Cualquier observador se habrá percatado de que la costumbre de preguntar, antaño reservada casi exclusivamente a los jueces, los médicos y las porteras de finca urbana, es practicada ahora por todo quisque y, además, de forma profusa, reiterada y hasta agobiante.
Para comprar un sencillo pan, con el sabroso objetivo de untar la salsa de chipirones en su tinta que había preparado la abuela, bastaba con decir: "Buenas, déme una barra". El dependiente te la servía, tú la pagabas y te ibas tan ricamente.
Se ganaba tiempo y corrían las colas a una velocidad notable, lo que facilitaba la descongestión de la panadería.
Ahora la cola no se mueve por la dichosa manía de preguntar y preguntar.
"¿Tiene baguettes de mantequilla con frutas?; ¿y pan sin gluten?; ¿le quedan bollitos de harina de maíz?; ¿me puede cortar finito el pan de molde?; ¿esos granitos de la chapata son semillas de pistachos?, es que a mí el pistacho me da aires".
La cola se eterniza y además de perder la paciencia uno se expone a que, cuando le toque el turno y pida "una barra de pan normal" le contesten que se ha acabado.
Y, la verdad, una salsa de chipis sin pan a mano es un drama culinario muy serio.
El problema de los preguntones no es, por supuesto, exclusivo de las panaderías.
"¿De cuantos huevos es la tortilla?; ¿Hay el mismo en color fucsia?; ¿Se puede calentar en el microondas?; Tiene 'Por el camino verde' cantado por la Caballé?; ¿Usted cree que lloverá?"
-¡Yo que sé, señora!
Tellagorri
cotillas y colas de pan
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ResponderEliminarLo más peligroso Tella de una cosa tan sencilla como ir a por el pan es la cantidad de ojos que debes tener y la situación de alerta y estrés en la que estás desde que entras al establecimiento hasta que sales.
ResponderEliminarHay ocasiones en las que te encuentras rodeado de mujeres (su edad es proporcional a su maestría en el juego sucio y violencia) que intentan colarse a la menor ocasión con una maniobra envolvente que ya quisiera Rommel o que, a la que te descuidas, han pedido, han pagado y se han ido antes de que te hayas siquiera dado cuenta.
Y al menos la panadería suele ser un espacio reducido fácilmente controlable, cuando el escenario se traslada a una frutería, una pescadería o una carnicería el aroma prebélico se puede cortar en el ambiente.
Buen domingo y buen post para finalizar la semana.
Buen día...!.
ResponderEliminarCuánta razón tienes, amigo "Tella"!.
Y no..., no pertenezco al club de "L@s Preguntader@s".
Como no tengo tiempo ni de mirarme al espejo, procuro ir ganando alguno evitando preguntas, a veces necesarias, pero bueno..., al menos gané un tiempito que no me viene nada mal!!!.
Si que a veces me ponen nerviosa esas personas que no hacen más que preguntar, me ponen nerviosa las impacientes, esas personas que preguntan y no dejan contestar (típicas de alguno@s periodistas), esas que te aturullan de preguntas y cuando terminan no sabes por dónde vas a empezar por que ya se te olvidó la primera pregunta; me ponen nerviosa esas personas que además de hacer la pregunta, ellas mismas se contestan. Pues para qué coño preguntan si ya saben la respuesta...???.
Digo yo que..., exceso de nervios tendré...!.
Un abrazo!.
ISRA
ResponderEliminarLo has reflejado muy bien : Se entra y se permanece como si fueras a una batalla de griegos y persas.
Luego están las "listas" de Ambulatorios o similares lugres que se va con cita.
Te pregunta la última que llega = ¿A qué hora tiene Ud.? Y como le digas la verdad, te contestará que "ella cinco minutos antes".
Yo siempre contesto que "soy el siguiente".
Las maniobras de algunas gordas (digo gordas porque son las que más jeta tienen) son dignas de Academia Militar, para colarse.
