11 julio 2018
Grabaciones carcelarias
“En la cárcel entra de todo, lo que está prohibido y lo que no”, sentencia un veterano funcionario de prisiones. Fundamentalmente, lo que entra son drogas y, en estos tiempos más recientes, teléfonos móviles.
Las sustancias ilegales “son más fáciles de encontrar en la cárcel que fuera” y son parte esencial del ecosistema en prisión.
Los sistemas para introducirlas no han variado en exceso en las últimas décadas: escondidas y envueltas en preservativos, en las vaginas de las visitantes en los vis a vis o en otras partes del organismo de visitantes y reclusos que regresan de permiso. Para los teléfonos, sin embargo, es preferible contar con la complicidad de algún funcionario.
Seguramente, eso es lo que sucedió la semana pasada cuando dos dispositivos de grabación entraron en Estremera y captaron al exvicepresidente de la Generalitat Oriol Junqueras y al exconseller de Interior Joaquim Forn en algunos de sus quehaceres cotidianos entre rejas.
Según Carlos Recio, director de la empresa teespiamos.com, las grabaciones se llevaron a cabo con un reloj y un bolígrafo, respectivamente.
Qué mundo el carcelario. Parece propio de México.
ResponderEliminarDON SASTARRAIN
EliminarTodo un mundo ajeno al de los ciudadanos currantes.
Bueno es que las condiciones de habitabilidad de las prisiones no sea el medieval pero entre las prisiones modernas para mangantes de lujo y las libertades existentes para surtirse de todo lo ilegal en todas, al final habrá quienes prefieren vivir en ellas.
ResponderEliminarDON JUAN.
EliminarPor lo que se lee a veces en alguna prensa, hay presos comunes que nunca dejarían su mundo carcelario porque es mejor que el de la calle.
Si por mi fuera a todos estos delincuentes catalanes los enviaba a GUANTÁNAMO. Con sus iguales los talibanes.
ResponderEliminarDON IÑIGO
EliminarSecundo tu propuesta de que los catalufos encerrados y algunos más sean enviados a Guantánamo.
Los señoritos en la "catedral", como se llamaba a aquel remedo de carcel donde estaba "preso" Pablo Escobar. No me dan ninguna pena, ojala les metan una sarta de años y que entren el resto de complices.
ResponderEliminarSEÑOR OGRO.
EliminarNo, no dan ninguna pena.
Lo que me hace "gracia", es que Interior dice que investigará quién grabó las imágenes. Hay cosas que no cambian.
ResponderEliminarDON TRECCE
EliminarComo si los de prisiones o instituciones penitenciarias no supieran nada del tema. Morro a raudales en Interior.