Según se desprende de un abundante material periodístico partidista,o sea sociata, y expandido por todos los colegios como básico, la España inmediatamente anterior a la Transición seguía siendo un universo cerrado, atrasado, pacato, retrógrado y adocenado; un páramo cultural e intelectual completamente aislado de las corrientes del momento, tal como, según el difundido cliché, lo fue durante todo el franquismo.
Sin embargo, en los 60 y 70 hubo una eclosión de actividades e iniciativas, siempre al margen y casi siempre en contra del régimen y del Poder, de la que ya no volveríamos a ser testigos nunca. No ha habido más aquella capacidad de creación artística y literaria de los años 60 y 70 desde que Gonzalez accedió al Poder.
Y el caso es que ahora toda aquella efervescencia creativa que precedió a la Transición está siendo borrada de los archivos para ser sustituida por el gris uniforme que Zapatero, gran repetidor de lugares comunes y de insustancialidades que nada significan.
Los montajes tipo "antes-y-después" difícilmente son creíbles, y éste aún menos que otros. Una metamorfosis tan rápida puede hacerse, y sólo hasta cierto punto, en la peluquería o en el quirófano, pero un cambio de régimen político no es capaz de trastocar en poco tiempo los modos de pensar y vivir de millones de individuos.
Si antes de la Transición no había en España nada que valiera la pena como dicen los sociatas, si el país dormitaba en el anacronismo y estaba empantanado en el atraso, es impensable que saliera de la nebulosa gris en un abrir y cerrar de ojos. Y no ocurrió esa anomalía. Lo sustancial del cambio que algunos atribuyen al advenimiento de la democracia ya se había producido antes.
Si la Transición tuvo lugar fue porque esa transformación de la sociedad estaba hecha y la hizo posible... e inevitable. La Transición.
Que la sociedad española evolucionó bajo el franquismo era un dato que no solía discutirse. Estudios sociológicos como los realizados por Amando de Miguel pusieron de manifiesto que habían surgido entre los españoles unas ansias de libertad que el corsé de la dictadura se mostraba incapaz de sujetar. Ese cambio tuvo lugar al calor de la mayor prosperidad económica, de la aparición de una amplia clase media, del acceso masivo a la enseñanza y en particular a la universidad, que se constituiría en uno de los centros de contestación más activos.
España no se acostó un día anticuada, ignorante y emboinada y se levantó al siguiente moderna y puestísima. Ni la democracia, ni Felipe González ni Tierno Galván hicieron milagros. Es más, contra lo que dice la leyenda en boga el desembarco del PSOE en el poder no supuso un renacimiento vital, cultural e intelectual.
Nos acercaremos más a la realidad desde otra hipótesis: que en los 80, que vieron el triunfo socialista, se agotaron las energías creativas de los años anteriores. No fue el principio, sino el final.
Las recetas o clichés sobre la Guerra Civil, el franquismo o la República se la han tragado con la facilidad con que se engulle una papilla sin grumos todos esos jovenzuelos semi-analfbetos que tanto hablan, y metabolizado de tal forma que ya de forma natural sólo ven con anteojeras todo el pasado.
Nos encontramos así con que al mismo tiempo que se revaloriza, desde las tribunas políticas y los medios, la época de la II República, haciéndola pasar por compendio de todas las virtudes, epítome del progreso y la modernidad y criadero de las vanguardias literarias y artísticas, se difunde una visión denigratoria de los años que, en cualquier perspectiva razonable, han de considerarse los fundacionales de la democracia española.
Basta con comparar la calidad de los escritores que en los 60 y 70 se dedicaban a la Literatura con la de los actuales.
Aquellos debieran de ser todos premios Nobel si se compararan con los actuales "intelectuales". Me estoy acordando por ejemplo de Cela, Pemán, Sender, Miguel Delibes, Umbral, Vazquez Figueroa, Vazquez Montalban, José Luis Olaizola, Salisachs, Vallejo Nájera, Carlos Rojas, Eslava Galán, Dámaso Alonso, Dionisio Ridruejo, Javier Reverte, Aleixandre, José de Arteche, Jaime Campmany y su trilogia de "El Pecado de los dioses", Jorge Semprun, y mil más.
Y para colmo de diferencia, nos ponen como ejemplos de "creatividad" socialista a Ramoncín, Lucia Echeberria, Maruja Torres, Almudena Grandes... Hoy malviven todos ellos en audiencia aunque se forran de subvenciones estatales.
Tellagorri
intelectualidad era sociata
Se te ha olvidado el ilustre Willy Toledo, el antecesor de Tomás Gómez en su célebre "fostiatus" en cuanto a que, Willy, se llevó unas cuantas reales yoyas, nada metafísicas.
