Nos pasamos el día hablando de Podemos, pero el verdadero problema que hoy tienen el Gobierno y este país no está en Podemos, sino en los jueces.
Los jueces que, con una argumentación "antisistema", se negaron en Cataluña a retirar las urnas del 9N.
Los que se permitieron enmendar la plana al Constitucional y discutir la "proporcionalidad" de esa medida a la que obligaba la suspensión de la consulta. Los jueces que, cuando no corrigen al Supremo desde el Constitucional para legalizar Bildu, corrigen a este último desde un juzgado de provincias de Badalona.
Los jueces que no tardaron más de 24 horas en excarcelar a Inés del Río cuando la sentencia de Estrasburgo se cargó la doctrina Parot. Los jueces que ni siquiera esperaron a que esa sentencia estuviera traducida. Los jueces que, con idéntico espíritu cagaprisas, corrieron sin aliento a excarcelar a "Santi Potros" y a Plazaola el pasado 2 de diciembre, a solo 24 horas de que entrara en vigor la ley orgánica que lo impediría.
Los jueces que, catorce días después, en un pleno del Supremo, decidieron posponer su fallo hasta el 13 de enero para hacer más alegre la Navidad de los asesinos y más triste la de sus víctimas.
Con esos defensores del sistema, no necesitamos a Podemos.
Para no decidir nada, estuvo ese alto tribunal reunido todo el pasado martes como los Doce hombres sin piedad. Me acordé de las excarcelaciones exprés que siguieron a la sentencia de Estrasburgo. También un alto cargo me dijo entonces que confiaba en que los jueces nos los soltaran a todos de golpe unas horas antes de que, en efecto, los soltaran a todos de golpe.
A uno, la verdad, le tranquilizarían esa candidez del Gobierno y su falta de control sobre los jueces si tuviera la certeza de que responden a la famosa división de poderes y no a la sumisión de la Justicia a otros poderes que no son los del Estado.
Uno tiene la sensación de que, en un marco tan inestable como el de nuestra legislación, hubiera una carrera entre los gobiernos españoles y los jueces; los primeros para cambiar las leyes continuamente y los segundos para dar la vuelta a estas aprovechando las fisuras que dejan esas reformas precipitadas.
I. Ezkerra
mas grave
A mí estos personajes siempre me han dado un poco de miedo. Dios me libre de verme en sus manos.
ResponderEliminarDON TRECCE
EliminarEstos personajes en todos los países del Mundo civilizado son la gente más seria y respetada de la sociedad. Y aquí lo eran pero han degenerado hasta en lo que comentas : que ya hasta dan miedo.
36 días han tardado en darle a J.L. Nuñez y a su hijo el tercer grado, han pasado las navidades en casa. Condenados a 6 años por unos delitos del año 1991, que diferencia.
ResponderEliminarDON CSC
EliminarOtra muestra más del miserable actuar de los ropones. No habrá nadie capacitado en el Pepé para frenar todo esto y echar de la carrera judicial a dos tercios de ellos?
O lo que sucede es que los dirigentes peperos están tan pringados como los sociatas en general y no les conviene cambiar nada en esas actuaciones de los canallas vestidos con toga romana.
se empieza ensuciándose las togas con el polvo del camino y se acaba con una larga ristra de medallas manchadas de sangre. La Justicia española es única por su algo grado de claudicación al resto de los poderes del Estado. Eso sí, no verá usted jueces en la cárcel por corrupción. Ni uno... y ya es cosa extraña en el país de Rinconete y Cortadillo.
ResponderEliminarUn saludo, don Javier.
DON HEREP
EliminarLos hay de todos los tipos : los conchabados con abogados para chantajear a industriales, así como los que han percibido inmensas sumas de soborno de los Cartel de la Droga para dejar libres a detenidos cogidos in fraganti. Uno de ellos fue Garzón pero nadie dijo ni muuu. Otros han estado al servicio de potentados como Polanco para cargarse a jueces honrados como Gomez de Liaño, y aún no sabemos algunos los que están pagados por el entorno etarra para liberar a los suyos.
Sí hubo el caso de dos ropones encarcelados por cohecho, y en Barcelona. Los jueces de primera instancia de Barcelona Carlos Lorenzo-Penalva de Vega y Joaquín García Lavernia, respectivamente, como autores de un delito de cohecho (soborno) port haber montado con unos abogados una trama de extorsión a empresarios. Caso "ostentoreo" que diaría Gil y Gil, pero no habido más, tal como comentas..
Convengo absolutamente en ello, ya dije hace poco en mi blog que las mareas puñeteras hacen menos ruido porque no gritan con camisetas de colores puestas pero son infinitamente más perniciosas.
ResponderEliminarEspero que haya digerido bien los primeros embates culinarios de tan entrañables fechas ;)
DOÑA
EliminarBuena frase esa de "mareas puñeteras que hacen menos ruído pero que son infinitamente más perniciosas".
Venimos desde años denunciando desde nuestros blogs a muchos de esos miserables, por ejemplo el de los SEIS del Constitucional que legalizaron a Bildu, y el de los otros tantos que soltaron a la Mesa Nacional de Batasuna, encarcelada por el T. Supremo.
Los embates culinarios me han rejuvenecido 36 años y basta con que pinches en mi alias para que veas qué cara de pipiolo de 45 años se me ha quedado. Todo por ingerir unas simples cocochas, besuguito y cordero junto a alguna ostra de Arcachón. Alimentos que, salvo el cordero, no gustaís los mesetarios.
Un abrazo
una panda de cuidado.
ResponderEliminarDON MAMUNA
EliminarDe mucho cuidado.Peor que los albano-kosovares en noche de sábado libre.