En estos tiempos, a los tipos como algunos blogueros liberales se nos mira cual si fuésemos vejestorios babeantes. Sucede así porque aún podemos ver los pilares sobre los que descansa nuestra civilización.
El resto, ahogados en la comodidad y en las consignas no ven pilar alguno. Son tan simples como la primera ley de la termodinámica, postulada en base a que alguien o “algo” aporta continua e indefinidamente la energía que se transforma.
En resumen: cuando no percibes las bases o pilares, igual da que existan o no.
Poco importa que sea constatable que una mala empresa está condenada a la quiebra (transmutando aquí empresa por nación), porque el caso es que hoy estamos (están) creando una serie de empresas mal organizadas, mal dirigidas y peor administradas, ignorando las inexorables leyes del mercado, físicas y deontológicas (vuelvan a cambiar empresa por nación y estaremos en el buen camino).
Podría recurrir a cientos de axiomas proporcionados por las leyes físicas, de las del mercado, e incluso a postulados filosóficos, pero seguiríamos igual. Seguiríamos atascados en el problema, pues, plagiando descaradamente a Albert, dos cosas considero inmensas: la infinitud del universo y la imbecilidad humana; y si bien no estoy seguro de la primera, por el contrario estoy muy cierto de la segunda.
Lo que no alcanzo a comprender es la actual negación de la propia cultura greco-romana. Ya sabemos que a la materia le acompaña la indefectible antimateria, pero la catástrofe del encuentro entre ambas no ocurre porque sí. Se rige (o eso se cree comunmente) por las leyes físicas. No veo por ningún lado una nueva cultura capaz de sustituir, con grandeza, a la que nos sustenta desde hace varios miles de años.
En oposición a lo anterior, hemos entrado en una fase de rápida degradación que, forzosamente, nos llevará a la implosión de la nación. Puedo comprender que algunos individuos deseen esa catástrofe por maldad pura y dura, o por algún desconocido método de prosperar.
Lo que no puedo comprender son las razones objetivas del resto para obrar de tal manera. Bueno, al menos no puedo comprender que saquen del frenopático la momia de Sabino Arana o de Pablo Iglesias o del propio Franco como justificación.
Quizás es que no hemos prestado la atención debida a nuestros hijos. No todos podemos abandonar nuestros quehaceres para dedicarnos exclusivamente a instruirles en historia, geografía, matemáticas y lenguas. Sí hemos podido tomar la precaución de no atiborrarles con datos generales, poniendo especial énfasis en instruirles en la capacidad de pensar por sí mismos, más que en el uso puramente mecánico de la memoria.
Fue eso lo que hizo precisamente el padre de Pascal.
Blaise Pascal fue educado de forma muy rigurosa por su padre, quien presintiendo las cualidades del niño se jubiló de su empleo de funcionario para dedicarse en cuerpo y alma a su enseñanza.
Más tarde el propio Pascal rubricaría la definición del hombre que es básica para nuestra actual concepción: “el hombre no es más que una caña, la más débil de la naturaleza. Pero es una caña que piensa”.
Claro está: no hay muchos padres como el de Pascal y, decididamente, muy pocos niños podrían hoy llegar a ser Blaise.
Nos jactamos a menudo de haber conseguido dominar el crecimiento económico, de haber alcanzado un alto grado de civilización. Pero, en cambio, constantemente nos vemos rodeados por conflictos, prejuicios raciales, guerras y odios diversos que impiden cualquier razonable organización del desarrollo (humano)y tampoco el conocimiento de las ciencia básicas.
Generaciones recientes han sido alimentadas a base de prejuicios y distorsiones. Debido precisamente a ello, han sido y serán incapaces de promover aquéllas condiciones que faciliten el advenimiento de un mundo abierto; un mundo en el que la convivencia y el desarrollo de las facultades y satisfacciones personales se produzcan pacíficamente, un mundo en el que estén presentes una serie de valores que han sido los causantes de la prosperidad de los pueblos enriquecidos, por el esfuerzo de cada uno, y educados en meritar la Cultura de la Humanidades.
