31 enero 2018

JUAN DE IBARRA

Bruselas, abril de 1607
El peso de la opinión de Ibarra en los asuntos de Flandes es considerable. Su trayectoria al servicio de la Corona acredita su consideración de experto en cuestiones de guerra y paz en Europa, el gran campo de batalla del poder hispano, donde cada año surgen nuevos enemigos antaño disimulados.

Natural de Éibar, hidalgo guipuzcoano, su currículum habla por él. De 1591 a 1593 estuvo de representante español en París, encargado de manejar los hilos de la influencia española en la Liga Católica de Francia para procurar que Isabel Clara Eugenia, la muy amada hija del gran rey Felipe, ocupase el trono de ese país. Algo que para España hubiera supuesto tocar el cielo con las manos, pero imposible de lograr. La ancestral Ley Sálica francesa impide a las mujeres ser coronadas.

Ibarra lleva consigo, además, seiscientos mil ducados para prevenir un motín general de las tropas de Flandes, que llevan varios meses sin cobrar. Es parte de un dinero que el rey ha arrancado a las Cortes a duras penas. Un sacrificio más de la depauperada Castilla en el que hasta Lerma ha debido participar con cien mil ducados de su propiedad.
De los motines tiene Ibarra suficiente experiencia, pues hubo de pechar con unos cuantos en Flandes. No hay nada peor para romper un ejército y cortar el hilo de las victorias. La situación económica se hace patente en la indisciplina de la tropa.
Los últimos motines han forzado a cambiar el suministro fondos a Flandes para que las pagas lleguen con prontitud y regularidad a los soldados.


(De la obra "LA SENDA DE LOS TERCIOS" de Lainez)



12 comentarios:

  1. Los Habsburgos utilizaron mucho a vascos como personas de confianza en sus gobernaciones.

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    1. DON KING
      Durante varios reinados y largos los Austrias utilizaron como personajes de confianza y en altísimos cargos a muchos vascos. Tanto en la Administración como al mando de barcos y tropas.

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  2. En 1589 se disolvió un Tercio por su rebelión al no recibir las pagas los soldados.

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  3. Los expertos militares han considerado a los Tercios españoles como equiparbles en calidad a las Legiones romanas. Y es sabido que la organización de la Legiones está hoy aún vigente en muchos ejércitos por ser tenida como la más perfecta unidad militar.

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    1. DON CABALLERO.
      Así es. Al parecer el creador de los mismos, El Gran Capitán, se basó en el modo organizativo de tales formaciones militares : las legiones. Y hoy en día los ejércitos occidentales siguen el mismo ejemplo en sus unidades de élite.

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  4. Fue el Emperador (Carlos V) el que regularizó en 1536 la creación de los Tercios. Unidades que aterrorizaban a todos los ejércitos europeos, y que incluso trataron de invadir Inglaterra llegando hasta Cornualles.

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  5. Cuando uno lee historia de España, al menos a mi, lo que mas me llama la atención es la cantidad de vascos que en ella aparecen. Ademas en puestos y cargos de importancia. Luego, eso sí, tienes que oir a los nacionalistas soltar parida tras parida, invención sobre invención.. lo que sea para romper la Historia real.

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    1. SEÑOR OGRO
      Ten en cuenta que en tierras vascas la hidalguía universal de todos los habitantes hacía que los segundones de los caseríos se buscaran la vida en la milicia o en los estudios. No olvides que el primer Instituto de Bachillerato de España se creó en Vergara.

      Al hilo de lo que comentas, la mayor parte de las actuales ciudades de América centro y sur fueron creadas por vascos. Y la presencia vasca en Filipinas, por ejemplo, no se reduce a la fundación de Manila ni al tornaviaje del galeón de Acapulco, y a los nombres de Elcano, Legazpi y Urdaneta, debe de añadirse el del franciscano Melchor de Oyanguren, que fue el primero que hizo un estudio del tagalo comparado con otras lenguas; el de Lorenzo Ugalde, general guipuzcoano que luchó en el siglo XVII contra la Armada holandesa; el de Iñiguez de Carquizano, envenenado por un portugués cuando la expedición de Loaysa que le costó la vida a éste y a Elcano y en la que iba el joven Urdaneta; el de Francisco de Echeveste, general de las galeras de Filipinas y embajador del rey de España en Tonkín; el de Tomás de Endaya, constructor naval en Cavite; el de Francisco Esteíbar, que combatió por mar y tierra a chinos e ingleses en Filipinas en el siglo XVII; el de fray Miguel de Aozarasa, mártir en el Japón.

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  6. Pues la noticia que yo tenía sobre el enviado a París por Felipe II en 1593, se refería a un Diego Ibarra, de los Ibarra de Eibar, como el que tu mencionas. Pero puedo estar equivocado o que tuviera más de un nombre.

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    1. DON TRECCE
      Quizá el equivocado sea el autor del post. En cualquier caso es el mismo personaje, un consejero de Felipe III.

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