigo. Hay varias teorías que tratan de explicar el origen de las Fallas, y esa que se ha apuntado es la más razonable y popularmente extendida.

    En el éxito popular se juntó todo: la celebración coincide con la llegada de la primavera y, simbólicamente, se está celebrando dejar atrás los días oscuros y fríos del invierno para dar festiva bienvenida a nuevos días más soleados, agradables, cuando el verdor y las flores anuncian posibles buenas cosechas futuras. De paso, se está dejando atrás, despidiéndolo, el tiempo de cuaresma.

    Añadámosle el hecho de que la gente, no solo los carpinteros, podía aprovechar el momento para desprenderse de trastos inservibles de madera hechos papilla por la carcoma, lo que daría cierto toque "higiénico" a la quema de lo que se entendía por Falla.

    En fin, ya vemos que es, en su origen, una celebración donde prima la practicidad. No me creo nada otras explicaciones del origen de las Fallas basadas en extrañas teorías filosóficas sobre el simbolismo profundo del fuego en relación con la purificación personal y no sé qué historietas rocambolescas.

    Finalmente, ocurre que la Iglesia, siempre poderosa en la historia española y que marcaba ritmo en la sociedad y en el calendario, impregnó también de significado religioso esta celebración.

    Con el tiempo, aquello que se quemaba fue trabajándose para que fuese llamativo, colorista, artístico. Y el resultado final, después de tantos años, son los monumentos de madera y cartón que vemos quemar año tras año.

    Se lo dice uno que vive en Valencia.y que le envía desde aquí un saludo ... ¡¡ con olor a pólvora !!

    Aunque he de decirle que, como yo ya he visto muchas Fallas, busco en el calendario de cada año la posibilidad de escaparme de la ciudad y ahorrarme el caos, ruido, papeleras quemadas, atascos de tráfico, abusos imprudentes con la pólvora, etc. que ocurren durante estos días. Demasiado follón.

    Lo malo es que casi nunca puedo irme porque los días de Fallas, aunque teóricamente sean festivos, son días laborables.

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    1. AMIGO ROMERO LANDA
      Muchas gracias por tus explicaciones que siendo de uno de Valencia valen muchísimo más que las más arqueológicas especulaciones al respecto.

      Hay dos puntos que tocas que en España tienen mucho arraigo :
      A) El sentido práctico de eliminar lo inservible y disfrutar festivamente a cuenta de ello. En otras partes antes se quemaba todo lo inservible y combustible en la víspera de San Juan ( otra fiesta bautizada por la Iglesia ya que las hogueras del Solsticio de verano tienen miles de años de antiguedad en la civilización greco-latina).

      B) Que casi todas las festividades religiosas del Cristianismo provienen de festividades pre-existentes en el politeísmo romano. Tanto la Navidad que se hizo coincidir con las Saturnales romanas, como la Pascua de Semana Santa que proviene de la conmemoración JUDIA de la huida de Egipto, o la Ascensión de agosto con las bacanales u ofrendas al díos Baco.

      Respecto a tu huída en esas fechas de Fallas es algo que los mayores de 40 años hacemos en todas las fstividades de nuestras localidades por evitar el follón y sus colaterales.

      Un muy cordial saludo

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