04 octubre 2009

AGOTES : unos marginados muy desconocidos

Queda constancia de su presencia en el pirenaico valle navarro de Roncal, aunque es Baztan el asentamiento más citado en la bibliografía referida al asunto, tanto en Elizondo, Irurita, Elbete y Amaiur (de forma ocasional), como sobre todo y principalmente en el barrio arizcundés de BOZATE.

Sobre el origen de estas gentes no está nada claro; diversos autores les otorgan las más variadas procedencias, a juzgar por los rasgos que advierten comunes en todos ellos.

Pío Baroja, por ejemplo, los describe así en su libro "Las horas solitarias": "Cara ancha y juanetuda, esqueleto fuerte, pómulos salientes, distancia bicigomática fuerte, grandes ojos azules o verdes claros, algo oblícuos. Cráneo branquicéfalo, tez blanca, pálida y pelo castaño o rubio; no se parece en nada al vasco clásico. Es un tipo centro-europeo o del norte. Hay viejos de Bozate que parecen retratos de Durero, de aire germánico. También hay otros de cara más alargada y morena que recuerdan al gitano".

Por el contrario Cenat Moncaut (Histoire del Peuples et des Etats Pyrenees, 1873) nos los pinta con la cabeza grande, cuerpo raquítico, piernas torsas, bocio, mirada indecisa y apagada, palabra vacilante. Este aspecto lo relaciona con el hambre y miseria, y la abundancia de agua de las altas montañas que ocasionaría el bocio.

Otro autor, Michel Francisque, los ve descendientes de los godos, con rostro blanco colorado, pelo rubio, ojos azules grisáceos, frente convexa, lóbulo hinchado y redondo, y también sin lóbulo en las orejas.
Esta última es una de las características más extendidas sobre sus personas para su reconocimiento como agote. Es curioso el dicho que atribuye esta carencia lobular al hecho de haber nacido de noche.

En cualquier caso, las investigaciones más recientes apuntan a que se trató de un grupo de delincuentes fugitivos en su origen de leproserías galas en las que se habrían refugiado para escapar de la justicia del país vecino, y es ésta una teoría más..

Estos agotes han estado discriminados por el resto del pueblo de Arizcun (Navarra) desde tiempo inmemorial (parece ser que se asentaron en Baztán en el s. XIII), llegando a estar fuertemente marginados incluso a nivel religioso, teniendo que sufrir todo tipo de injusticias aún en pleno siglo XX, a pesar de la leyes promulgadas en siglo anteriores por las Cortes navarras equiparando a este grupo con los demás y prohibiendo la denominación de agote como injuria.

El odio hacia estas gentes llegó al punto de que de padres a hijos se iban transmitiendo auténticas barbaridades sobre ellos, incluso sobre su anatomía: se decía que eran lujuriosos, como todos los leprosos, debido al color de su sangre; coléricos, orgullosos, susceptibles, arrogantes, astutos, que ocultaban entre ellos muchas cosas. Se les creyó cretinos, homosexuales, hechiceros, que se unían con las bestias, que olían mal, que su apestaba su aliento, que donde ponía el pie un agote no volvía a crecer la hierba...

Para ser distinguidos a distancia, se les obligaba a llevar en la espalda, en sitio bien visible, una señal en forma de PIE DE GATO DE COLOR ROJO, y tenían que hacer sonar una campanilla en su recorrido para avisar de su presencia.

Sin embargo, otros testimonios nos hablan de su muy buena condición.

Eran y son laboriosos e industriosos, pacíficos (ante tanta violencia no tomaban la iniciativa, sólo se defendían), serios y sedentarios. Tenían alma de músicos, eran los chistularis, tamborileros y bertsolaris de las tierras navarras, y destacaron como artesanos carpinteros y poetas.

Valga citar como ejemplo a Eleuterio Tadeo Amorena (nació en 1819 en Pamplona, aunque su padre era natural de la casa Amonea de Bozate), que creó en el año 1860 los actuales gigantes de la comparsa de Pamplona.





Bozate


Las características físico-morales que se les atribuían junto con su origen desconocido hicieron de ellos una raza maldita, y como tal fueron recluídos en sus barrios separados de los demás, no permitiéndoles vivir en el pueblo mismo ni mostrar el escudo blasonado en sus fachadas, y mucho menos casarse con los naturales, sino entre ellos mismos.