Quizás nuestros nietos estén en condiciones de hacerlo si somos capaces de eliminar los corsés educativos que niegan a la mayor todo lo anterior, por causa de tanto descerebrado pedagógico. O pedagogos que no sirven ni para educar animales de compañía.
¿Pero seremos capaces?
No sé si me he expresado con la debida consecuencia. En cualquier caso espero sepan excusar las torpezas, y comprender que uno sólo es una caña que piensa.
Tellagorri
educacion escolar rollo asume
Esta última foto que has colgado ¿tiene alguna intención, o soy yo la mal intencionada? jajaja...
ResponderEliminarNo sé, pero me ha recordado "la caña" de los jóvenes extremeños, esa en la que el Gobierno autonómico también quiere meter las narices.
Es una pena pero es lo que hoy en día tenemos.Unos dirigentes ayudados por unos pedagogos más preocupados por los genitales de los ciudadanos que por una educación eficaz basada en el esfuerzo de cada uno.
Con la manía de la igualdad, se mezclan en las aulas niños con coeficiente intelectual normal, con otros que sufren verdaderos retrasos consiguiendo la igualdad recortada por abajo.
Y no, no se premia el esfuerzo, se pasa de curso con no sé cuántos cates. Así no hay quién se estimule para dar el callo.
En educación damos un paso para adelante y dos para atrás. Y no se les mete en la cabeza a los políticos que se debe firmar un pacto por la educación para que no cambie según el gobierno de turno.
Por último, todo el refuerzo económico dedicado a la educación revertirá en un futuro próspero económica, social y culturalmente.
Debemos facilitar que las "cañas" desarrollen su pensamiento, sí, pero su pensamiento libre.
Un beso.
Pues la verdad, lo están haciendo brillantemente.
ResponderEliminarSi el objetivo es conseguir una juventud que no piense y que deba estar agradecida infinitamente a quien le ha proporcionado la posibilidad de vivir sin pensar y sin preocuparse...
Ideal, una dictadura de facto legitimada electoralmente por unos borregos sin capacidad de raciocinio.
Hoy pensar es sinónimo de peligro, no para el sistema (está demasiado consolidado), para ti.
A un paso estamos de la quema de libros... para lo que sirven
Doña ELENA
ResponderEliminarEsa foto es de un parque con patos y en medio del estanque hay una columna que soporta a una rana de bronce.
?Te habías imaginado alguna otra cosa perversa?
Mira, en mis tiempos se estudiaba Latín y Griego que servían para saber buscar el origen o la etimología de las palabras que se usan en los idiomas romances. Y nos ha servido muchísimo a los que lo estudiamos.
Si el médico al que buscas pone una placa que dice ESTOMATOLOGO, quiere decir que, según el griego estoma-estomatos significa boca, y logos significa tratado e estudio, de donde un estomatólogo es un especialista de la boca o dentista.
También estudiabamos, y a fondo, la Historia de España y de Europa, de forma que sabiamos que mientras en España había un rey navarro llamado Sancho III, en Inglaterra reinaba Ricardo Corazón de León de la dinastia Plantageneut.
También estudiabamos Geografía y nos hacía distinguir que Logroño no está junto a Jaén, ni Laos cerca de Canadá.
Por supuesto aprendiamos, también, Matemáticas, Química, Física.
Y nuestra formación servía para conseguir buenos ingenieros, médicos, abogados, etc.
Sinceramente eres de las cañas que mejor piensan con mucha diferencia. Y al pensamiento de Einstein, añadiría una tercer parte la tontería española también es infinita, el saber no ocupa lugar, a menos que sea la contraria al régimen, no interesa que se sepa nuestras raíces heredadas de los romanos, con gotas de cartagineses, y de todos los pueblos del Mediterráneo por un lado y por el nuestro (Cantábrico y Atlántico), de pueblos norteños y de navegantes vikingos.
