Las izquierdas, esencialmente estatalistas, vienen oponiéndose de modo sistemático a cualquier propuesta liberal desde sus mismos orígenes. Salvo el comunismo, nada hay tan opuesto al liberalismo como el corporativismo fascista.
El liberalismo dista mucho de ser una doctrina económica, aunque también lo sea, y hasta ahora ése sea su aspecto más notorio para algunos que miran con orejeras. El liberalismo es una idea del mundo y de la sociedad, y tiende a ser un "modo de vida" constituido de modo espontáneo, del que se excluye la coerción externa sobre el individuo.
Los anarquistas, que eran una especie de seudoliberales del resentimiento y que, en general, no se caracterizaban por su alta cultura, se preocupaban a su modo por el desarrollo intelectual y moral de la sociedad. Solían ser puritanos ateos, prohibicionistas en lo tocante al alcohol, la prostitución o el juego, aunque la historia registra muchos casos de financiación de grupos anarquistas mediante timbas clandestinas y riñas de gallos.
El liberalismo es, o debe ser, un humanismo en sentido estricto, es decir, una doctrina que, al tiempo que prioriza los derechos naturales, preserva, desarrolla y, en no pocos casos, restaura valores.
Es por ello que un liberal es, lógicamente, conservador. Desde luego, no en la acepción grosera de la palabra, cuando se la emplea para designar a quien quiere perpetuar un estado de cosas que, por lo general, tiene poco que ver con la libertad individual en ninguno de sus aspectos, ni en el económico ni en el personal, lo cual sería contrario a la esencia del liberalismo.
Eso no es consevadurismo, sino reacción.
Y reaccionarios los hay de todo pelaje, desde mal llamados conservadores hasta comunistas. A decir verdad, hace mucho que la reacción ha abandonado el territorio de los nostálgicos del Antiguo Régimen (Franquismos y similares) y ha sentado campamento en la izquierda. Hay que dar una batalla constante contra izquierdistas reaccionarios y atrasistas de toda laya, desde antisemitas hasta islamistas, desde indigenistas hasta verdes, desde socialdemócratas hasta mentirosos en general, que se ocupan tanto del clima como de las nucleares, de la enseñanza como de la sanidad: véase, a este último propósito, a los señores Gore, Marchesi o Pajín.
De la despenalización del aborto, hemos pasado a la invitación al aborto y a la propuesta de las instancias más extremas, como la posibilidad de que se practique en menores sin control paterno. Del testamento vital, a la eutanasia abierta. Incluso del derecho a la educación bilingüe en comunidades con lengua cooficial a la imposición de una lengua única en desmedro de la común.
Los liberales deben ser, y son de hecho, conservadores: en interés de la libertad, porque es necesario preservar el patrimonio de la civilización en tanto que experiencia de desbordes y desastres sociales. Los liberales creemos que lo más saludable en una sociedad es que los poderes del estado no solamente estén separados, equilibrados e independientes sino que deben permanecer alertas para que ninguno de ellos trate de imponerse sobre otro.
divagaciones liberales
La libertad no interesa, que las masas tengan esa libertad haría muy difícil dominarlas por parte de los poderes del Estado. Por ello, para los socialistas lo social no debe ser producto de las relaciones voluntarias entre individuos libres sino producto de la coacción estatista.
ResponderEliminarNo obstante, yo particularmente, opino que el Estado debe garantizar Educación, Sanidad y Justicia a todos los ciudadanos.
La primera vez que he escuchado el nombre de Felix Sardá y Salvany, fue la semana pasada en la presentación de un libro del profesor Rodriguez Braun y Juan Ramon Rallo "El Liberalismo no es Pecado", economía en cinco lecciones, por cierto muy interesante, ameno, y didáctico.
ResponderEliminarUn saludo
Aunque uno es de Ciencias, algo he leido a nuestros Padres de la Escuela de Salamanca, Suarez y Mariana, considerados justamente como auténticos precursores de un sano liberalismo político e incluso económico de la vida social en una época en la que el absolutismo era la forma de gobierno imperante en la monarquia española y no menos también en las europeas.