En la iglesia debían ocupar un lugar aparte, en el fondo, a la izquierda, debajo del coro, teniendo una pequeña puerta de acceso exclusiva para ellos.
En los actos religiosos, se les trataba con todo tipo de discriminación: no podían ascender a la parte delantera de la iglesia, no pasaban por la pila de agua bendita (solían tener una propia), el monaguillo descendía a recibir su ofrenda, que se apartaba de las demás.

Se les daba la paz con el portapaz puesto al revés y cubierto con un paño.
En algunos lugares se pretendía que ni se les diese la paz, sino dejársela en un banco donde ellos la pudiesen tomar. No podían ser ordenados sacerdotes.

En Baztan (comarca navarra fronteriza con Guipuzcoa y Francia)   no podían sentarse a la misma mesa que los nativos baztaneses, y en la iglesia de Arizkun una verja les separaba de ellos.

La experencia nos enseña que, cuando escasea la cultura y abunda la ignorancia, la inteligencia está muy despierta para inventar toda clase de cuentos y fábulas con que cargar las espaldas de los odiados.

Din Pío Baroja piensa que el origen Albigense tiene mucha base, debido a que sólo un fanatismo religioso puede ser tan violento. Además se les llama Chrestiaas, que significa "Cristianos Nuevos".

Es muy posible que fueran cátaros (albigenses) huídos de las degollinas de Montségur (Languedoc), ordenadas por el Papa Inocencio III y ejecutadas en 1213 por Simón de Montfort.

Mª Carmen Aguirre Delclaux pasó muchos años investigando e intentando aclarar el verdadero origen de este pueblo humillado, marginado por sus vecinos, pero no se atreve a decidirse por una, nos descubre de todos modos la historia de un pueblo desconocido por muchos, sin embargo ella, como todos, tiene una opinión y puesto que esos años de investigación e incluso convivencia con agotes le lleva a unas conclusiones.

Mª Carmen dice: Nos parece muy posible que en aquellos tiempos medievales se separase al enfermo del trato común con la gente a la menor sospecha. Eran unos años que la lepra y la peste, con sus mortandades masivas, causaban terror, hasta el punto de descubrirse de padres a hijos.
Es fácil que se confundiese la lepra con cualquier enfermedad cutánea, que podrían curarse con el tiempo, o que no las padeciesen sus descendientes.
Las leproserías, cargadas de enfermos, pronto vieron que esa gente no ofrecía cuidado y se les permitió vivir en barrios. Pero los pueblos era gente ignorante y muy temerosa, y no vieron con buenos ojos estos grupos que se iban acercando. Siempre con el temor de la lepra se les fue encerrando en un círculo moral y psicológico peor que el sanitario. Los tuvieron por leprosos, las leyes les sentenciaron como a tales, con diferencia de los leprosos recluidos, pero con un yugo más pesado.

Desde que tenemos conocimiento de la existencia de los agotes, sabemos que tenían los peores oficios que existían.

Debido a la ignorancia, o al temor a ser contagiados, les estaba prohibido criar ganado y sembrar la tierra, recordemos que la creencia popular era que si un agote pisaba la hierba descalzo no volvía a crecer, así pues sus trabajos eran carpinteros principalmente, debido a que la creencia popular de aquellos tiempos, era que por la madera no se transmitían las enfermedades.

Fueron los restauradores del Castillo de Pau y de la construcción de toda la carpintería del Castillo de Montaner. Pero también tenían otros oficios, como el de sepulturero, un trabajo nada agradable, los había también canteros, molineros, tejedores, pescadores, leñadores...

Si bien estos oficios los pudieron realizar conforme al paso del tiempo.

Hacían también tornillos de prensa, carrocerías, bancos, la parte mecánica de los molinos, elevaron campanas, construyeron naves e hicieron puentes.
También hacían las sogas para los ahorcamientos y la gente no agote no querían ser carpinteros por temor a ser confundidos con ellos.
No eran pues siervos, gozaban de la protección (relativa)  de la Iglesia y de una libertad en términos muy restringidos. Estaban libres de pechas, pero también de los derechos vecinales.

No podían pisar descalzos, bajo pena de abrasarles las plantas de los pies, pues se decía que donde un agote pisaba, la hierba no volvía a crecer, que si sostenían una manzana en la mano se pudría, ya que los agotes tenían la sangre mas caliente.

Estaban separados de todo trato con los vecinos, vivían exclusivamente en barrios apartados, tenían prohibido mezclarse con el resto, casarse con personas no agotes, en algunos sitios bajo pena de muerte.

Las fiestas las tenían que hacer en sus barrios si no querían verse humillados, les estaba prohibido participar en los bailes.

Les estaba prohibido llevar armas y vestir de gentil hombre.

