20 febrero 2014

Consejos para un buen fin de semana

John F. Kennedy, Ronald Reagan, George W. Bush o John D. Rockefeller tienen varias cosas en común: no sólo se trata de algunos de los norteamericanos más influyentes de la historia de EE.UU., sino que también practicaban... la siesta.

Pese a que "The New York Times", siguiendo los pasos de "The Telegraph", ha decidido arremeter contra los horarios españoles y el cliché de la siesta, lo cierto es que en tierras norteamericanas se han dado célebres ejemplos de quienes sí conocían (o al menos experimentaban) sus beneficios. Es más, ocurre lo mismo con millones de estadounidenses anónimos.

Por lo menos un tercio de sus ciudadanos duermen la siesta a diario, como mostraba una encuesta del Pew Research Center en 2009. Según indicaba  esta costumbre es practicada tanto en los fines de semana como a diario, sin apenas diferencias en los resultados. Y es que, pese a los estigmas que recaen sobre ella, la siesta tiene muchos beneficios.

Por experiencia personal sé que no "too er mundo" sirve para echar siestas como la Santa Madre Iglesia Apostólica y Romana exige: con pijama y en posición horizontal. No vale como tal siesta un "duerme-vela" en el sofá y por 20 minutos tras una comida. Tampoco es admisible entre los siesteros la denominada "siesta del borrego" o ese quedarse frito antes de comer y durante diez minutos.

Para el que quiera aprender este arte de la vida es conveniente leerse "El libro del Buen Amor" del buen Arcipreste de Hita (Guadalaja)  que también enseña las artes precisas para el "buen yantar y mejor folgar". Dado que él vivió en el siglo XIV  aún no se conocían las camas eléctricas con posibilidad de obtener cómodas posturas del "conjunto formado generalmente por una armazón de madera o metal con jergón o colchón, almohada, sábanas y otras ropas, destinado a que las personas se acuesten en él".


A propósito de todo esto es necesario hacer saber a la plebe lo que Oscar Wilde escribió en corto :"No hay libros inmorales. Los libros están bien escritos o mal escritos. Simplemente.", por si alguien me tacha de inducir a lecturas indecentes.

Y para terminar una recomendación para los que echan la siesta en el trabajo. Si te pillan es suficiente con decir : "Por que me interrumpen? Casi estaba llegando a una solución para nuestro mayor problema…...y además quería verificar si mi teclado es a prueba de baba…"

Iñigo

NOTA DEL BLOGUERO
El mito de la siesta española ha quedado desterrado, ya que sólo un 16% de los españoles practica esta costumbre a diario, muy sana y recomendable por otra parte. Un tercio de los adultos de Estados Unidos, el 34% se echa la siesta según una encuesta del Pew Research Center. Eso es bastante más que los españoles. Los alemanes, tan críticos también con nuestra costumbre, no pueden levantar mucho la voz porque en un estudio de la revista científica "Neurology" revelaba que los europeos que más duermen la siesta no son españoles, ni portugueses, sino alemanes. 

12 comentarios:

  1. Excelente costumbre la de la siesta, el momento más agradable de la jornada. El truco que menciona para justificar la siesta en el trabajo lo he utilizado en alguna ocasión con buenos resultados. He presenciado, incluso, cómo se quedaba dormido un japonés en una conferencia en Londres y el propio orador lo justificaba por "la dificultad que tiene esa gente en comprender el inglés, lo que les obliga a cerrar los ojos para mayor concentración"

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    1. Me alegra saber, Don Bwana, que somos al menos dos los que entendemos el vivir hedonista, el único que evita estar en el infierno.

      Lo de la justificación por dormir la siesta en el trabajo ya me imaginaba que vos la conociaís, porque es vos de las generación en que ante las carencias había que aguzar el ingenio.

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  2. La siesta de C.J.Cela, "con pijama, Padrenuestro y orinal" quizá resulte un exceso, que yo nunca practico pues soy mas de cabezada, de mas o menos una hora, sentado en butaca y vestido.
    Téngase en cuenta también la muy relajante "siesta del carnero", antes de la comida y de aplicación oportuna en viajes en avión (o tren) por ejemplo cuando horario del vuelo es coincidente.
    En resumen, la siesta, nota DIEZ; desdichado quien no la puede practicar.

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    1. AMIGO F.J.deC
      Tú lo has sentenciado : "Desdichado quien no la puede practicar".
      Lo curioso de este asunto es que, siendo yo fiel practicante de la misma y desde siempre y en todo tiempo, sólo un 16% de españoles la hacen y tachan a los nuestros de vagos por ello, cuando los gringos la practican un tercio de su población y casi por el estilo los germanos.

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  3. Antaño me gustaba echarla justo los fines de semana tras la comida. Pero algo corto, la siesta de 15-20 minutos , tumbado en el sofa. Para mi esa es la siesta buena. Pero entre semana imposible, y ahora con los crios, ni finde ni leches, se jodio el invento.

    Así que los alemanes le dan mucho a la siesta, vaya vaya vaya.

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    1. Mientras no se casen tus niños, vas bien xodido, amigo SEÑOR OGRO, en cuanto a siestas. Los que no sabeís hacer la siesta a lo hidalgo de tiempos de Cervantes, no podeís mantener las neuronas activas y creativas en los ratos de estar despierto.

      Ya ves, los eeuropeos que más siesta hacen son los TEUTONES, y luego la Merkel a decirnos que somos unos vagos.

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  4. A mi se sienta muy bien la cabezadita en el sofá viendo la tele.

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    1. Prueba, señor MAMUNA, a dormir de entre una a dos horas de siesta y verás como el Mundo te parecerá mucho más grato.
      No lo hagas de una vez, poco a poco, porque a algunos les entran dolores de cabeza tras despertarse de una larga siesta.

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  5. Yo la practico hace años, y a los "papeleros" americanos, les pueden ir dando, despues de la siesta, claro esta.

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    1. DON GUILLERMO, no hay duda de que eres una mente lúcida. Los que no han aprendido a trabajar y vivir al estilo de los hidalgos del XVII, no saben lo que es vivir bien.

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  6. Hola, Iñigo:

    Buena costumbre la de la siesta y, efectivamente, mejor en pijama. Pero de los ejemplos que propones creo que el mejor es el último. Claro que las circunstancias. A veces tiene uno que consolarse con la siesta del carnero, previa a la comida del mediodía.

    Unsaludo.

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    1. DON XESÚS
      Alarga la vida el hacer siesta todos los días. Que no te quepa la menor duda. Y además las neuronas funcionan mucho mejor porque cortan el agobio de la mitad del día y sus problemas.

      Un abrazo

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