ResponderEliminarCreo que hay que descubrirse ante la clarividencia de estos pensadores españoles cuya influencia ha trascendido siglos después.
Para liberales los de Las Cortes de Cadiz entre 1810 y 1814.un saludo.
ResponderEliminarAquí solo hablan de neo-liberalismo como un insulto al peseterismo. Que solo busca sojuzgar económicamente al débil. Es todo lo contrario, el liberalismo es político. Siendo político tiene su lado económico y este es importante, sin economía nada es posible. Ahora bien, abarca todo aspecto que enfrenta al ser humano con el poder sea este el que sea. Veamos por ejemplo la magnifica ilustración que pones al final. Los del disfraz de religioso poniendo la venda en los ojos y sermoneando y detrás los soldados listos para la segunda descarga. Entre los que van a ser ajusticiados estan señores bien vestidos, otros no tan bien y a la izquierda pueblo llano. En una entrevista al poco de ser nombrado a Rouco Varela le preguntaron si los enemigos del hombre seguían siendo el demonio y la carne y dijo no, ahora el enemigo es el liberalismo. No dijo el comunismo o el ateísmo etc., dijo el liberalismo. Todos los que están en contra de la libertad, están en contra del liberalismo, por eso los liberales en Europa estamos condenados al fracaso y en ocasiones al exterminio y siempre al desprecio de esta gentuza. Y que conste que incluyo a todos, acordaros de Rajoy en Valencia echando a los liberales del pp. Si tú Rajoy, no eres liberal ¿Que eres?. El Centrismo no existe, por lo tanto tú eres conservador en la mala acepción del termino, es decir perpetuador de excepciones y privilegios. O terminamos con ellos y vamos a una Europa liberal o terminamos sin libertad en Europa y en manos de mafiosos y usureros.
ResponderEliminarSaluditos.
ELENA
ResponderEliminarNo, para los socialistas y demás totalitarios no deben existir las libertades. Pero es que lo que se trata es que el Gobierno esté en manos de personas liberales que sepan respetar los derechos individuales.
DON MANUEL
ResponderEliminarSí, se ha publicado un libro anti-libro del cura aquel que cita y que era laa expresión que tenían de la sociedad los aristócratas y frailes. Sociedad de castas y en donde los únicos privilegios exclusivos correspondían a ellos.
Contra todo eso vino el liberalismo : la igualdad de todos los ciudadadanos ante la Ley.
El Vaticano aún hoy día sigue, como buena teocracia que es, considerando pecado el que cada uno piense por su cuenta.
F.J. EUGENIO
ResponderEliminarSí, todo esto comenzó con valientes como Fray Luís de León y todos los demás que ya en el XIX lo plasmaron en ideas de igualdad de derechos de las personas y del sufragio universal.
Se impusieron esas ideas, las liberales, en todo el Mundo occidental civilizado menos en España en donde los absolutistas, ayudados de frailes, fusilaron a quienes portaban tales ideas. Como se ve en el grabado de abajo.
DON AGUSTIN
ResponderEliminarLos miembros de las CORTES DE CADIZ pretendieron montar una sociedad basada en ideas liberales, lo contrario del absolutismo reinante hasta entonces y con una sociedad en la que derechos unicamente tenían los aristócratas y el clero.
DON ZORRETE
ResponderEliminarMagnífico comentario que lo suscribo completo. Veo que estamos en la misma onda, la que rige a los países más civilizados como Francia, Gran Bretaña y Usa.
Lo de Rouco es lo normal. El Vaticano ha odiado y odia más a los liberales ( los que piensan por sí mismos) que a los islamistas. Además, para contrarrestar las influencias liberales, que en España son mínimas, existen sectas católicas como "Neocatecúmenos Kikos", "Opus", etc. que están bajo el patrocinio directo de Rouco y demás curiales del Vaticano.