Y el peor problema que hallas en todos esos lugares es que la dependienta sea CHARLATANA. Se enrolla a hablar y hablar con cada uno o una que atiende.
Las farmacias son también zonas muy peligrosas porque todas (es un temás más femenino que masculino) están antes que tú aunque las hayas visto entrar detrás de tí.
DOÑA LOLA
ResponderEliminarA las personas que hacen interrogatorios sin espera a las contestaciones, la primera regla ( por mucha amistad que tengas) es ignorarlas o evitar contestar a nada.
Y si además ellas mismas contestan en sustitución a tí y en base a suposiciones de ellas, entonces mejor esquivarlas en cada ocasión en que te las encuentres.
Lo que más me llama la atención de las féminas cuando entran en un establecimiento es que van a comprar una cosa determinada pero se pasan una hora ( o dos) mirando todos los demás artículos que no les interesan para nada.
Sí..., eso sí amigo "Tella", eso de esquivar se nos dá muy bien a "las cordobesssas"!!. Jejeejeeee..., mi amiga Adealida lo sabe!!!.
ResponderEliminarNo te creas que siempre lo conseguimos..., pero intentarlo, lo intentamos!!!!!.
No pertenecía al otro club, pero al "Club de l@s Miron@s" (solo cuando tengo tiempo), si que pertenezco.
Creo pues que es una cualidad que define a las mujeres.
Nos gusta mirar, remirar y pasar treinta veces por el mismo escaparate y, lo más curioso de todo es que cada vez que pasas (de esas 30 veces en el mismo día), ves cosas nuevas!!!.
Digo yo que..., o tendremos algún problema en la vista o la dependienta se pasa el día cambiando el escaparate!.
Saludos!.
Hola Tellagorri.
ResponderEliminarA mí las colas me impacientan, pero si hay que hacerlas, se hacen.
Lo que no soporto es el olor, es que tengo la pituitaria o como se escriba muy fina. Estar en la bulla de la pescadería oliendo a sobacos ajenos, me cambia el menú del día y me voy a guisar unas lentejitas.
En cuanto a las preguntas sin fin,
"al que quiera saber, mentiritas con él".
Es que hay mucho mal educado por ahí; unos te acribillan a preguntas y otros te cuentan su vida sin que tú hayas mostrado el más mínimo interés.
De todas formas, yo soy de las que preguntan cuando necesito alguna información, no soy como los hombres que prefiern dar mil vueltas a la manzana antes que preguntar por dónde se va a tal calle.
Besitos.
DOÑA ELENA
ResponderEliminarYa sabía yo que tú eras mujer práctica, por intuición y forma de expresarte, y que no te gusta perder el tiempo en chácharas al ir de compras.
En lo de los olores, a mi me sucede lo mismo. Y en verano es una plaga porque la juventud ( que no sé si se ducha o no) se pone camisetas sudadas y usadas y huelen a sobaquillos que da para atrás.
Una vez en un Hiper, mientras me atendía un señorita muy pintada de arriba a abajo, le dije que qué mal olía allí. No dijo nada. Y al rato me dí cuenta que la que olía era ELLA. Y entonces, con gran escándalo de mi mujer, le dije a la dependienta = aquí la que huele eres tú.
Y no dijo ni muuu.
Luego están los que te cuentan su vida. Hay que huir como de una gripe de ellos.
Lo de que los hombres no preguntamos para encontrar un lugar o calle, es cierto. Y que perdemos mucho tiempo buscando.
Odio las colas, si veo una ya ni entro en el local, me molesta el que pregunten por el árbol genealógico del pan y por si el panadero es zurdo o diestro. No me gusta las aglomeraciones y procuro no ir al cine los días de estreno (aunque no siempre es posible), aborrezco que las personas sean tan cotillas en cosas triviales de la vida, y en cambio en las que si tienen importancia pues ni preguntan, ni opinan ni nada. Como todos y todas ya sabéis por donde van los "tiros"...
