Los libros que han de leer los bachilleres españoles no hablan de la responsabilidad revolucionaria en el empobrecimiento y atraso del Tercer Mundo.
Nuestros bachilleres no podrán leer nada parecido a esto: "Durante el decenio 1980-1990, casi todas las víctimas de la privación de alimentos se situaban en África, y más particularmente en los países provistos de un régimen marxista: Etiopía, Madagascar, Angola, Mozambique, a los que hay que añadir Sudán, que no es marxista".
Sí leerán, en cambio, explicaciones que vinculen la pobreza en el Tercer Mundo, y especialmente en África, con las secuelas de la colonización occidental y obvien cosas que tienen mucho más que ver con la realidad de hoy.
Y la realidad es que además de las mortíferas copias del koljozismo soviético-chino por las nomenclaturas de África y el desvergonzado saqueo de los recursos internos y de la ayuda exterior por las oligarquías revolucionarias locales, las incesantes guerras civiles o interestatales, las guerras de religión, las exterminaciones étnicas, el racismo intertribal, las matanzas y los genocidios son las principales, si no las únicas, explicaciones de la caída de las poblaciones africanas en la indigencia.
Suele suceder que se trata con mayor consideración moral a cualquier líder tercermundista totalitario antiamericano que a un presidente de democrático occidental de derechas o liberal.
A EEUU se le acusa de fariseísmo por apoyar regímenes autoritarios, como hizo Reagan para derrotar al comunismo. Una crítica acertada, pero que resulta sesgada si no se repudia a todos los gobiernos democráticos que se hayan aliado con dictaduras para derrotar a enemigos totalitarios más peligrosos. Como Francia con dictadores como Amin y Mohamed VI.
Hay un sinfín de ejemplos que abundan en el sesgo progresista de los textos de Historia de Bachillerato. Aun así, quisiera referirme sucintamente a unos cuantos más:
Se critica la falta de ayuda occidental al Tercer Mundo, pero no se dice que África ha recibido el equivalente a varios planes Marshall y, entre 1960 y 2000, cuatro veces más créditos (no devueltos) y ayudas per cápita que Asia. Tampoco se explica, claro, por qué Asia despega y el Continente Negro no.
Se estigmatiza el "neoliberalismo", por mucho que la mayoría de los economistas actuales lo defiendan por su vinculación con la libertad, el pleno empleo y la eficacia en la creación de riqueza, y se ensalza la socialdemocracia, aunque para ello haya de ocultarse sus sonados fracasos (desempleo, precariedad de los servicios públicos, empobrecimiento de la ciudadanía como consecuencia de los altos impuestos...).
Se condena la globalización por su supuesta responsabilidad en el empobrecimiento del Tercer Mundo, pero no se aportan cifras rigurosas; cifras como las que aporta el profesor Sala i Martín: "Los datos demuestran que la fracción de la población que es pobre va decreciendo. En ese sentido, el progreso de China y la India vuelve a ayudar, porque ha hecho que 300 millones de personas hayan abandonado la pobreza absoluta".
Tampoco se aportan testimonios como el de la nada sospechosa de conservadurismo Emma Bonino, que afirma que el único continente donde no se ha progresado es en África, justo donde no llega la globalización; o éste de Revel: "Desde hace cincuenta años en el Tercer Mundo ha habido un triple aumento: el de la renta media, el de la población y el de la esperanza de vida, por causa de la Globalización".
Por último, me gustaría resaltar lo curioso que resulta que sea siempre EEUU el malo de la película, y no Europa, dueña del mundo entre los siglos XVI y XIX, exportadora de guerras mundiales y de los totalitarismos nazi y comunista, de los que finalmente se deshizo gracias a la ayuda de... EEUU.
Llama igualmente la atención la predilección que nuestros manuales de Historia han tenido siempre a favor de la tradición jacobina, modelo de tantas revoluciones devenidas finalmente en el terror y la dictadura, y su desprecio o condena del sistema anglosajón, paradigma de la estabilidad democrática desde hace más de 200 años.
¡Cuánto bien haría a los bachilleres españoles saber más de países como Gran Bretaña, EEUU, Canadá o Australia, que no sólo no han padecido dictaduras, sino que en varias ocasiones han defendido prácticamente en solitario la libertad en el mundo!
Tellagorri
izquierdista,textoshistoria
Sólido y contundente querido Tella...!Cuanta ceguera hay para no ver eso!...Pero es que en el argumento final, además, lo bordas...Es irrefutable, como un axioma matemático...Te voy a tener que llamar Tellagorritóteles, que me estoy quedando sin adjetivos...!Copón!...
ResponderEliminarAmigo CHARNEGUET me alegro muchísimo de que lo veas 2sólido y contundente" pero no creo que llegue a quienes debiera.
ResponderEliminarHay comentaristas en los Blogs normales que aún siguen creyendo que los USA son asesinos o libertinos, y que los franquistas eran la única bendición que Europa.
E incluso lo dicen de buena fé.
Los otros, los inoculados de virus socio-progre ni se molestan en contestar porque no saben ni de lo que hablo. Les suena a película sobre Anibal y los cartagineses, en el mejor de los casos.
A los progres sólo les recordaría que si no fuese por los americanos no habrían tenido su añorado mayo del 68 ni podrían ir dando lecciones de nada a nadie.
ResponderEliminarSimplemente no estaríamos, también es cierto que con su ayuda y "nuestro esfuerzo" (no precisamente de la izquierda) lo conseguimos.
Y por ir terminando, la izquierda es tan sucia, lamentable y sumamente rastrera y despreciable que muerde la mano de quien le dio de comer y que, siendo como es EEUU el pricipal garante de la democracia (¿alguien ha visto a Europa?), permite en el ejercicio de la misma que se le insulte y ataque.
Ese el el problema Tellagorri, hay quien cree que lo que está escrito "va a misa", y ya no es sólo que intentemos adoctrinar a los jóvenes, es que sencillamente van a salir tontos e ignorantes del colegio... ah coño, que es lo que buscan, gente sin criterio para que les vote como borregos.
Para cuando llegue mi hija a dar ese absurdo que es EpC tengo una extensisima bibliografia para desintoxicarla adecuadamente.
Me acuerdo de un dato que me dieron en COU, en Historia del Mundo Contemporáneo, sobre a qué dedicaban los países subdesarrollados las ayudas dadas por occidente. De todo el dinero que le daba España a Egipto, se lo gastaba en armamento. Con esto, ¿cómo se puede plantear dar más dinero si esos países se lo gastan irresponsablemente?
ResponderEliminarAlgunos salimos normales y todo jaja
ResponderEliminarOtros tantos salen con esos prejuicios que comentas.
Pero lo peor es que el resto que es la gran mayoría salen sin pensar nada, ni bueno ni malo.
En cualquier caso hace poco yo sostenía lo que dices de los países anglosajones y liberales (Canadá cojea pero bueno jeje). Que bien haría importar gran parte de sus sistemas políticos a nuestras democracias "participativas".