No se trata de Hu Jintao, de visita en Washington, sino de la escritora Amy Chua, más conocida como Madre Tigre, posiblemente la mujer más insultada, vilipendiada e incomprendida en la tierra del Tío Sam.
Las madres chinas aplican a sus hijos una estricta disciplina que incluye el castigo, la humillación y el insulto. Así explica Chua el éxito de los estudiantes asiáticos, virtuosos del violín y genios de las matemáticas. Y como inmejorable ejemplo, sus propias hijas: Sophia y Lulu.
Por eso, Chua defiende el método de la "maternidad extrema" en un libro que se ha convertido en algo así como una amenaza nacional.
De todo el país le llueven críticas por insultar y "torturar" a sus hijas.
Chua, profesora en la Universidad de Yale, no ha permitido nunca que queden con sus amigas después del colegio, ni las ha dejado ver la televisión o jugar con el ordenador. Ha elegido siempre sus actividades extraescolares, obligándolas a tocar violín o piano: "Los niños por sí mismos no quieren trabajar, y por eso es crucial decidir por ellos".
Las madres chinas, asegura, "no creen en los talentos naturales, ni en esa vaina de que cada niño es especial". De una cosa están convencidas: el "trabajo duro" es la llave del futuro. No permiten unas notas inferiores al sobresaliente.
"Si un niño no da la talla, la solución es siempre criticarlo, castigarlo y humillarlo". Cuando Lulu trajo a casa una B en Matemáticas, la tuvo en vela toda la noche haciendo 2.000 problemas. Cuando era incapaz de tocar perfectamente una canción, la llamó "perezosa, cobarde y patética": estuvo sentada horas al piano sin poder siquiera orinar.
Insultar a sus hijas o llamarlas "basura" es parte de la rutina de Chua, que admite que su férrea disciplina le ha provocado más de un enfrentamiento con su marido judío, Jed. "Pero al final me ha reconocido el mérito por el éxito académico y personal de mis hijas".
La mayor, Sophia, tocó el piano en el Carnegie Hall a los 16 años y estos días sale en su defensa.
También una periodista, en las páginas del New York Post, ha salido en su defensa, asegurando que "América necesita a la Madre Tigre". Sin embargo, en The New York Times, otro periodista recuerda la elevada tasa de suicidios entre las jóvenes asiáticas y se pregunta si no está relacionada con esa obsesión por la perfección y por la represión emocional de niños educados "al estilo oriental".
BIOGRAFIA DE CHUA
1962: Nace en Chicago, hija de inmigrantes chinos. 1984: Se licencia en Económicas en Harvard. 1987: Se licencia en Derecho. 2003: Escribe su primer libro, 'World on Fire', sobre los efectos de la globalización en los conflictos étnicos. 2011: Publica 'Battle Hymn of the Tiger Mother', sobre sus experiencias como madre estricta a la usanza china en EEUU. Desata una gran polémica a raíz de un artículo en 'The Wall Street Journal'.Tellagorri
amy chua educacion al estilo o
Tengo que reconocer que yo he hecho lo contrario pero no niego que tenga mucha parte de razón.
ResponderEliminarVaya con "la Chua", no estoy en nada de acuerdo con sus métodos. No creo que sea necesario insultar o humillar a un niño para educarlo. Soy partidaria de la disciplina, de la firmeza, de cumplir las reglas, de respetar horarios, pero todo dentro de la lógica y la razón. No pienso que tenga ninguna lógica mantener despierta toda la noche a una niña para tocar el piano.
ResponderEliminarCon la infancia no todo vale, pero esa máxima se la saltan a la torera en China. Así ganaron un montón de medallas en las Olimpiadas de Pekín, maltratando y castigando sin piedad a niñas pequeñas con cuerpos diminutos y delgados a fuerza de pasar hambre.
No, no me gusta esta tipeja ni sus métodos. A mí me regañaron e incluso me pegaron alguna vez y me castigaron, pero jamás recibí una humillación de mis propios padres. Y estoy muy orgullosa de la educación recibida.
Como dices en el post, no es de extrañar que exista tan elevado número de suicidios en China.
Un abrazo.
A ver... Ni tanto ni tan calvo.