ResponderEliminarPues sí, no se puede comprender como de un mundo tan sórdido pudieron salir esos excelentes escritores que mencionas. Es más, parece imposible que del franquismo saliese nadie normal y, como prueba, los próceres socialistas, todos ellos familia de ilustres "ex"...
Hay que reconocer que en maniupulación los sociatas son unos maestros.
ResponderEliminarDOÑA CANDELA
ResponderEliminarSi te digo la verdad sucede que me repele recordar nombres de titiriteros tildados de "intelectuales". Me repatea mucho más esa confusión que todas las demás ajilipollúas que hayan hecho esta cuadrilla.
Hay que tener morro para negar valores creativos a quienes en esa época franquista salieron, en principio para atacar al Régimen, y que han desaparecido desde que los sociatas llegaron.
Y para más chufla, tal como comentas todos esos políticos sociatas son hijos de jerarcas falangistas.
DON MAMUNA
ResponderEliminarEs que esto ya no es manipulación, es hacernos a la fuerza creyentes de Mahoma.
Que tú sepas que al lado de tu pueblo hay un monte alto y grande y pretendan enseñarte que antes de Felipe Gonzalez allí no había ni monte ni nada.
Ya lo dijo Suarez, se trata de hacer normal en la ley, lo que ya es normal en la calle. Dan ganas de con urgencia publicar algunas fotos mías de aquella época, a ver si eramos tan pacatos y bobilis (menudas pintas, ni en Londres). Serian ellos que eran todos hijos de franquistas y por eso no se enteraron. Dices que el movimiento creativo ya estaba agotado en los 80, eso no es del todo cierto. En Madrid lo que paso por ejemplo con la movida (super creativa y genuinamente de barrio), la expropiaron y pusieron a sus piji-rojos de cartón, eso si corto la creatividad, eso y el sectarismo que ya campaba a sus anchas. Esto también tendremos que contarlo del derecho. La de actores y escritores a los que se pasaron por la piedra, les quitaron el trabajo, los premios, el pan y la sal.
ResponderEliminarSaluditos.
Los nombres que has citado bastan para cerrarle la boca a toda la marabunta ignorante sociata que allá por 2004 pensaban que habían traio el progreso y la cultura de nuevo a Estepaís sumido en una larga travesía del desierto bajo el Aznarismo, lo mismo que los felipistas (y los actuales) pensaban del Franquismo...
ResponderEliminar...en cambio, como bien dices, el socialismo fue sólo (y es sólo) la elevación a los altares de la denigración de la cultura, del arte y de la historia, algo parecido a la fase final y pervertida de aquel antaño glorioso Imperio Romano...hoy la cultura vive su peor momento, siempre que por cultura excluyamos a los Almodovar, Bardemes, Ramoncines, Victor Manueles y otros titiricejas que se han forrado en estos años, siendo su máxima expresión la miembra Sinde
Una vez escuché como hasta la llegada de los sociatas, la educación era un mecanismo por el que las personas de origen humilde tenían la opción de labrarse un futuro y de ascender socialmente.
ResponderEliminarAhora, la educación es un erial, mucho más adoctrinador que antaño (lo del espíritu nacional de franco era una coña marinera al lado de lo que vemos en esta presunta democracia), y cuya principal característica es el igualitarismo por debajo: es decir, todos a lo mínimo, todos con títulos que no valen PARA NADA.
Y junto al tema educativo y de meritocracia, yo situaría un tema moral. Porque creo que la moral y la responsabilidad suelen ir de la mano, y antes todos querian ser medicos, abogados, pilotos, y ahora todos quieren ser actores, salir por la tv o vivir de la mamandurria o dando patadas a una pelota.
El socialismo siempre generando eriales de todo tipo: educativos, economicos, morales... Y no aprendemos, y la gente sin ver a su propia historia o a la de paises no tan lejanos. Pais.
DON ZORRETE
ResponderEliminarEn mi concepto de valores culturales no entran ni el DESMADRE en sustitución de sociedad recatada, ni lo que se llamó MOVIDA o aluvión de conciertos de muchos decibelios de ruído mientras se fumaban porros y otras sustancias.
Quisiera saber qué obras literarias, musicales, de escultura o de pintura se produjeron en esa época.
Respecto al Arte escénico ninguno de los actores salidos de aquello es comparable al más secundario de los producidos por el propio Franquismo. Me estoy acordando de paco Martinez Soria, Fernando Fernán Gomez, Fernando Rey, Alfredo Landa, etc. etc. y con directores de Cine como Luis Buñuel, Juan Antonio Bardem, Vicente Aranda, Luis García Berlanga, Carlos Saura, Jesús Franco, etc. etc.
