12 octubre 2016
Cuanta cretinez produce la simpleza
No es preciso ser Kant para descubrir que existe en España un feminismo radical que en lo tocante a la violencia contra las mujeres está dispuesto a demostrar que los varones españoles, sólo por serlo, son maltratadores y asesinos en potencia, aunque para ello tenga que ocultar la realidad.
Es bien sabido que uno de los objetivos de todo sectarismo es ocultar la realidad. En el caso de la "violencia de género" queda claro:
1. ¿Usted ha visto alguna vez estadísticas que muestren si en España hay más o menos "violencia de género" que en los países nórdicos? No las ha visto usted porque no interesa que se vean, pues hay menos violencia en España.
2. ¿Existen denuncias femeninas falsas por delitos de violencia doméstica? Juezas y fiscalas ocupadas de estos asuntos sostienen en privado que las denuncias falsas abundan, pero las radicales lo niegan.
Lo niegan aquí y en Alemania. Según ha narrado Ramón Aguiló, profesor en Bremen, el pasado 22 de agosto un juzgado berlinés puso fin a un contencioso que ha durado cuatro años envuelto en polémica, el caso Lohfink. El proceso ha estado marcado por el axioma "políticamente correcto" según el cual "siempre hay que creer a las víctimas de violaciones".
Bajo tal premisa, el feminismo radical ha elevado a Gina-Lisa Lohfink al grado de heroína, pero la complejidad de la vida no cabe ni en un eslogan ni en cualquier axioma.
Los hechos judicialmente probados dicen que Gina-Lisa Lohfink subió con Sebastian C. y Pardis F. al piso de uno de ellos y tras los preliminares se pusieron a fornicar. Mientras uno de los varones estaba en la batalla, el otro le jaleaba como si aquello fuera un torneo deportivo. Y no se quedó ahí, sino que, echando mano del móvil, se dedicó a grabar aquellas escenas y las metió en la red. En una de esas escenas se ve y se oye a Gina-Lisa decir: "No, para". Pero ¿a quién se lo dijo? ¿A quien estaba yaciendo con ella o al que estaba grabando la escena? En el primer caso sería una violación, en el segundo no.
Al subir la grabación a la red sin permiso, los dos fornicadores cometieron un delito por el que fueron castigados, pero el asunto principal, el de la violación, es el que acaba de sustanciarse y condena a Gina-Lisa Lohfink a pagar 20.000 euros de multa por acusación falsa.
La sentencia deja claro que Lohfink se quedó tras la presunta violación un día entero en el apartamento en el cual, supuestamente, había sido violada, y en esas horas no ocurrió nada anormal. Es más, por la tarde se citó con el segundo acusado, con el que pasó toda la noche.
Pero ¿qué hay detrás de lo políticamente correcto?
Sartori, que lo aborrece, ha escrito que es solo "un conjunto de pensamientos muertos que ya no piensa, sino que repiten obsesivamente eslóganes y consignas. Por tanto, la corrección política ni configura un sistema ni busca la coherencia interna".
Javier Pamparacuatro (Revista Claves) ha ido un poco más allá: "La corrección política no es la ley del más débil; es ante todo la ley del silencio. Del peor de los silencios, el silencio interiorizado de aquel que se resigna a estar amordazado."
Joaquín Leguina
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Otro datos que se suelen ocultar es la tasa de asesinatos de hombres a manos de parejas, asesinatos entre parejas homosexuales, y sobre todo, estadisticas de violencia sobre menores, donde suelen ser mayoria las mujeres. Ello sin olvidar la tasa de suicidios, abrumadoramente masculinos, que nunca interesa ni visualizar, ni sobre todo, investigar.
ResponderEliminarEs como se dice en la entrada, la ley del silencio, con la complicidad de tantos y tantos.
SEÑOR OGRO
EliminarCierto lo de todos esos casos que se dan y que se silencian. Y hablaban en 1970 de que había que traer una PRENSA LIBRE. La tal "prensa libre" está bajo una censura mucho más poderosa que la que utilizaba el Invicto.
