AURELIO ARTETA |
—Usted ha escrito sobre la responsabilidad del "espectador del mal", del que se mantiene al margen, del que oyendo gritar a alguien en medio de la noche no se levanta, del que viendo cómo maltratan a alguien en la calle cambia de acera y se aleja, esperando que sea otro el que intervenga. ¿Cómo de enfermo está un País Vasco que pretende pasar página sin examinar el abismo moral de las últimas décadas?
—El nacionalismo ya es una grave enfermedad política que origina en sus adeptos múltiples perversiones morales. Pero "espectador" es todo el que –pudiendo hacerlo sin un grave perjuicio– no quiere enfrentarse al causante del mal o al grupo que lo consiente o justifica (de amigos, trabajo, familiar, etcétera) por miedo a quedarse solo.
Ni tampoco esa enfermedad de la cobardía aqueja en exclusiva al País Vasco, claro está. La complicidad silenciosa con los daños de otros nacionalismos, de tantas corrupciones, de fraudes tan colosales... ha sido diaria por parte de muchos y durante décadas
—¿En qué medida el uso partidista de la lengua y de la historia como armas de formación del espíritu nacional en comunidades como Euskadi, Cataluña y Galicia han fortalecido la división, el victimismo, el mito?
—Ya se ha probado hasta la saciedad la deformación sectaria de la historia con ese objetivo. Se ha denunciado menos la política lingüística, la palanca principal de la "construcción nacional", que lleva aquí 30 años contando con el beneplácito de la izquierda. Y es que, a su juicio, sin una lengua propia no habría nación y sin nación no hay derecho de soberanía o de secesión.
De ahí la contumacia en la educación forzosa del catalán en Cataluña o la presión social que en Euskadi conduce a los padres a matricular hoy a sus hijos en el modelo educativo en euskera, cuando la inmensa mayoría de esos padres y su ambiente ni lo conocen ni lo hablan. Es una mentira aceptada.
-Algunos nacionalismos se han servido del marxismo para vestirse de progresismo. ¿Cómo de falaz es ese matrimonio?
-Confundir la liberación nacional con la liberación económico-social, la lucha de tribus con la lucha de clases, el localismo con el universalismo, las categorías de la razón con las emociones del corazón, etcétera, no es señal de progresismo, sino de pensamiento y acción reaccionarios.
-¿De qué hablamos cuando hablamos de federalismo? ¿De qué hablamos cuando hablamos de igualdad?
—Esos privilegios están fundados en unos falsos "derechos históricos" (porque la historia no engendra derechos) y mantenerlos en una democracia resulta escandaloso. Son derechos anticonstitucionales, porque contradicen los artículos más básicos de nuestra Constitución. Y además funestos, porque desatan la envidia de las demás Comunidades y las enfrentan entre sí, como estamos viendo.
Tales privilegios forales rompen la igualdad democrática, que es ante todo igualdad política; y producen también notables diferencias de prestaciones sociales entre los conciudadanos.
-¿De veras queremos federalismo?
-El federalismo establece diferencias secundarias entre los Estados federados, pero igualdad en los derechos fundamentales de todos sus ciudadanos. Si la España actual adoptara esa fórmula política, las Comunidades tendrían que devolver al Estado federal las competencias en sanidad o educación entre otras.
—¿Es el caso Pujol paradigmático del uso de la bandera para encubrir un comportamiento canallesco?
—Indudablemente. Es paradigmático asimismo de la hipocresía más brutal, del cínico culto a la personalidad, de la confusión entre ser antifranquista o nacionalista y ser demócrata. Pero, sobre todo, es paradigmático de esa "espiral del silencio" que consiente el mal por miedo a las represalias o a quedarse solo. Este escándalo ha dejado bien claro que quienes conocían de siempre las fechorías de los Pujol (políticos, empresarios, financieros, periodistas, etcétera) eran legión. Y dejaban hacer.
—¿Por qué hay que recordar constantemente que es una falacia decir que se puede defender cualquier cosa con tal de que no se emplee la violencia o que todas las ideas son respetables? ¿Es que pocos escuchan, o demasiados pocos piensan de verdad lo que dicen?
-El tópico nace de no querer pensar, del deseo de abrigarse con el calor de "los nuestros". No es extraño que caiga en los peores dislates. Por ejemplo, que la violencia sea siempre mala, pero no el pensamiento que puede provocarla; que, en lugar de respetar a la persona debamos respetar sus más estúpidas ideas.
A. Armada
charlando aurelio
Una entrevista que no tiene desperdicio de ni usa sola palabra, ni usa sola tilde, ni usa sola coma.
ResponderEliminarCon permiso, Sr. Tellagorri, tengo intención de compartir este enlace en Google+
Un cordial saludo.
DON ROMERO
EliminarEs un resumen, por razón de espacio bloguero, de la mentalidad de los catedráticos de la talla moral de Aurelio Arteta y que han tenido que huir del País Vasco hace años. Menos él y alguno más.
Esta entrevista viene a machacar en lo fundamental de lo que es la FALSEDAD NACIONALISTA.