Paso a imprimir el post y meterlo en la cartera, es que un amigo homosexual de mi mujer decía que yo no soy liberal, él sí porque es sociata... creo que de tanto usar el culo ha pensado que es la cabeza y piensa con él.
ResponderEliminarUn estado reducido a la mínima expresión perfectamente puede ofrecer de forma impecable, educación, sanidad, justicia, defensa y todo lo que mantenga la cohesión de un estado (me niego a llamar a esto estado del bienestar).
Sobran autonomías, 2 millones de funcionarios y legislación que vulnera el ámbito privado de los individuos, por no hablar de que sobran impuestos (no te digo na de los palos que me han metido en la paga y las dos últimas nóminas porque están caninos por despilfarrar el dinero en aeropuertos fantasmas o AVES que no para en la mitad de las estaciones)
¿tan difícil es que no me regalen nada pero que no me quiten tanto?
La concepcion de liberal es muy cambiante. No solo en lugar, sino hasta en epoca. Un liberal de la revolucion francesa sería luego un burgues conservador. Un liberal de los USA no tiene que ver con un liberal español. Y dentro de España, las variantes de liberal son infinitas, segun lo que entienda cada uno debe ser el ambito de poder del Leviatan famoso.
ResponderEliminarMe quedo con esto del "El liberalismo es una idea del mundo y de la sociedad, y tiende a ser un "modo de vida" constituido de modo espontáneo, del que se excluye la coerción externa sobre el individuo." Claro, aquí seguro que podríamos discutir sobre hasta donde llega esa espontaneidad, o hasta donde llega la coerción externa, porque sin coercion, llegamos al anarkismo (teorico).
Es un debate interensante, en lo practico, Rajoy no se tilda de liberal porque teme que la gente española, tan dada a tirar de papa estado, le tome por una liberal autentica como Esperanza Aguirre. El centrismo no es mas que el disfraz del miedo, la apuesta por el indeterminismo.
DON ISRA
ResponderEliminarEstoy de acuerdo : Un Estado reducido a la mínima expresión, garantizadora de Orden y Seguridad, Sanidad y Educación, es suficiente por completo. Todo lo demás nos sobra. Sólo sirve para colocar a parados sectarios inútiles.
Bueno, ya que te roban en la nómina, haz como los cubanos : no des un palo al agua. Los cubanos no cobran apenas pero tampoco trabajan.
SEÑOR OGRO
ResponderEliminarLo que comentas es muy interesante y muy debatible, aunque tengo mis propias convicciones que no coinciden con todo lo que dices.
Un liberal francés o estadounidense tienen muy similares ideas y formas de ver la sociedad, en tanto que en España a los liberales se les considera poco menos que revolucionarios.
Lo de cambiante va en función de la fuerza en contra que se efectue contra los liberales.
Los que hicieron la Revolución francesa venian explicando sus ideas desde decenios antes, eran burgueses intelectuales. Y al ver la cerrazón de los privilegiados (aristócratas, terratenientes y clero) hubieron de mover a las masas analfabetas para derrocar todo aquello. Pero los sans culotte no eran más que simples hambrientos carentes de ideas y ansiosos de eliminar el sistema.
Exactamente lo mismo sucedió en España tras las Cortes de Cadiz, con los cabecillas ahorcados y fusilados por los reaccionarios. Pero sus ideales eran idénticos a los de los liberales americanos o franceses o británicos.
En la Segunda República, traída por liberales como Ortega y Gasset, Marañón, Unamuno, etc. fueron sobrepasados por los revoluciones marxistas y también eliminados o puestos en fuga.
Yo recuerdo en mi juventud escolar oir permanentemente a los curas del colegio (época franquista) que lo más peligroso para la religión eran los liberales. Lo cual es más falso que una moneda de barro.
Si en algo se caracterizan los liberales franceses y españoles auténticos es en el respeto a todas las confesiones religiosas. Pero eso no les gusta a los del Vaticano ya que gustan de gentes que hagan Cruzadas por sus privilegios.