ResponderEliminarFeliz tarde dominical
Excelente DECLARACIÓN DE PRINCIPIOS y de COSTUMBRES, que suscribo integramente.
ResponderEliminarUn abrazo.
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ResponderEliminar¿Que no entienden que hay un enoooorme problema de soledad? La gente que se enrolla muchas veces no tiene con quién hablar en su vida o en su casa... y como ya no hay curas ni confesionarios y el psicoanalista cuesta un huevo de pato... pues se pega la hebra con quien sea. Mi experiencia me dice que los viajes en bus urbano son terribles; algunos son recalcitrantes en su empeño de conversar con uno. ¡Qué acorralamientos!
ResponderEliminarOtra cosa, debe de ser que tengo configurada la pantalla de mi ordenador para letra grande-grande (un problemilla en la vista me hace más agradecida la lectura con letra grande), porque los cuadros que aparecen a la derecha de mi monitor en la página de Tellagorri se ven cortados a la mitad. Para admirar los tales cuadros, suelo abrirlos aparte. Los de estos días eran preciosos, sí.
HABIA UNA VEZ
ResponderEliminarSí, tienes razón. Hay mucho gentío que tiene auténtica necesidad de hablar con ALGUIEN.
Lo tengo también comprobado. Y que casi siempre repiten las mismas cosas porque no saben qué decir, pero lo necesitan.
Si tienes puesto el ordenata en TAMAÑO letras grandes es lógico que no veas bien el recuadro completo del blog en la pantalla.
Si vas a panel de control y ACCESIBILIDAD puedes corregir el problema.
Gracias por lo de las pinturas que inserto y que a mí me sirven para dar algo de animación al Blog.
Me alegro mucho HABIA UNA VEZ de que entres en esta tu casa a comentar con más frecuencia.
Un muy cordial saludo
Saludos cordiales....
ResponderEliminarPara no hacer mucha cola, ni tener que aguantar a la dependienta "gestapo" que pregunta por todo.
Yo... compro en Mercadona,Eroski, Carrefour y cualquier comercio impersonal...
Y si hay cola en las cajas, me doy una vuelta por la sección de electrónica.
SNOWMAN
ResponderEliminarEso tiene un par de inconvenientes :
A) En festivos tales centros están cerrados.
B) Los centros que citas precisan de coche o moto para acercarse, y si a 100 metros de tu cas hay una panadería, ¿merece la pena de coger el coche?
Gracias por el comentario.
Qué rico está el pan mojado en salsa.
ResponderEliminarYa me gustaría que en mi barrio hubiera una buena confitería panadería como a la que tu vas Tellagorri, "baguetes de mantequilla con frutas", ¿lo qué?.
El pan siempre lo he comprado a primera hora cerca del centro donde estudiaban mis hijos hasta hace bien poco, allí despachan a la gente rápido y los días festivos va mi marido, si leyera tus post te daría toda la razón sobre los cotillas, para hablar tonterías mejor te vas a tu casa.
Nosotros compramos en los hiper, por norma cuando no hay casi nadie, en media hora vamos listos, más adelante no sé si será posible. Saludos
PASION
ResponderEliminarAquí las panaderías parecen joyerías, tienen lo menos veinte clases diferentes de panes.
A mí el pan me gusta comprarlo personalmente (estoy jubilado) y a última hora de la mañana para que sea de HORNADA RECIENTE.
Cuando paso por un Hiper también compro allí, pero es que cerquita de mi casa tengo tres panaderías y no merece cogerel coche para ir a un Hiper que siempre están en los extra-radios de las ciudades.
Gracias por tu opinión, PASION.
Debo de ser afortunado...
ResponderEliminar1.- Vivo encima de una panadería/pastelería.
2.- El Mercadona está a 100mts.
3.- Cuando voy al "curro" paso por un Eroski, un Carrefour y el Corte Inglés.
Y prefiero el "Centro Comercial", antes que tropezarme con todas las "marías"...