ResponderEliminarUnos y otros, están enfrascados en una guerra por revisar la historia y llevar el ascua de la sardina a su lado, y la Historia es la que es. Yo cuando mi hijo me viene a preguntar algo del colegio, me siento con él y si es un problema, se lo planteo de otra manera más compresible, por la calle vamos jugando a sumas, restas, multiplicaciones y divisiones. Y aprovechando que el Pisuerga pasa en estos días por Calahorra, pues algo de la Historia tan rica por estos lares.
No decaigas, pues te has explicado con las suficiente consecuencia, y somos muchos los que te agradecemos tus sabias publicaciones y apreciaciones.
Ya decía,Javier, la gran Oriana Fallacci, "que la izquierda había abdicado de la defensa de los valores de la tradición judeocristiana,de la esencia de la civilización occidental,de nuestro acervo cultural común,de las tradiciones que hilvanan la vieja Europa, para entregarsse a esa nueva Eurabia que se gesta y a ese relativismo anticristiano que pretende demoler todo lo que conforma el sustento cultural y educacional de los últimos nueve siglos"
ResponderEliminarISRA
ResponderEliminarSí, vamos camino de la quema de libros o del cierre obligatorio de librerías y editores de libros.
Ideal, una dictadura de facto legitimada electoralmente por unos borregos sin capacidad de raciocinio.
Eso es lo que buscan siempre los totalitarios, sean leninistas o sean de la Inquisición vaticana.
JAVIER POL
Me dejas abochornado con tus elogios, Javier. Pero bien venidos sean que para recibir palos siempre estamos en primera linea.
En efecto, los analfabetos y adoctrinados en el sectarismo tratan de eliminar todo rastro de cultura individual porque eso es un peligro. Lo ideal para ellos es tener ovejitas que sigan las instrucciones de sus pastores.
No han inventado nada porque eso mismo lo ha hecho durante dos mil años el Vaticano y sus obispos. Y, además de no haber sido jamás perseguidos por los paganos, ellos sí han perseguido a los que pensaban por cuenta propia.
Y ese modo de actuar lo copian siempre los totalitaristas.
NATALIA
La FALLACCI era excepcional y era mujer clarividente y valiente. Sólo la sociedad neoyorkina podía darle hospitalidad porque la vieja Europa no está para "alarmismos" sobre CULTURAS.
Ya sucedió antes ese tipo de mentalidad y casi quedamos definitivamente instalados en la Cruz gamada.
Aunque parte de España, la catalana y la vasca, estamos bajo la bota doctrinal de la misma cruz gamada.
Tellagorri, "vejestorios babeantes", hay qué risa.
ResponderEliminarAnte mi inquietud he visitado muchos blogs y el tuyo es uno de los que más aprecio y este artículo demuestra tu sabiduría.
¿Te imaginas que esto mismo lo escribiera un joven?, sin duda los habrá pero muy pocos que se atrevan, les pondrían la "etiqueta" y eso duele, además "no está de moda".
Es una lástima, no es pasión de madre, tengo unos hijos maravillosos pero cuando hablamos en general de la sociedad española, política etc. no quieren saber nada, no han votado nunca, será por su juventud.
PASION
ResponderEliminarPara los veinteañeros, tipos como yo, son VEJESTORIOS. Y lo de babeantes toca cuando no les gusta lo que se les dice.
Te quedo muy agradecido por decirme cosas tan bonitas como eso de he visitado muchos blogs y el tuyo es uno de los que más aprecio y este artículo demuestra tu sabiduría.
Los jóvenes podrían escribir mejor que esto pero les falta la experiencia de la vida para comprenderlo.
ya les tocará entenderlo, y si no llega ese momento, peor para ellos.
Yo creo que la juventud actual está tan harta de tanta mentira, me refiero a los NO adoctrinados, que pasan de querer saber nada de políticos, etc. etc.
Y es una pena. Porque ELLOS son los destinados a resolver lo que ahora va hacia el caos.