No podían pescar en los ríos, criar ganado, cortar leña de los bosques comunales, beber en las fuentes públicas, ellos tenían sus propias fuentes, y, en un juicio, el testimonio de 7 hombres libres equivalía al de 30 agotes, e incluso hay una sentencia contra un vecino que le llamó a otro agote, al considerarse esto un insulto, y se le obligó a pagar 25 libras.

Esta gente sigue residiendo hoy en Navarra, en la localidad de Arizcun, en su barrio llamado Bozate, a pocos kilómetros de Pamplona, de San Sebastián y de Vitoria. Y toda su marginación de casi mil años proviene de ser descendientes de unos herejes huídos de la violencia religiosa de Roma.

Mi opinión es que ni leprosos ni cáscaras de nada en lo físico. Si se vieron obligados a casarse entre ellos durante siglos y siglos, es lógico que tengan alguna tara física como esa de los lóbulos de las orejas. Que tampoco me la creo porque he tratado con algunos agotes y son unos señores idénticos a Sarkozy, Fernández de la Vega o Benedictus XIII, detalle éste que no pueden alegar, por ejemplo, Obama, Chavez o Evo.

Javier Tellagorri





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8 comentarios:

  1. Tella, me has dejado alucinado con los Agotes. Algo idéntico al caso de los Chuetas mallorquines. Somos un pais increible. El trasfondo siempre es religioso. La mano negra de la iglesia católica, único poder fáctico permanente a lo largo de los siglos, sabia como actuar para mantener su omnimodo poder. Inventarse siempre algún enemigo con el que desviar y lavar las culpas propias. Los "sanbenitos" eran su especialidad.

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  2. Interesantísimo artículo, Javier, sobre un tema apenas conocido; yo descubrí la existencia de esta raza visitando NUEVO BAZTAN, un pequeño pueblo a unos 40 km. de Madrid en donde dicen que fue precisamente fundado por un grupo de agotes que habían huido de su pueblo navarro; desde entonces no había leido nada sobre este tema que me parece muy interesante.
    ¿No se ha seguido el rastro de los agotes mediante la aplicación de las modernas técnicas de investigación por el ADN?

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  3. La verdad que muy poco, salvo el nombre, conocía de estas personas. Como siempre muy interesante.

    Muy modestamente y lleno de carencias en todos los sentidos, he abierto un blog.

    Saludos.

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  4. Qué interesante.

    Yo nunca había oído nada de estos agotes.

    La teoría religiosa tiene más sentido que la de los leprosos. ¿Eran todos todos durante todo ese tiempo leprosos? Imposible.

    La historia (triste) de los cátaros y el reino de Occitania es muy interesante.

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  5. Tella, me has dejado boquiabierto con este relato.

    ¿Y que eran o son?, una raza, una tribu, una familia algo numerosa... aunque precisas algo importante, la endogamia puede producir "taras", ahí tienes a los borbones (los casos de ZP y sociatas varios no están todavía documentados para poder afirmarlo).

    Ahora, como muchos otros, algo estúpidos sí que eran, ¿cómo vas a casa de alguien que te humilla públicamente?, y sí, me refiero al hecho de tener ese "rinconcito" en las iglesias.

    Lo dicho, sorprendente post, y por cierto, cerca de mi pueblo (a 20 km) hay uno llamada Nuevo Baztán, construido por agotes navarros

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  6. CHARNEGUET

    Estoy totalmente de acuerdo que estas violencias sobre poblaciones y durante casi dos mil años, sólo las puede producir la gente más miserable del Mundo : los clérigos.


    PON, FERNANDO,FJ e ISRA

    Hoy estoy chungo con mucha fiebre y no puedo ni tengo humor para contestar a vuestros comentarios.

    Os ruego me disculpeis.

    Llevo 10 minutos metido en el ordenata y estoy agotado.

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  7. Hay algunas teorias, más o menos creibles, y anteriores a la patochada del "Codigo da Vinci", que hablaban de los Cataros como probables guardianes de la dinastia de Cristo o vinculados al culto del Grial. Vete a saber si estos asentamientos más o menos apartados por la todopoderosa Iglesia católica, tenian más secretos de los que parecían.

    Amigo Javier, como siempre me descubro ante todo lo que nos regalas y que con cada día que pasa nos sorprendes con algo nuevo y superando al anterior.

    Un saludo

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  8. JAVIER POL

    Me alegro de que te sean de utilidad algunas informaciones históricas que traigo aquí.

    Ya que hablas de CATAROS, hoy voy a tratar de hacer un pequeño resumen de lo que eran.

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