02 junio 2010

Oyo Nyimba Kabamba Iguru Rukidi IV

Rey Oyo, el monarca más joven del mundo y líder supremo del reino ugandés del Tooro. Como buen africano, se hace esperar.

Mientras esperan en la sala del trono de su palacio de Kampala, capital de Uganda, se escuchan las risas de la entretenida charla que entre copa y copa de champán francés mantiene un puñado de cortesanos y contemplan el arte que puebla las paredes. Porcelanas chinas, frescos franceses, una lograda copia de la Gioconda y cuadros con el relieve de Napoleón montando a caballo. A los pies, mármol italiano y, al fondo, una grandiosa vista del romántico lago Victoria, cuna del río Nilo.

Engalanado con la tradicional toga real, la que usaba su tatarabuelo mucho antes de los tiempos de la colonización británica, bordada con hilos de oro, el monarca aparece y toma asiento en el trono. En una pose típicamente real, el joven rey, que acaba de cumplir los 18, se reclina y cómodamente posa sus pies sobre la piel de un leopardo que heredó de su padre.

El monarca escucha mientras no pierde cuenta de la pantalla de su flamante iPhone. La mayor parte del tiempo, el rey Oyo vive con la Reina Madre en su Palacio de Munyonyo, un exclusivo suburbio situado en una colina, a 12 kilómetros de Kampala, lejos de los humos y las chabolas de la capital ugandesa, pero visita siempre que puede su reino, uno de los cuatro territorios gobernados por reyes que hoy forman la República de Uganda.

La especialidad local son los saltamontes a la plancha. Bendecida por las lluvias tropicales, la región de Tooro es un lugar de paisajes verdes y tierras rojas, plagado de selva africana, ganado bien alimentado y bananeras, el principal producto que alimenta y a los habitantes de este rincón de Uganda.

A la coronación y aniversario del monarca a finales de abril fue una fiesta nunca vista. Asistieron decenas de reyes africanos, de Ghana, Suazilandia, Costa de Marfil, Sudáfrica, Nigeria, así hasta un millar de ilustres huéspedes. Todos quisieron rendir pleitesía al monarca, adorado por el millón de súbditos que viven en el reinado, un lugar paradisíaco, bordeado de los picos nevados de las majestuosas montañas de Rwenzori, uno de los últimos refugios de los gorilas africanos.

Su Majestad tiene cuatro asistentes personales, 13 ministros, dos consejeros reales, guardia real, una decena de sirvientes, otros tantos chóferes, un palacio en Kampala, otro en Fort Portal, centenares de hectáreas repartidas por todo el reinado y un majestuoso parlamento en Fort Portal donde aún hoy es el encargado de abrir la sesión. El rey y su séquito recuerdan a aquel príncipe de Zamunda hollywoodiense al que dio vida Eddy Murphy.

Pese a carecer de poderes efectivos, el rey Oyo sí juega un papel fundamental en la resolución de conflictos en Tooro, donde aún hoy hace de mediador en las disputas entre súbditos, sobre todo en los conflictos de la tierra, el asunto más candente en África.
Este viernes, el rey Oyo asistió a su graduación de Educación Secundaria. El punto y final de sus años de formación en la Escuela Internacional de Kampala, un centro sólo para los más afortunados.
Ahora se le abrirán las puertas de Sandhurst, la exclusiva academia de los vástagos de la familia real inglesa, donde Guillermo y Enrique de Inglaterra recibieron su formación académica y militar.
Estudiará Ecoturismo, para hacer del oeste de Uganda (lugar de bosques lluviosos y sabana virgen apenas abiertos a los turistas) un destino mundialmente conocido.

"Mi madre quiere que vaya allí, y a mí no me importa, así estaré cerca del estadio del Arsenal", el equipo de fútbol que hace perder los nervios al rey Oyo, que no duda en su apuesta para el Mundial de Sudáfrica. "Estoy convencido de que ganará España". El fútbol es la pasión de este rey tranquilo y distraído, todavía con signos de una pubertad tardía en el rostro.

El inmenso patrimonio de la familia real es quizás una de las cuestiones que más ampollas levanta en un país donde la pobreza se ha convertido en una fábrica de inmigrantes en la región.

La dinastía de los Babita siente debilidad por los lujos y la buena vida, una ostentación que, pese a ser común entre reyes, en África duele mucho más.

El presupuesto de la casa real de Tooro es uno de los asuntos más oscuros de esta historia monárquica. "Básicamente nos autofinanciamos. Tenemos tierras y otras propiedades", zanja la matriarca, sin querer entrar en materia. Sin embargo, según las cuentas de muchos ugandeses, las propiedades de la familia se cuentan por decenas, siendo el tirano coronel libio Gadafi el principal donante de la casa real.

El presidente libio no es el único amigo controvertido de la familia real, que confiesa su admiración por el presidente de Uganda, Yoweri Museveni, una figura política con una turbia reputación internacional por sus ansias absolutistas, quien decidió restaurar los derechos de las cuatro casas reales de Uganda en los años 90.

Un buen sitio para mandar a Zapatero y a Pepiño que no tardarían en arruinar todo el tesoro real.

13 comentarios:

  1. Hola Tellagorri.
    Vergüenza es la palabra que define lo que he sentido al leer el post.
    Primero me parece una temeridad dejar los designios de un país en manos de un adolescente, y segundo me parece obscena la obstentación de riqueza en un país donde la gente se muere de hambre.