SNOWMAN
ResponderEliminarEntendido. Teniendo eleción como tienes de ir a cuatro o cinco sitios diferentes, está claro que lo que haces es lo correcto.
Lo que te he comentado iba en función de que yo estoy jubilado y me gusta andar, aunque tengo dos panaderias clásicas a cien metros. Y para ir al Hiper necesito sacar el coche.
Cordiales saludos
HABÍA UNA VEZ
ResponderEliminarMantén pulsada la tecla Ctrl y al mismo tiempo mueve la rueda central del ratón hacia ADELANTE PARA AMPLIAR Y hacia atrás para disminuir tanto texto como imagen.
Je je je... se agradece el tema de hoy para hacer un descanso ;D
ResponderEliminarNo soporto las colas, soy capaz de irme a otro sitio si hay mucha gente.
Y si se me cuela alguna espabilada, me voy también.
En una ocasión lo hice en la cola del súper. Después de mucho esperar, con una sola caja abierta de las tres que había, una caradura me pasó delante, así que me volví a los pasillos y fui devolviendo uno a uno todos los productos, saliendo ante la idiota de la cajera que, habiéndolo visto, lo había permitido, enseñándole las manos vacías.
La chachara de una dependienta con quien ya ha atendido y cobrado, pero que no callan las dos y no me atiende a mí, me pone de los nervios y también suelo irme.
Tengo de todo cerca de casa, el mercado municipal, el ambulatorio, varios súpers, panaderias, farmácia... todo. No falta nada y tengo donde escoger, así que puedo permitirme plantar a las maleducadas.
DOÑA LEONA
ResponderEliminarVaya, la señora ha dejado de odiarme.
No os entiendo a los mediterraneos.
Cuando alguien me ofende por posible error del ofensor, lo primero que hago es darle la cara y preguntarle a qué juega. Eso hubiera hecho en tu caso y conmigo.
De verdad, te garantizo que cuando le he dado apertura a la Loca, en ningún caso se me había ocurrido pensar que te iba a ofender. Pensaba que ibas a hacer algún comentario en el sentido de qué raro lo que esta cabrona está diciendo.
En fin, ya sé para la próxima vez por dónde vaís los catalanes con vuestros enfurruñamientos.
Valero sabe que cuando ha pedido colaboración para dirigir un escrito a altas autoridades o a quien sea, siempre he sido el primero en hacerlo, y en poner mi blog temporalmente sus videos de denuncia.
Y CABALLERO ZP también lo sabe. De hecho en este momento tengo un manifiesto suyo en mi margen derecho, porque pidió ayuda para su divulgación.
Y ahora vayamos a la suerte que vuestra merced tiene de vivir como una catalana de alto standing, con todo tipo de servicios a la altura de su domicilio.
Lo de las chácharas de las dependientas, habiendo colas, es desesperante, y también yo acostumbra a marcharme si la cola es por culpa de ellas.
En, un abrazo cariñoso, Leona Fiera.
LEONA
ResponderEliminarDoy fé de lo que afirma Tellagorri. Siempre ha estado y está codo con codo con cada uno de nosotros y es de los primeros en lanzar los misiles.
PD: Oche Tella, qu chó tambié soi mediterráneo, me criao en la má i ensima soi catalán i no menfurruño con naidie, esepto con los sorrones verbenero prosedente presisamente de la Má Mediterránea....Que a toas esas les jiede lalmeja cosa mala.
U sease que...
Gracias, MI COMANDANTE, por tu apoyo sobre mis afirmaciones.
ResponderEliminarLo de haber sido criado en la mar debe de ser la causa de que seas más aragonés que catalán, por aquello de las "barras de Aragón mandan en el Mediterraneo".
A la jíbara le jieden todos los moluscoss que lleva encima. Sucede, y tú lo sabes porque "semos" de quintas muy proximas, que a nuestra edad empezamos a pensar que el gentío no es tan malo como parece, aunque tampoco nos fiamos nada de ello, pero acostumbramos a dejar que se demuestre.