ResponderEliminarNo soy partidaria de la laxitud que existe hoy día en la educación, pero lo que esta mujer cuenta me parece abominable. Disciplina sí, pero no crueldad.
Es inhumano tener a una niña sentada al piano durante horas, incluso sin orinar, hasta que toque perfectamente la pieza.
La perfección es admirable, digna de elogio y lo que tú quieras, pero tampoco debe convertirse en una obsesión, sobre todo si es a otro al que se obliga a alcanzarla.
Me pueden decir que si esa mujer no le hubiera exigido hasta tal extremo a sus hijas, éstas no habrían llegado a donde lo han hecho. De acuerdo, pero a mí me parecen métodos inhumanos, típicos precisamente de China, donde los atletas, por ejemplo, son entrenados brutalmente desde niños, sin miramientos, sin compasión, con dolor...
¿Merece la pena hacer sufrir así a una persona para llegar a tal perfección?
Pues con esto entraríamos en el eterno debate de si es cierto o no que el fin justifica los medios.
Saludos.
Estoy totalmente de acuerdo con EL ESPIRITU de lo que expresa la señora Chua; los detalles, algunos detalles, de sus normas educativas creo que son inaceptables, no ya para la sensibilidad de hoy, sino simplemente para la sensibilidad de unos padres; incluso creo que pueden hasta contraproducentes.Claro que entre dos extremos, la dureza de Chua y la permisividad y desmadre de ciertas teorías educativas que pasan por consentir a los niños todo y no corregirles nada, sin duda me inclino por la china.
ResponderEliminarPACO
ResponderEliminarLo que tú hayas hecho con tus hijos y que sea lo opuesto a esta Sargento de Ojos Rasgados, me parece estupendo. Su sistema que lo apliquen a los asiáticos.
DOÑA ELENA
ResponderEliminarLa CHUA está muy bien para sargento de Infantería del Ejército chino pero no para tratar a niños. Personalmente no necesito virtuosos en mi casa que toquen el violín o la mandurria como nadie en el Mundo.
A un niños hay que expresarle y tratarle, según mi criterio y el tuyo, con cariño y muchísimo afecto.
Esa forma de educar ya se ha usado en demasía antes en Europa, en los tiempos del diecinueve, cuando los aristócratas dejaban la educación y y trato a los niños en manos de institutrices rígidas o los metian en academias militares desde los nueve años. Y así salieron los probes educados : un ejemplo es el Carlos de Inglaterra, heredero de la Corona.
DOÑA ADELAIDA
ResponderEliminarEstoy plenamente de acuerdo contigo : es absolutamente INHUMANO educar así a los niños.
¿Que actualmente hay muchos niños que andan a su aire porque los padres no tienen tiempo de ocuparse de ellos? Pues, sí y es lamentable. Pero son dos extremos.
Lo importante es crear o tratar de formar PERSONAS con sentimientos, y no máquinas de ganar en competiciones de piano o de salto de muros al bambú.
F.J. EUGENIO
ResponderEliminarEs cierto que hoy en Occidente existe un abandono de la educación a los niños de forma directa y personal por causa de que los padres trabajan ambos y apenas tienen tiempo de verlos, con lo que se forman monstruitos que van a su aire por la vida, pero lo contrario es casi peor. Más propio de cadetes de academias militares.
Que esos métodos los apliquen en Asia y nos dejen en paz.
Ya lo habéis dicho todo, ni tanto ni tan calvo.
ResponderEliminarTal vez esta "madre" debería pensar si tal forma de educar ayuda a crear niños, o robots prestos a ser explotados por la nomenklatura.
Según esta señora los que no somos unos virtuosos nos tendríamos que suicidar por haber fracasado en nuestro proyecto vital.
ResponderEliminarMe parece muy exagerado.
Es cierto que los padres de hoy deberíamos ser más exigentes, pero de eso a no dejar que los chicos salgan con los amigos o se distraigan un rato con el ordenador o la play media un abismo.
