27 octubre 2009

Tropa o gente de guerra


Creo que alguien debería explicarle a la ministra de Defensa lo que es un soldado. Me refiero a uno de esos que desfilaron hace un par de semanas con casco y escopeta.

Es cierto que la ministra tiene alrededor, en cada foto, un montón de generales y uniformados varios que podrían explicárselo perfectamente. Pero tengo la impresión de que no se expresan bien; tal vez porque a medida que asciendes, te suben el sueldo y te acercas a la jubilación, uno suele volverse menos elocuente.

Con lo fácil que sería, por otra parte, abrirle a la titular del ramo el diccionario de la RAE por la palabra soldado, mostrarle que significa persona que sirve en la milicia, llevarla luego a la palabra milicia y hacerle leer algo que no admite equívocos: (Del latín militia. Femenino). 1. Arte de hacer la guerra y de disciplinar a los soldados para ella. 2. Servicio o profesión militar. 3. Tropa o gente de guerra. Es cierto que hay una cuarta acepción: coros de los ángeles, que lleva como ejemplo la milicia angélica. Pero cuidado. Que no se haga ilusiones la ministra. Ahí ya estamos hablando de otra cosa.

Lo que no dice el diccionario, desde luego, es tropa o gente de paz. En sentido recto, soldado remite a lo que debe: un fulano disponible para matar y que lo maten en guerras defensivas u ofensivas. Alguien que por patriotismo, obligación, dinero o lo que estime oportuno, está entrenado para escabechar a sus semejantes; procurando que palmen más fulanos del otro bando que del suyo.

El lado turbio del oficio –matarife, a fin de cuentas– se compensa con otros aspectos respetables: disciplina, disposición a soportar penalidades y miserias, y el sacrificio singular de exponerse al dolor, la mutilación y la muerte.

Hay gente a la que no le gusta ese paisaje, y desde un punto de vista tan digno como su opuesto defiende la desaparición de soldados y ejércitos, en favor de un mundo ideal –y me temo que imposible– donde la palabra soldado sea un anacronismo.

Otros, más realistas, admiten que la existencia de soldados profesionales, que sirven de modo voluntario y aceptan los riesgos del oficio, es necesaria en un mundo imperfecto y violento como el nuestro.

En todo caso, la palabra humanitario nada tiene que ver. Eso no corresponde a los soldados, sino a las organizaciones y oenegés adecuadas. A ellas corresponde poner tiritas, repartir agua embotellada y socorrer a los parias de la tierra.

Por el contrario, la misión básica de los soldados –considerando la convención de Ginebra y la conciencia de cada cual– es hacer todo el daño posible al enemigo.

Matarlo mucho y bien, inspirarle temor y vencerlo, disuadiéndolo de intentarlo de nuevo. Los soldados no fueron ideados para otra paz que la impuesta por sus bayonetas, ni para inspirar afecto, sino temor. Incluso en una misión de paz se trata de pacificar a hostias, si hace falta.

Llegado el caso, lo que se espera de ellos es eficacia letal; de un modo compatible, dentro de lo que cabe en su sangriento oficio, con la decencia y la piedad, cuando se pueda. Que maten más y mejor que nadie, de manera que los intereses de su patria natural o adoptiva, o de la paz ajena que defienden, sean respetados por otros.

Eso significa eficacia y ausencia de complejos. Por eso, llegados a tales extremos, las palabras soldado y misión humanitaria pueden ser no sólo incompatibles, sino confusas y hasta mortales.

Es lo que ocurre en España. Incapaces de conciliar de modo inteligente la necesidad de un ejército con la tendencia pacifista de la sociedad occidental actual, nuestros gobernantes –eso incluye al Pesoe como al Pepé– intentan lo imposible: unas fuerzas armadas desarmadas compuestas por soldados humanitarios, cuyo objetivo no es hacer la guerra sino la paz, y a los que se respeta más cuando se dejan matar que cuando matan.

Esa imbecilidad se desmorona cuando lo real se presenta en forma de mina, emboscada o combate, y las familias largan en el telediario, con toda razón, que nadie les habló de guerra, y que su chico no fue a que le volaran los huevos, sino a repartir leche condensada.

Es entonces cuando la ministra o ministro de guardia en esta charlotada bélico humanitaria del Bombero Torero, atrapados en su propia incongruencia, se adornan con media verónica ahuecando la voz y poniéndose estupendos mientras hablan de la deuda que España tiene con los difuntos y difuntas.

Haciendo, además, que éstos queden como pardillos, al negarles incluso la palabra guerra; que, por políticamente incorrecta que sea, es la única que explica una muerte en combate. Cuando en un ejército profesional, voluntario, las familias protestan y se dicen engañadas si sus chicos mueren, alguien no se ha explicado bien.

O no tenemos soldados, o los tenemos. Y si los tenemos, es para que palmen sin rechistar cuando les toque. No para que la ministra de Defensa –y sigo sin saber lo que defiende– venga a decirnos, con voz trémula y solemne, que acaban de matar a un cervatillo en el bosque de Bambi.

ARTURO PEREZ REVERTE



12 comentarios:

  1. Este Reverte siempre dando en el clavo, pero se olvida de una cosa en lo referente a ese mundo utópico que muchos propugnan, todas las ONGs y todos esos soñadores se ramifican como ejércitos donde unos dan las ordenes y los zánganos las ejecutan.