Con más juventud se tienen más odios africanos.
Creo que me ha pasado lo que a los viejos que chochean : que espera que el delincuente se haya reformado.
Un abrazo
Tella!, qué te pareció el desenlace de Camus!
ResponderEliminarEl otro día me pedías que te razonara brevemente por qué creo en Dios. Pues mira, una de las razones sebasa en ver conversiones como la de este hombre. Toda una vida negando a Dios, pero como era un tío profundo y no un superficial, le buscaba en su corazón y al final le encontró. A esto me refería el otro día cuando hablaba del anhelo de trascendencia que tiene el ser humano y que me contestaste dándome la definición de Justicia y alguna otra cosa más. El dar a cada uno lo suyo pertenece al ámbito del Derecho, no a la tendencia que tenemos todos hacia el infinito, el absoluto y lo eterno.
Brevemente, me parece que bastante más fe tienen quienes niegan a Dios sin una sola base donde apoyarse que quienes le afirman porque le ven actuar en sus vidas. Por otra parte, la Ciencia jamás ha conseguido la más mínima prueba de la no-existencia de Dios y nuncala conseguirá, dado que Ciencia y Fe se iluminan mútuamente y ambas proceden de Dios, ya que Dios ha creado todas las ciencias del mundo. Es imposible que nadie descubra jamás algo que niegue ni de lejos la existencia de Dios. Por el contrario, ante la majestad de los milagros, la Ciencia ha de permanecer muda pues no puede explicarlos. De hecho, los más grandes científicos que han pasado por este mundo son todos creyentes o se han convertido finalmente después de estudiar toda su vida. Incluso Kurt Gödel demuestra la existencia de Dios a través de las matemáticas con su argumento ontológico, pero claro, para poder seguirlo hay que tener varias carreras de ciencias puras.
Max Planck, premio nobel de Física afirmó que detrás de cada puerta que la Ciencia abre se encuentra Dios. Y Einstein, quien calificó a Dios como un matemático de máximo nivel afirmó que sólo un necio puede negar la existencia de Dios. Creo que son dos ejemplos (por no extenderme) bastante claros de un raciocinio, como tú dices, brillante.
Sólamente mediante la observación de la perfección que nos rodea deberíamos postrarnos a adorar a un Dios Creador que ha hecho tanta maravilla. Lo irracional a todas luces es creer que toda esta perfección se debe al azar, eso sí es absurdo hasta decir basta.
En fin... podría darte cientos de razones Tella. Yo misma tuve que razonarlo todo antes de dar el salto de la fe, por eso es un camino que conozco bastante bien.
Un cariño.
Coño, Tella, que pareces el nenazas de Gabilondo: "la señora ha dejado de odiarme".
ResponderEliminarYo no odio a nadie, es malo para la salud ;D
Un abrazo para ti y otro para el Comandante ¡que es catalán, ojo!
Te pasa en la panadería, la frutería pero también con vecinos, amigos, e incluso familiares. Parece que están esperando la ocasión para darte la chapa. O gente que porque conoce a tu familia se cree con derecho a interrogar. No lo soporto.
ResponderEliminarRepecto a las dichosas colas, el señor Murphy no se suele equivocar y a menudo te precede quien parece que partirá hacia la Antártida en breve, está aprovisionando su refugio anti-nuclear, o probablemente vaya a preparar una bacanal para la familia al completo, política incluída. Tengo que reprimirme de sugerir que acabarían antes si se compraran el puesto. Y con los 'colones', no me corto y les digo que no estoy allí haciendo tiempo.
Estimado sr. Tellagorri...lamento decirle que no soy de su opinión... Pienso que el problema de la larga cola que menciona en la panadería de su esquina no viene por los clientes preguntones sino por una falta de personal...
ResponderEliminarA mí, por el contrario, me ponen más nervioso aquellas personas que sin preguntar se enteran de todo: con quién vas, de donde vienes o a donde vas...vamos el llamado "marujeo".
un cordial saludo.