    Un abrazo.

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  2. Mejor no sólo mandar a Pepiño y Zapatero, sino traer aquí a esa familia, vástago incluido. Se ve que es gente ahorradora y buena gestora.

    Ved, ved como, a partir de un simple y yermo terruño, han logrado multiplicar su hacienda. Gente así necesitamos en España.

    (Apliquen un tono irónico a la lectura de este comentario, por favor)

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  3. ELENA

    Eso es lo que produce esta panda reyecitos negroides : verguenza ajena. Sus súbditos no tienen lo básico para sobrevivir y emigran a España.

    Otra guillotina hace falta en esos paisitos.

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  4. INISFREE

    Para gente ahorradora y buena gestora de su propio patrimonio ya tienes aquí a los campeones : Los Borbones.

    Y de venir que le pagaban los trajes un par de marqueses a ser una de las mayores fortunas europeas, mira cómo ha multiplicado "su terruño" el dolicocéfalo nuestro.

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  5. Como dices Tellagorri, una historia a los Eddie Murphy, estos reyezuelos africanos son de lo más curiosos que hay en el continente. Con éstos son con los que las potencias colonizadoras en el siglo XIX acordaban intercambios de aguardiente y otros objetos inútiles a cambio de sus tierras, ejemplos tenemos nosotros con el Rey de Bioko en nuestra colonia del Río Muni...

    Como dices, ZP y Pepiño darían buenas cuenta de esos cuartos, en un par de años no quedaba ni rastro.

    Un saludo.

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  6. Otro pelele mas, puesto por Gran Bretaña, para seguir controlando los recursos africanos, y seguir obteniendo beneficios, esperemos que no se convierta en otro Idi Amin Dada, y termine comiendose a sus subditos.Hasta que las grandes potencias, no saquen sus sucias manos de Africa, esta, seguira sumida en la miseria y el hambre, tendra gobernantes genocidas, y sus recursos, seran esquilmados, para beneficio de unos pocos.
    Uganda es el cuarto mayor receptor de ayuda británica.Ver el siguiente enlace:www.globalresearch.ca/index.php?context=va...
    Un saludo

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  7. Buen post Tellagorri, mientras lo leía me vino a la memoria la misma película de humor, la realidad supera a la ficción.

    Al cantante Bono -no te confundas con el nuevo aristócrata melenudo- del grupo musical U2, emigrantes que huían de la miseria de los reinos africanos corruptos, le han dicho que deje de "recaudar para esos reyezuelos".

    Me parece genial que hablen en voz alta, son los que de verdad les duelen sus países y sus gentes, en vez de estar siempre contra Occidente que aprovechen la estancia con nosotros para denunciar las corrupciones de sus países, la misma fórmula que la apliquen con el Islam.

    Me sumo a la propuesta, no estoy en contra de ayudar al Tercer Mundo, pensemos que somos la primera generación mundial que si nos lo proponemos terminaríamos con el hambre. Estoy harta que nos digan que "hay que mandar dinero aunque por el camino se pierda la mitad", me temo que esa parte "perdida" se van a manos de los "buenos/as samaritanos/as". Abrazos

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  8. CAROLVS

    Es una verguenza que en el siglo XXI siga habiendo estos explotadores del hambre de sus pueblos.

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  9. DON MANUEL

    Perfecta descripción de la situación. Peleles para ser explotados por los británicos, mientras ellos mismos saquean a sus pueblos. Y los eclavizan porque casi todas las tierras son de su propiedad particular.

    Siglo XII en plano siglo XXI.

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  10. PASION

    Sí, hasta se parece a Eddie Murphy.

    Buena aportación la que haces sobre las peticiones de los lugareños a los les mandan dinero a estos peleles inútiles.

    Podriamos quitar el hambre de esos mundos africanos y de otros con sólo que permitieran enseñarles a fabricar objetos, dándoles las posibilidades de tener electricidad y enseñantes.

    Yo no entrego un céntimo a ninguna ONG de ningún tipo. No me fío de ninguna. Y menos de los que luego reciben las ayudas, tal como bien dices.

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  11. Este jovenzuelo debe ser miembro del SAPE; lo digo por la elegancia de sus vestiduras.
    (ver mi post del 27 de mayo)

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  12. El Auán ba buluba balán bambú este debe ser hijo de Elvis que sigue viviendo en su Graceland que ahora, gracias a Paul Simon que hizo de profeta para la llegada de EL REY (su señor), está en África.
    A las pruebas el traje y el gorro que oculta el tupé.

    Y la labor evangelizadora de Paul Simon:

    http://www.youtube.com/watch?v=D2wUq-aTjpA

    Supongo que Isra, experto en el tema, lo corroborará.

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  13. Ya se sabe lo que son los fondos de ayuda al desrrollo:
    el dinero de los pobres de los países ricos que va a parar a los ricos de los países pobres.
    Genios de las finanzas, el que nos metió en la primeera guerra del Golfo por que cuando Irak invadió Kuwait en una noche perdió 4.500 millones de pestas de la época, FG con sus contratos con Slim, Mohammed VI, Irán, Bono (canta mucho pero no es cantante)...
    Los que no saben manejar las cuentas del pueblo español: ZP,Solbes, Salgado...
    A las ong's ni agua.

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