DON CAROLVS
ResponderEliminarEsta Era de los socialistas no ha producido ex novo ni literatos, ni escultores ni pintores, ni actores y directores de Cine de la calidad y categoría que había, a pesar de la CENSURA, en el Franquismo.
Prefiero cualquier peli de Gracita Morales o de Alfredo Landa que todas juntas las de Almodovar.
SEÑOR OGRO
ResponderEliminarEstoy completamente de acuerdo con este párrafo tuyo que dice =
antes todos querian ser medicos, abogados, pilotos, y ahora todos quieren ser actores, salir por la tv o vivir de la mamandurria o dando patadas a una pelota.
El socialismo siempre generando eriales de todo tipo: educativos, economicos, morales...
No hay más que leer un libro de un intelectualillo de nuestro tiempo y luego leer a Delibes, Umbral o Cela, no hay color.
ResponderEliminarGuardo un libro viejísimo de Lengua y Literatura de Bachillerato en el cual estudiaba mi hermano el mayor, aún me sirve, lo ojeo y me ayuda con los estudios de mis hijos, y no creo que tras la última hoja hubiera que añadir nada más, ni un autor más. No me imagino detrás de Vargas Llosa a Almudena Grandes o a Carlos Ruiz Zafón, y hablo con conocimiento de causa pues los he leído a los tres.
Y lo peor de todo es que los "intelectuales" actuales carecen de la más mínima humildad, se creen en el Olimpo por haber ganado un premio literario y son incapaces de reconocer sus limitaciones más que evidentes con la pluma.
Pero no tengo, a mi parecer, el defecto de rechazar el trabajo de un actor, cantante o escritor por su ideología o por sus declaraciones, no me permito el lujo de perderme sus obras amparándome bajo el manto de mis prejuicios.
Leo a Juan José Millás, escucho a Sabina y Bardem me parece un actorazo.
Sin embargo no estuve yo muy por la movida, de los años años 80 me gustaba un grupo vasco que se llamaba "La dama es esconde" y poco más.
Un abrazo.
"Desechos de tienta" presumiendo de inteligencia los más, pesebreros amantes de dictaduras de izquierda casi todos, robacroquetas de la SGAE en cantidad y una manada de sectarios ramplones todos...toma "hintelestualidá".
ResponderEliminarELENA
ResponderEliminarLos premios literarios de esta Era tampoco merecen mucha credibilidad. La izquierda siempre destruye todo lo equivalente a calidad.
Los Planeta tuvieron valor hasta una fecha, y con los sociatas se ha transformado en el pago de favores de una empresa editorial a sus amos políticos. Parecido sucede con el Premio Cervantes y hasta con el Príncepe de Asturias.
Ni talante ni talento...mucho cuento, y memez histérica. Es como Zapatero corriendo sobre la playa, en aquel montaje donde no se veían huellas en la arena... Quieren borrar las huellas de los anteriores, para que no se compare el surco que dejan unos y otros. Saludos.
ResponderEliminarDOÑA MARIBELUCA
ResponderEliminarEfectivamente merecen más ese calificativo de ROBACROQUETAS que el de intelectuales. En el Mundo y a lo largo de su Historia se ha considerado a los miembros de la INTELECTUALIDAD como " estar dotado socialmente de un valor de prestigio asociado a la atribución de un intelecto o inteligencia superior; y sobre todo, al entenderse que la actividad pública de los intelectuales que previa o simultáneamente se dedican al pensamiento tiene una dimensión y una repercusión que se consideran muy valiosas y que confieren altos valores humanísticos a quien ejerza tal función"
Y los que la prensa, radio y Tv sociatas consideran como tales en España, ni estando bajo los efectos de dos botellas de wodka son asimilables a eso.
EL FUGITIVO
ResponderEliminarCreo aciertas de lleno y que lo que tratan es de crear un concepto basura ( como todo lo que ellos tocan) de lo que ha significado en la historia de la Humanidad la palabra INTELECTUAL.
El ZP ha borrado las HUELLAS de lo anterior hasta el punto de ser el sustituto de los SIETE SABIOS DE GRECIA, de las creaciones de Sócrates, Aristóteles y Platón, de los principios de Arquímedes y de Pitágoras, de las Leyes Universales de la Gravedad de Newtom, de todas las observaciones astrales de Ticho Brahe, Copérnico y Kepler, etc. etc. etc.