En España demandar públicamente el cumplimiento de la ley rompe la armonía basada en su incumplimiento impune y granjea, al osado que lo haga, la hostilidad tanto de los violadores sistemáticos de las leyes como la animadversión del poder que incumple, también sistemáticamente, su deber y su juramento de hacer cumplir las leyes.
Si eso siempre ha sido cierto en la España democrática, lo es más que nunca desde aquella catástrofe nacional que fue el 11-M, jamás del todo aclarada.
La mayoría de los españoles acepta resignada esa armonía encanallada y mentirosa entre delito y poder, consciente de que cualquier denuncia o acción que pudiera alterarla conlleva inconvenientes en ocasiones muy serios.
Aquellos que piden, exigen o claman en España por el cumplimiento de las leyes y la Constitución son por ello unos marginados.
HERMANN TERTSCH
Desde que se aprobó la Consti los gobiernos se apresuraron a desarrollar su articulado mediante Leyes Orgánicas del parlamento. Pero como si fueran adornos. Desde la confusión creada a propósito entre competencias (claras en la Consti pero no en la práctica de uso) del T. Supremo y del T. Constitucional, la parcialidad penosa del Consejo General del Poder Judicial (formado por parlamentarios en vez de por jueces) o la impunidad de los jefes policiales de todos los Cuerpos para mirar al lado que les gusta en cada ocasión, es como si tuviéramos un país anárquico en legislación.
ResponderEliminarY lo curioso es que está reglada hasta la última minucia como por ejemplo las cualidades que deben de tener los alimentos envasados.
DON MARTÍN.
EliminarBien detallado homenaje al incumplimiento organizado de leyes.
Por de pronto hay un tribunal que SOBRA porque sus funciones en todos los países las realiza del T.Supremo, y es el CONSTITUCIONAL.
Y lo de que a los jueces los nombren, disciplinen y los echen el grupo ese del C.G.P.J. en el que ninguno ha estudiado siquiera la carrera de Derecho.
Cuánta razón tiene el periodista donostiarra-austriaco de Tertsch. Aquí se cumplen las leyes, a medias pero algo, a cuenta de los defraudadores de impuestos. Y con los no defraudadores pero que son susceptibles de ser saqueados por las Haciendas Locales, provinciales o estatales.
ResponderEliminarLos que jamás fallan son los de la Direción General de Tráfico : embargan cuentas bancarias a la mínima.
DON MOLLARRI.
EliminarEfectivamente se cumplen algunas leyes, y no con todos los ciudadanos, cuando se trata de RECAUDAR. Los Ilustrados denominaban a eso EXPOLIOS REALES.
Debe de ser en lo único que se aplican las leyes e incluso sin haberlas : en lo recaudatorio de los señoritos con cargo.
ResponderEliminarConozco a uno al que han multado muy fuerte los de la Hacienda Foral por haber vendido una finca a precio inferior al de su valor catastral. Y no existe norma alguna que regule tal cuestión. Pero ni los tribunales le dan la razón.
DON JORGE.
EliminarEsa es otra : las "normas" que se inventan algunas secciones recaudatorias de las HACIENDAS FORALES VASCAS para exprimir a concretos contribuyentes.
Así es : "la población acepta LA ARMONÍA ENCANALLADA entre delito y Poder", con la misma resignación que las estaciones del año que se van sucediendo entre calores y fríos.
ResponderEliminarDON VILLAR.
EliminarRepito lo que siempre he apreciado como "circusntancia inherente" del país : de ser durante siglos país de labriegos y sometidos a sucesivas dictaduras, ya no queda un átomo de rebeldía ciudadana para echar a todos los que han organizado el sistema de funcionamiento saltándose las leyes.
El sistema de bandolerismo politico judicial estaba ya montado antes del 11m, pero cierto es que en ese proceso se cayeron todas las mascaras. Luego, la masacre educativa, y la masacre en el periodismo han hecho el resto, acabar con la democracia en sus terminos mas sanos, y llegar a un punto donde por decir los niños tienen pene y las niñas vulva, coge un alcalde de mierda, y te lanza a los munipas y a la fiscalia
ResponderEliminarLA realidad casi suoera ya al orwell de 1984
SEÑOR OGRO.
EliminarComo bien indicas entre la masacre educativa y la periodistica más la inoperancia de un sistema judicial creado a imagen del Psoe, se llega a lo del BUS ese que rechaza la transexualidad de los niños. A los NIÑOS que los dejen en paz.