Los liberales ingleses crearon la Cosntitución Usa y con ella siguen. Lo que no admiten es la mentira y la rapiña, ni las coacciones a los derechos individuales.
Hoy en España son liberales gentes como Espe y cuatro más. Entre ellos Don Zorrete, Don Isra, Don Alvaro de Bazán o señor de Valero y yo.
Cordialmente
Yo daría un pasito más: La Sanidad y la Educación, deberían liberalizarse. En el sentido de que cada uno pueda elegir su propia aseguradora o modelo educativo (asegurando solo unos mínimos), el Estado -en mi caso- debe pagar mi sueldo, pero no decirme qué debo hacer con él; salvo impuestos esenciales no veo porqué debo pagar ni un modelo sanitario ni educativo estatal.
ResponderEliminarUn ejemplo muy claro de liberalismo está en la actual polémica sobre la apertura o no de pequeños comercios las 24 horas del día y lo escuché en es.Radio: Si yo quiero comprar algo a las 3 de la madrugada y existe alguien que desea vendérmelo ¿Quién puñetas es el Estado para meterse en este asunto? La libre competencia siempre es un estímulo para la economía y un problema para vagos y mediocres que no se sienten capaces de sobrevivir sin la ayuda de papá Estado.
PD: La religión pertenece al terreno de lo privado y no creo que tenga nada que ver con el liberalismo como forma de ver la vida. Las normas de cada confesión son voluntarias y no deben afectar a ajenos a esa determinada confesión.
ResponderEliminarAunque siempre defenderé con uñas y dientes la tradición cultural judeo cristiana en España, porque está ahí historicamente y el derecho a la vida, no solo por motivos religiosos sino éticos y científicos.
Esto último es a título muy personal, tampoco pretendo que todos piensen como yo.
DOÑA CANDELA
ResponderEliminarRespecto a que se privaticen la Sanidad y la Educación es asunto que depende del nivel económico medio de un país, y aquí y ahora no creo posible ponerlo en práctica por dos razones : los sueldos no dan para pagarse seguros privados de sanidad y la escolarización de niños sería un caos con la mentalidad existente en este país de labriegos decimonónicos con ordenata e Ipod.
Lo del comercio está clarísimo : quien quiera vender productos a las tres de la mañana o los festivos no debiera de haber Estado que se lo impidiera. La LIBRE COMPETENCIA es la clave de una buena economía.
Respecto a las creencias religiosas estoy en todo contigo : es asunto de la privacidad de cada quien y debe de respetarse como un bien absoluto, al igual que a la libertad de pensamiento y de expresión.
Pero no es eso lo que las jerarquias de las diversas religiones quieren. Buscan el proteccionismo estatal, y muchos energúmenos que ni saben lo que es la privacidad del individuo.
Naturalmente que ante las ofensivas invasoras de ideas islamistas o de lo que fuere, los liberarles defenderemos las tradiciones de dos mil años en cultura judeo-cristiana, tal como en su día lo hacían los que venían de Arkansas o de Dakota del Norte para impedir que Europa fuera nazi o comunista.
Me ha gustado mucho tu post de hoy, aunque leo y comento a toda prisa porque tengo que salir...a menudo se confunde con ser anarcoide o con un todo vale donde entran toda clase de asuntos que no comparto y me veo luchando como un quijote contra gigantes para hacérselo comprender a ciertos antagonistas recalcitrantes.
ResponderEliminarTú lo has explicado muy bien, y personalmente no encuentro mayor problema en ser liberal en unas cosas y conservadora en otras.
Saludos precipitados
DOÑA MARIBELUCA
ResponderEliminarGracias y me alegro de que coincidas.
La verdad es que en muchísimas cuestiones las diferencias entre liberales y conservadores son muy pequeñas y son referentes a temas religiosos, en los que los primeros lo consideran una cuestión de PRIVACIDAD personal, y los segundos un asunto a defender a capa y espada.