Comenta I. Varela que en vez de a un debate asistimos el lunes a "sucia pelea navajera". El caso es que la cosa empezó bien. Durante los 20 primeros minutos pareció que, por fin, íbamos a tener un debate serio y no un nuevo acto de Operación Triunfo.
Pedro Sánchez entró al debate haciendo un eficaz juicio crítico a la política económica del Gobierno y a sus consecuencias sociales. Mariano Rajoy parecía dispuesto a jugar a fondo la baza del empleo como columna vertebral de todo su discurso.
Una cosa es que la recuperación haya comenzado (lo que es difícilmente discutible) y otra que seamos la envidia del mundo, de nuevo los héroes de la Champions.
Eso hacía difícil seguir a Sánchez, aunque su discurso resultara creíble y el de Rajoy, no.
Una competición suicida sobre cuál de los dos gobiernos, el del PSOE o el del PP, lo ha hecho peor y ha sido más calamitoso para España. Cada uno exhibía los fracasos del otro y se arrojaban a la cara los parados, las crisis financieras, los rescates, las pensiones congeladas o rebajadas, las mentiras y los incumplimientos.
Y lo peor es que ambos fueron convincentes: de resultas del intercambio de golpes los dos gobiernos de la crisis quedaron hechos un pingajo, como el país mismo.
Por un momento se adueñó del escenario “la hucha de las pensiones” sin que nadie se molestara en explicar qué es y de dónde ha salido tal hucha, aunque parece ser que alguien la ha roto llevándose los ahorros de los ancianos.
De pronto el candidato socialista se hizo con la palabra, puso la pose de los grandes momentos y espetó: “Si usted gana las elecciones el coste para la democracia será enorme porque el presidente debe ser una persona decente y usted no lo es”.
Qué disparate. ¿Cuántos votantes tendrá el PP el próximo domingo, seis, siete, ocho millones?
Da igual cuántos sean, el insulto iba para ellos por tener la indecencia de votar a un indecente.
Nadie en el PP ni en el PSOE puede sentirse orgulloso de lo que pasó el lunes. Lo que vimos fueron dos rostros del fracaso.
Me permití el "lujo" de no ver el detalle y viendo los resumenes de prensa y los comentarios en radios y televisiones creo que fue un gran acierto.
ResponderEliminarNo esperaba nada mejor de ninguno de los dos contendientes, el sin vocales PdrSchz ya hace tiempo que dejó claro que lo suyo es simplemente echar a Rajoy y azuzar a las masas, es violento en sus mítines y entrevistas. El otro, es inane, ni siente ni padece e intenta pasar sin hacer nada.
DON CSC.
EliminarExacto. Los retratas milimétricamente.
Yo tuve la santa paciencia de escucharlos, a pesar de que me aburrían los dos, pero lo que quedó claro es que los DOS representaban a partidos AMBOS que habían estafado a los españoles en todo.
Que cada partido que representaban es un daño real para los ciudadanos.
El PP ha fracasado en buena parte por su corrupcion, pero sobre todo porque no ha cumplido las promesas hechas a sus votantes. A su favor, hay que reconocerle que al menos nos ha dado aire frente a la calamitosa situacion anterior.
ResponderEliminarYo tengo claro que no pienso votar a este PP, que ha mentido en todas sus promesas y que ha violado sistematicamente cada principio que se suponia a este centro derecha socialdemocrata.
Ahora bien ¿pero que cojones le tienen que echar en cara los de la izmierda?
- Mantuvo todas las politicas socialistas de Zapateor
- Incremento el gasto publico incluso con la crisis
- Nos ha endeudado aun ma
- Subida de impuestos por encima de lo que incluso pedia la izmierda
Por no hablar de la corrupcion socialista, con la que lo de Barcenas queda en aguilla de borrajas. ¿Pero de que se quejan los pazguatos del PSOE? ¿de que se queja la izmierda española?. Mas les valdria callarse un buen rato, para ver si no recordamos asi la cordillera de MIERDA que nos dejaron
Ambos candidatos hicieron el gañán, pero ver a la izquierda dar clases de algo está fuera de lugar.
SEÑOR OGRO.
EliminarEso que tú detallas es precisamente lo que trato yo de decir en el post : los peperos han incumplido todo lo prometido de enmendar a ZP y han hecho seguidismo a aquello, además de endeudarnos más. Y todo eso salió a la palestra en el round de garrotazos que se dieron los dos candidatos.
Por otra parte los socialistas quebraron y arruinaron al país. Son los reyes y amos del arruinar a cualquier país que gobiernan.
De todo lo cual nos quedamos con que ninguno de esos candidatos nos es VÁLIDO.