Un revolucionario láser acaba de encontrarla bajo la espesa selva de Camboya. Vivían dos millones de personas. Incluía templos, canales, diques, carreteras...
Hace más de 500 años, Mahendraparvata, capital del Imperio Jemer, languideció, se quedó deshabitada y desapareció entre la espesa jungla camboyana. La ciudad perdida y olvidada acaba de ser descubierta por los arqueólogos.
En abril de 2012, Damian Evans, de la Universidad de Sydney (Australia), y Jean-Baptiste Chevance, de la londinense Fundación de Arqueología y Desarrollo, cargaron en un helicóptero un sistema láser que rebota miles de millones de pulsos en el terreno y mide el tiempo que tardan en volver.
A 800 metros sobre el suelo el helicóptero pasó ocho días sobrevolando los tupidos bosques y los láseres dibujaron un mapa detallado de un paisaje urbano meticulosamente planificado. Incluía carreteras, diques, canales y templos ocultos bajo una densa vegetación sobre Phnom Kulen, una montaña en la provincia de Siem Reap.
La nueva tecnología es como un ábrete Sésamo porque los haces de láser pueden penetrar la densa vegetación y cubrir extensiones de tierra que llevaría años explorar a pie. Sin remover ni un celemín de tierra, sin tener que soportar los mosquitos ni arriesgarse a las fiebres, los arqueólogos han descubierto más de dos docenas de templos abrazados por enormes raíces y vestigios del mayor núcleo urbano preindustrial del mundo. Lo que obtuvieron con el láser fue la inesperada imagen de una gran urbe pasmada en la quietud definitiva.
Lo que sobre el terreno parecían surcos y agujeros sin relevancia, era un complejo sistema de acueductos y presas. Sin necesidad de largas excavaciones, de repente vieron en la pantalla lo que llevaban años buscando. ¡Eureka! El hallazgo supone que la extensión de Angkor, la imponente capital del Imperio Jemer, fue casi cuatro veces mayor de lo que hasta ahora se había estimado.
Era, en definitiva, el espectacular corazón de un imperio cuya influencia se extendió por gran parte del sudeste asiático.
Mahendraparvata, apenas a 25 km al oeste de Angkor Wat, empezó a erigirse hace 1.200 años, al tiempo que el primer emir de Córdoba comenzó a levantar su mezquita.
Era el capricho del rey Jayavarman II, el fundador de un imperio en un tiempo y un lugar lleno de dioses. Incluso algunos hombres eran dioses. El rey se autonombró Chakravartim, Rey del Mundo, y Mahendraparvata fue la metrópoli desde la que dominó su imperio. Lo cierto es que se trata de un hallazgo relativo, porque no sólo se sabía de la existencia de Mahendraparvata, sino que algunos templos y edificios civiles ya eran conocidos desde hace años por el equipo del francés Jean-Baptiste Chevance.
Los arqueólogos australianos y franceses confirmaron su mapa virtual con una expedición a pie por la selva. Junto a Evans iban un guía con una sola pierna llamado Heng Pila y el fotógrafo Nick Moir. Para acceder a la montaña de Kulen tuvieron que recorrer barrizales infestados de alimañas, matorrales y pantanos con el alma en vilo porque estas montañas fueron uno de los bastiones del Jemer Rojo durante los años 70 y 80 del siglo pasado y los guerrilleros las sembraron de minas.
Olvidada por el mundo en los últimos seis siglos, no ha sido saqueada y permite el estudio de la civilización que la construyó.
El enigma es ¿Por qué se hundió el gran imperio jemer? Damian Evans, codirector de la expedición, dice que una de las teorías que están considerando es que la dependencia de la gestión del agua llevó al colapso de la ciudad. En el siglo XII la urbe contaba con una población muy elevada, probablemente de dos millones de habitantes, que sobrevivía gracias a los alimentos de las zonas rurales.
A sólo 25 kilómetros de Angkor, el mayor complejo de templos hinduistas del mundo, "más grandioso que Grecia y Roma juntas", los jemeres levantaron la ciudad de Mahendraparvata, hace 1.200 años.
Por Ugidos
ciudad perdida
Interesante descubrimiento.
ResponderEliminarGRACIAS, Don Mamuna, por el comentario.
EliminarLo cierto es que debe de haber por esos mundo montones de ciudades desaparecidas que quizá algún sean descubiertas, como las asirias UR o Babilonia.
Estos arqueólogos están locos. Deben ser gente que se escondió durante las guerras camboyanas. Los camboyanos viven en cuevas y túneles practicando la guerra de guerrillas, desde la guerra civil camboyana y la guerra con Vietnam, cuando estos los invadieron y crearon la República Popular de Kampuchea y luego se retiraron ante la intervención de los chinos.
ResponderEliminarDOÑA LUCRECIA
EliminarCada quién con su chaladura y hay arqueólogos que descubren ciudades ciudades desde helicópteros.
Si, esa selva está plagada de jemeres rojos escondidos y huídos de la degollina que les metieron a los de Pol Pot.