Entre feministas, animalistas, ecologistas y maricones los periodistas ya no se atreven a escribir de casi nada, salvo de si algún futbolista ha dicho alguna pendejada.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarDON JUAN CARLOS.
EliminarNo pasa nada por eliminar un comentario por las razones que sean.
Totalmente de acuerdo con vuestros comentarios. Nada que añadir. Que tengáis un buen día.
ResponderEliminarDON JUAN CARLOS.
EliminarMe alegro de que coincidas en lo que opinamos Señor Ogro y un servidor.
También yo estoy de acuerdo en que ahora existe una poderosa CENSURA en los medios y no proveniente del Gobierno como en épocas anteriores.
ResponderEliminarEs una censura mucho peor montada por gente que carece de racionalidad para respetar opiniones y gustos ajenos.
DON ARMANDO
EliminarEs que hoy en día el Sistema ha permitido montar colectivos que son todo menos demócratas y que jamás respectan opiniones contrarias a las suyas. E imponen en Prensa y TV que no se salga de lo que ellos califican como "lo correcto" cuando en sí no es otra cosa que CENSURA TOTALITARIA.
Otro excelente artículo sobre mis amigas feminazis, lo políticamente correcto y la doble moral totalitaria de la izquierda, poseedora de la verdad más absoluta.
ResponderEliminarDON JAVICHU
EliminarAsí es y los describes a la perfección : "la doble moral totalitaria de la izquierda" y los descerebrados de los animalistas, feminazis, ecologistas y etc.etc. de las cuadrillas de estúpidos,abobados, alcornoques, asnos, badulaques, beocios, besugos, bobos,cenutrios.
Dios nos libre de vernos metidos en una acusación de malos tratos o de violencia de género, porque empezará para nosotros un calvario en el que tienes que demostrar que eres inocente.
ResponderEliminarEso sin contar con el daño que hacen a quienes de verdad sufren esas situaciones, pues se ven metidas en el mismo saco de la sospecha de falsedad que han ido sembrando las sinvergüenzas que simulan una situación así con el único afán de venganza, cuando no de sacarse unos cuartos libres de polvo y paja.
DON TRECCE.
EliminarEfectivamente han desgraciado a montones o miles de jóvenes acusados de "malos tratos" por unas abogadas canallas que así aconsejan a las que se quieren divorciar, y a efectos de obtener más beneficios con la sentencia de separación.
Lo curioso y denigrante además es que el acusado de tales falsedades suele ser detenido y llevado ante una JUEZA a la que debe de convencer de que la acusación no es real. Y las pasan canutas e incluso algunos ingresan directamente en la carcel.
Esa miserable actuación de las mujeres y sus abogadas proviene de las leyes que hicieron aprobar aquellas AIDOS y LEIRE de mal recuerdo.
Conozco a varios chicos de unos cuarenta años que se han quedado sin vivienda, sin poder ver a sus hijos, pequeños siempre, y con la obligación de abonar una pensión a la ex y de seguir pagando la hipoteca que sacó para comprar la vivienda que ahora pertenece a la ex.
Por no mencionar la tasa de suicidios de hombres que, una vez divorciados, están obligados a pagar hipoteca del piso de la ex-mujer, mantenimiento de la prole, vicios varios y caprichos todos. Conozco a varios que malviven bajo un puente debido a las obligaciones contraídas con mujeres que han rehecho su vida y que, para no perder el lujo de la pensión, niegan a tirios y troyanos sus condiciones de vida actuales.
ResponderEliminarDON HEREP
EliminarAcabo de escribir en mi contestación al último comentario algo muy parecido a lo que dices, y me alegro de que seamos varios los que confirmamos estos hechos.
Con la iglesia hemos topado amigo Tellagorri. No menos poderosa que la tradicional.
ResponderEliminarDON CSC.
EliminarSí "Con la Iglesia hemos topado". Esas organizaciones de marimachos han impuesto la Ley del Silencio sobre asesinatos de hombres a manos de parejas, asesinatos entre parejas homosexuales, y sobre todo, estadisticas de violencia sobre menores, donde suelen ser mayoria las mujeres.