27 marzo 2009

El Abogado GREGORIO BALPARDA


El bombardeo de Guernica ha pasado a la historia como una atrocidad de guerra. Sin embargo, murieron muchas más personas asesinadas en la retaguardia que durante aquel bombardeo. Varios barcos fueron convertidos en prisiones. Uno de ellos fue el "Cabo Quilates".

Gregorio Balparda, abogado y diputado liberal por la circunscripción electoral de Valmaseda El 24 de agosto de 1936 recibía una comunicación de la Junta de Defensa de Vizcaya. Le reclamaba "sin excusa ni pretexto de ninguna clase" para actuar como fiscal militar en los tribunales sumarísimos que se estaban organizando en la provincia de Guipúzcoa.

Como Balparda creía que la Justicia militar era cualquier cosa menos justicia y pretendían que acusara de rebelión militar al general Muslera, decidió no prestarse a la comparsa y se dio de baja en el Colegio de Abogados. Detenido poco después, fue interrogado en el Gobierno Civil por el ugetista Paulino Beltrán delante del gobernador Echevarría Novoa.

-O sea, que ya no es abogado y no puede intervenir en el asunto.

-En efecto, no voy a actuar contra mis convicciones. No voy a servir de Caifás.

-Está bien. Si el gobernador no ordena otra cosa, que lo fusilen en el acto -bramó Beltrán-.

En lugar de fusilarle le internan en la comisaría Elcano de donde saldría el 31 de agosto con otros 18 presos con destino al barco-prisión Cabo Quilates, un antiguo mercante de la naviera Ybarra fondeado frente a El Abra, en el término municipal de Erandio.

Aquel mismo día le molieron a palos hasta que perdió el conocimiento. Luego le ataron a la grúa del barco y un miliciano ordenó:
- ¡Al agua con este cabrón!

Desnudo, atado de pies y manos, le zambulleron en la cloaca del Nervión una y otra vez hasta que perdió de nuevo el conocimiento. Acto seguido, le subieron a la cubierta y le descerrajaron un tiro de gracia.

-¡Otro fascista menos!

Concluida su hazaña, sus verdugos se quedaron con sus zapatos de Villarejo color marrón y su traje de Moronati, sucio por los días de cautiverio.

Por Tellagorri


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6 comentarios:

  1. Excelente artículo. Mi enhorabuena por revelarme un caso que desconocía. Muy oportuna la alusión al ugetista. Es curioso ver como se acusa de franquista a un partido que no existió hasta los años ochenta, y se pasa de puntillas sobre el pasado de partidos y sindicatos que fueron, directamente, terroristas.

    Gracias de nuevo y saludos.

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  2. Gracias a tí Cartas Marruecas por el inteligente comentario.

    Estas cosas es muy conveniente que las actuales generaciones (icluídos el pachi and cía) las conoczcan.

    En mis tiempos de estudiante había en Bilbao una calle dedicada a Gregorio Balparda, en el centro. Supongo que ahora se llamará calle de Telesforo Aranzadi o de Sabino Arana o de su puta madre.

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  3. La calle sigue existiendo, en el Barrio de San Ignacio. Transversal a Arturo Campión y Lehendakari Aguirre, a la altura de Sarriko. Paso mucho por ahí, porque trabajo en un consultorio cercano. Se ve que los del nomenclátor no se han enterado de quién era el homenajeado.

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  4. Y tanto que eran terroristas,auténticos matarifes sanguinarios.
    Las pasadas Navidades,que estuve con mi marido en Roma de visita a Gutiforever,nos enseñó unos manuscritos originales de las matanzas y aberraciones que cometió un tal García Atadell socialista y chekista,que te ponían los vellos como escarpias.
    Esto si que es Memoria Histórica....

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  5. La hoy "mal" llamada calle Autonomía en Bilbao fué hasta el 80 más o menos AVD. GREGORIO BALPARDA. Como bien dice cartasmarruecas ahora hay una pequeña calle en el barrio de San Ignacio con ese nombre. Por cierto "internet" es un pañuelo yo vivo en ese barrio.

    Siempre que álguien no se ha plegado a sus ordenes o indicaciones la salida durante la guerra, y antes, era pegarte un tiro y ahora llamarte facha y en Vascongadas cosas peores.

    Por cierto yo creía que D. Gregorio había sido comisario, pero porque siempre oí eso por Bilbao para que te fíes de las habladurías.

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