10 abril 2017

Medrar y medrar para forrarse


Medrar y medrar ha sido la pasión de casi todas las camarillas políticas, áulicos, privados, validos y consejeros desde el siglo XVII. De Felipe III a Juan Carlos I, de Lerroux a Roldán, del estraperlo a Filesa, de Valencia a Murcia, con los Austrias o los Borbones, con la derecha y con la izquierda los gobernantes trataban de forrarse, aunque algunos terminaban en el patíbulo.

Los pícaros y los bandidos románticos eran literatura; mientras los ministros y gobernadores, los virreyes y consejeros del rey, se untaban con el dinero público, con los tesoros de las colonias, con las obras públicas. No los ahorcan, como antes, pero se les putea y casi se les lincha en la puerta de los juzgados o en los telediarios. A veces analizamos como apetito de poder lo que es en realidad una lucha por el empleo.

R.  POZO


6 comentarios:

  1. Son como una plaga, arrasan con lo que pillan y todo les viene bien.

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    1. DON TRECCE.
      Imitan a los tiburones y a las garrrapatas : todo es bueno y cuanto más se chupa la sangre del prójimo mejor se sienten.
      Eso de que antes los ahorcaban y ahora no pero pasan por los telediarios, es en los mínimos casos porque ahí siguen atracándose algunos y nadie dice ni muuuuuu.

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  2. Como bien dice, LOS PICAROS y LOS BANDIDOS estaban en la Literatura, pero los reales eran y son los ministros, virreyes y gobernadores o cargos con mando.

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    1. DON CARMELO.
      Es una ironía del escritor R. del Pozo pero refleja una realidad que es muy poco virtual.

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  3. Como dice TWAIN en la imagen del post, "Es más facil engañar a la gente que convercerlos de que han sido engañados".

    Y eso sucede en España con por lo menos la mitad de la población. Y hoy.

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    1. Ese es el peor mal de este país : que somos más fanáticos de la adicción al forofismo en todo que razonables. Se vota a Partidos sin pensar si serán capaces de resolver los problemas, basándose en simpatías parecidas a la que hay en el futbol.

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