Saludos cordiales
Tiene apellido "Arteta", que creo que es bien vasco, pero ha tenido que exiliarse, porque los de las pistolas y los recogenueces han decidido que no es un "buen vasco".
EliminarMe sumo al comentario del amigo Romero, habría que contar con hombres de la talla de D. Aurelio para enmendar el daño ocasionado en esas comunidades
ResponderEliminarDON MANUEL LEÓN
EliminarMe satisface que le plazca el contenido, breve, del pensamiento de los vascos estudiosos no nacionalistas. De esta madera y coraje eran Unamuno y Baroja en su época, y éste catedrático junto con otros como Savater siempre han dado la cara en denunciar lo que es una copia del talibanismo afgano.
Hola,Javier:
ResponderEliminarCreo que muchas de las afirmaciones que Arteta hace en la entrevista son citas para recordar, para releer de forma pausada. La archivo para retomarla de vez en cuando.
Un cordial saludo.
DON XESÚS
EliminarSí, muchas de las frases y párrafos que en la entrevista expone Don Aurelio Arteta son merecedoras de ser tenidas en cuenta en todas las circunstancias en que se habla de secesionismo.
Un cordial saludo
Grande este hombre.
ResponderEliminarPor desgracia, los grandes como él, ya no están aquí; quedan los aplaudidores de los asesinos y los amables con el nacionlismo cavernario del PNV.
SEÑOR OGRO
EliminarEstamos de acuerdo respecto al personaje. Lo triste es lo que ha quedado, como dices, aquí con la autodenominación de "intelectuales". Ni saben Gramática de ningún idioma. Hace ya muchos años que no veo ni oigo un debate de "vascos culturizados". Los más destacados son una copia del turricéfalo de Eguibar.
Estuve leyendo ayer la entrevista de Alfonso Armada a Aurelio Arteta en el incomparable marco de San Juan de Duero (¡qué recuerdos!)
ResponderEliminarMuy interesante.
DON TRECCE
EliminarMe alegro de que hayas leído esta entrevista realizada en Soria, y como bien dices en el marco de un lugar bellísimo como es San Juan de Duero.
El nacionalismo español??????
ResponderEliminarDON CHAFAS
EliminarNo existe. Unicamente rebrota cuando juega la selección de "furbo".
Si existe: Los del cine español apelan a que los españoles debemos ver su cine porque para eso somos españoles, y como en general no solemos ver sus películas, exigen que les indemnicemos a través de nuestros impuestos - subvenciones -.
EliminarTambién están los de la tauromáquia, muchos de ellos dicen que los antitaurinos somos antiespañoles.
Clarito, Clarito.
ResponderEliminarDON MAMUNA
EliminarSí, muy clarito y sin complicaciones para las entendederas de los políticos, por muy brutos que sean.
Excelente entrevista, Javier.
ResponderEliminarLa lástima es que, existiendo pensadores como el Sr. Arteta, su pensamiento quede relegado por las paranoias de los "intelectuales" de hoy en día, por no decir de la apatía que estos temas despiertan en la plebe española del pan y circo.
DON HEREP
EliminarDado que lo que denuncia Arteta supone para los políticos el sacrificio de no mangar y de no tapar a los mangantes, además de tomar decisiones con los iluminados regionales, es casi imposible que la CASTAZA haga el más mínimo caso a lo que diga.
Como bien supones prefieren los adornos de los "intelectuales" de pacotilla que jamás han escrito una cuartilla. Tipo Ramoncín y cuadrilla.
Y a la plebe no le gusta hacer el esfuerzo de PENSAR por sí misma.
Apaciguamiento,apaciguamiento y apaciguamiento al igual pero en mayor implicación humana, lo que está pasando con el yihadísmo... va a ser fatal, si no se va cortando por lo sano...
ResponderEliminarDON JUAN CARLOS
EliminarYa está sucediendo lo que previenes respecto a los yihadistas : en Cataluña y País Vasco las masas están totalmente adoctrinados y fanatizadas.
Y dado que no hay gobernantes con gónadas ni a izquierda ni a derecha ni por parte alguna, todo irá a peor.
El euskera es la gran herramienta política del nacionalismo, junto a la deformación de la historia. En este hilo se discute la vasconización tardía de estas tierras... en periodo postromano.
ResponderEliminarSuelen escudarse en la oficialidad, pero esto no es más que una excusa. Y la prueba es que la lengua de signos es oficial desde hace más de una década, y ni uno solo de estos fundamentalistas ha exigido que los funcionarios tengan que dominar la lengua de signos, diseñar un modelo "S" íntegramente en lengua de [s]ignos, castigar a niños que no hablen con otros niños en lenguas de signos, dar subvenciones multimillonarias a cualquier cosa que tenga alguna relación con la lengua de signos, exigir "normalizaciones" de la lengua de signos, dar la tabarra con la lengua de signos, etc...
Los mismos que dicen que quieren secesionarse de España porque mantiene instituciones anacrónicas como la monarquía, son los mismos que flipan en colores hablando de "derechos históricos de los territorios", una figura medieval anacrónica.
Pujol fue uno de los promotores del estado autonómico y fomentó en fanatismo... ahora ya sabemos para qué: Para saquear.