Esta tía es tonta, me parece muy, pero que muy, bien la disciplina para con los niños y jóvenes con vistas a desmantelar la mediocrecracia que se está extendiendo por Occidente, en especial en Estepaís desde que gobierna el Caudillo de la Alianza de Civiloizaciones, pero no hay que olvidar que igual de importantes que las capacidades intelectuales son las relaciones personales, en especial las que se desarrollan durante la niñez. Un niño debe jugar con sus amigos, hacer deporte en grupo, relacionarse con todo, lo mismo que los jóvenes que también necesitan un poco de diversión, conocer chicas/os, enamorarse y porqué no, hacer también un poco el cafre...es la época, y además eso les ayudará en el futuro en sus trabajos y demás relaciones de todo tipo que no lo olvidemos son el eje vertebrador de la vida de una persona...
ResponderEliminarSaludos.
Javier mi querido amigo Manolo Alcantara suele decir que los buenos son buenos casi siempre y disfrutamos de ellos, que los malos tambien lo son muchas veces y nos protegemos de ellos pero, Dios mio, de los tontos libranos porque lo son las veinticuatro horas del dia y ademas imprevisibles y claro esos nos pillan.
ResponderEliminarEsta es de ese ultimo grupo y ni ha captado los pilares conceptuales de el que ahora es su pais EEUU, ni creo que conozca los de la sociedad de la proceden sus padres, es simplemente una simple en busca de destino.
Gran post. Un abrazo
A mi me educaron más o menos al estilo Chua, aunque algo más soft y ni toco el violín ni el piano. Las notas en la universidad siempre fueron "regulines" y si no llega a ser por mi afición a la aventura, no habría pasado de chupatintas.
ResponderEliminarConseguí mejores resultados con mis hijas mediante el sistema occidental.
PD: por cierto, que las niñas tienen cara de "guarrillas" jejeje, así que no sé yo si las ha controlado tanto como dice ella jajajaja
ResponderEliminarASPIRANTE
ResponderEliminarEsta tía está majara perdida y allá ella y sus hijas pero me parece una aberración tratar así a los niños.
CAROLVS
ResponderEliminarEsta tía, como dices, es una loca descolocada y que ni sabe que está en Occidente. No me extraña que la sociedad estaunidense se halla encabronada con ella.
A los niños hay que educarlos tal como los explicas y muy bien =
Un niño debe jugar con sus amigos, hacer deporte en grupo, relacionarse con todo, lo mismo que los jóvenes que también necesitan un poco de diversión, conocer chicas/os, enamorarse y porqué no, hacer también un poco el cafre...es la época, y además eso les ayudará en el futuro en sus trabajos y demás relaciones de todo tipo que no lo olvidemos son el eje vertebrador de la vida de una persona...
SEÑOR OGRO
ResponderEliminarLo que dice la damisela asiática que lo aplique en Asia y deje a los occidentales que tengan niños educados en libertad y con juegos. Lo más importante en un niño es que SE LO PASE BIEN.
CARPAGO
ResponderEliminarEstoy plenamente de acuerdo con Alcántara y apruebo que lo más peligroso de una sociedad es una cuadrilla de TONTOS con ínfulas.
Esta señora no se ha enterado, como dices, de en dónde habita.
Que se dedique a formar soldados para el Ejército Chino pero en Asía.
BWANA
ResponderEliminarLástima que no sepas tocar ni el piano ni el violín, pero aún estás a tiempo de aprender a manejar la mandurria y las castañuelas.
Como caigas en manos de la CHUA por un despiste tuyo, vas dado.
Soy partidaria de la disciplina, pero no del látigo. Eso no quiere decir que, en alguna ocasión, y siempre en un momento de rabia..o miedo por que se han podido hacer daño, no se te escape una "yoya". Los niños lo perciben de forma diferente a los golpes o insultos que se ejercen de forma sistemática. En el primer caso ven solo una reacción emocional, en el segundo se sienten humillados.
ResponderEliminarNo creo que la humillación forje caracteres fuertes, sino todo lo contrario. Ademas tienen derecho a disfrutar de la infancia, de la adolescencia, tienen derecho a equivocarse.
En fin, que todo para ella..
DOÑA CANDELA
ResponderEliminarPienso como tú : lo peor que se puede hacer a un niño es HUMILLARLO.
El Mundo está lleno a rebosar de resentidos por haber sido HUMILLADOS.
Esta tipa ha confundido el turrón marca Tecla de Alicante con el Obradoiro de Santiago de Compostela.