    Este no es el caso de España, donde es completamente al revés, el Zángano da las ordenes y la "Reina Carmé" manda al ejercito de Paz "españó" con los sargento Arensivia de turno a parlotear con los talibanes, diciéndoles "Cuidadín que semos peligrosos".

    Y es que algunas no acaban de enterarse que las armas del "Ejérsito españó" no las compran en el "Corte Inglé", o si vete tu a saber y por eso somos el único ejercito de Paz del mundo.

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  2. Estupendo comentario Javier. Más menos es tal como lo describes, lo que creen estos mindundis aldeanos sobre los ejércitos y sus misiones.

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  3. -!Atenta la compañía!...!Fimmm..eeeees!...!Olden del día!...!Punto primero!...!Sustitusión del Sesme pol escobas reglamentaria!...!Punto dó!...!Se cambiaran la munisiones pa adastál.las a las nueva nesesidade...!La balas, pol hueso de aseituna!...!Lo cascos, pol boinas manchega!...!Y las botas, pol albarcas o sapatillas y neilas saharianas pa los desfile!...¿Alguna pregunta?...
    -!Si, mi salgento!...
    -!A vés!...!Lo que!...
    -¿Y si nos ataca el enesmigo?...¿No bajamo también lo pantalones pa que nos den?...
    -!Vaya con el enterao!...!Apúntate do semana a la prevensión y aluego me limpia toas las letrina!..
    -¿Polque motivo, mi salgento?...
    -!Pol sugerensias visiosas, so capullo!...¿Alguna pregunta má?...
    !Vale!...!Rompan fila!...

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  4. Las noticias de nuestro ejército...

    "han llevado agua a un poblado"
    "han jugado al fútbol con los moritos"
    "han cuidado de sus pupitas"
    "les han dado cromitos de la liga de fútbol"

    en lugar de...

    "han volado los sesos a 40 terroristas"
    "han ocupado las calles de las vascongadas y Cataluña para garantizar el orden constitucional y suspender las autonomías" (que les va a tocar prontito en Cataluña...o no, por eso ha puesto al mando a una secesionista que odia a Espana y por tanto debe odiar a quien segun la constitucion es el garante ultimo de nuestra unidad. Las vascongadas parece que se han calmado un poquito al largar a los nazis, )

    Y cada militar que entre debe saber que su deber y obligación es matar por Espana y defenderla sabiendo que lleva implicito en el sueldo la posibilidad de que en acto de "su" SERVICIO muera por España.

    Ya lo dijo Karl Dönitz:

    "... nuestro único objetivo es hundir naves enemigas, donde estén y de cualquier tipo que sean. Y debemos hundirlas sin sufrir pérdidas importantes. Para hacer esto hace falta usar el cerebro, la astucia y la sorpresa, que siguen siendo los factores determinantes del arte de la guerra. Debemos atacar, atacar y otra vez atacar..."

    Le podían pasar la chuleta a la sonrisa equina

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  5. Cada vez me gusta más Reverte.
    Gracias Tella por traerlo de vez en cuando a tu blog.

    Creo que la Ministra no está capacitada para serlo de Defensa, en mi opinión debería ser un militar que sepa de lo que trata el asunto.

    ¡Ay qué "fartica" le hace un buen diccionario a "to er gobienno"!

    Un beso.

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  6. CHARNE e ISRA

    Sois muy buenos en vuestros comentarios.

    Isra define de forma sucinta la esencia de un soldado, y Charne, eres el cachondo nº 1 de Europa en ridiculizar a los idiotas.

    .¿Alguna pregunta?...
    -!Si, mi salgento!...
    -!A vés!...!Lo que!...
    -¿Y si nos ataca el enesmigo?...¿No bajamo también lo pantalones pa que nos den?...
    -!Vaya con el enterao!...!Apúntate do semana a la prevensión y aluego me limpia toas las letrina!..


    ELENA

    Arturo es el que mejor refleja la España de historieta y tebeo que han montado los siciatas para vivir como sultanes a cuenta de engañar a los más anlafabetos y pobres.

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  7. Totalmente de acuerdo al 100%, aun recuerdo las palabras que dedicó ayer la Ministra a Sabino, como si ella entendiese algo sobre la vida de este señor.
    No hay nada pero que hacerte el enterado de algo que desconoces.
    Saludos

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  8. TELLAGORRI, buenísimo Reverte dá donde más duele.

    Zp no es tonto es sociolisto y ha elegido de ministrilla a una socialista, por ahí todo normal, pero y ¿el pueblo español?, seguimos con las desigualdades y divididos para nuestras desgracias y no escarmentamos.

    Los militares no pueden contar la verdad al pueblo, pero sus familiares deberían hablar, sobretodo los padres de los soldados que han muerto en las guerras, es cierto que están "engañados" más por los medios de comunicación que por los militares que les enseñan las verdades de una guerra, nos cuentan tantas mentiras. Saludos

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  9. Gracias, PASION, por el comentario y yo creo que los familiares no pueden hablar por MIEDO a que sus soldados pierdan el empleo.
    Cariñosamente

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  10. Hola Tellagorri.

    He llegado hasta tu blog a través del de mi amiga Elena.
    Me interesa lo que escribes y me gusta cómo lo escribes.

    Me quedo a seguirte con mucho gusto.

    Un saludo muy cordial.

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  11. ADELAIDA ORTEGA RUIZ

    Bienvenida es te blo que es también tuyo y gracias por decir que te gusta.
    Un cariñoso saludo

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