Los turistas arrasamos las ciudades, expulsamos a sus habitantes legítimos con nuestras estancias en apartamentos turísticos, nos lavamos los pies en las fuentes públicas, no nos gusta la comida local y queremos que haya restaurantes donde sirvan filetes como los que nos comemos en casa.
Y ¿qué hacer?
Porque, además, el turismo (brama el biempensante) crea riqueza económica aunque, la verdad, no conocemos ningún país realmente rico cuya principal industria sea el turismo y suelen ser más ricos los que viven de su innovación y sus empresas punteras, por ejemplo, en lo tecnológico.
Queremos viajar, no tenemos ninguna duda. Me planteo si no merecerá la pena dejar de pisar territorios lejanos y quedarnos a la sombra en la casa del pueblo, comiendo melón y sacando por las noches la silla de enea a la puerta para ver pasar los gatos.
El peligro está en que los aldeanos que no viajan, como advertía muy bien Don Pío Baroja, se vuelven separatistas por su ignorancia de lo ajeno a su aldea.
¿Qué sería de Paris, Estambul o New York sin turistas?
ResponderEliminarUna ruina comercial y social.
DON ZUBIMENDI
EliminarPues serían ciudades desconocidas por estar con la mayoría de los comercios, bares y restaurantes CERRADOS.
Estambul es una ciudad dedicada exclusivamente a producir artículos para los turistas. Y Paris en un 70% es lo mismo.
ResponderEliminarYendo más cerca veriamos desaparecer a casi todas las ciudades costeras andaluzas y alicantinas si no les llegaran los turistas.
DON ADRIÁN
EliminarSin turiimo ESTAMBUL se convertiría en una aldea semi vacia.Y algo parecido sucedería en Paris.
Desde luego desaparecerían Benidorm, Marbella y cientos de localidades españolas.
A mí como ciudadano no me hacen gracia las aglomeraciones de turistas en verano porque causan problemas de colas de tráfico en las calles, y hasta es dificil conseguir un café en un bar. Pero se soporta todo porque favorece a los comerciantes.
ResponderEliminarDON CABALLERO.
EliminarHay lugares que son una bendición en época no vacacional pero en general muchas ciudades y pueblos dedicados a vivir del turista, se convertirían en desiertos.
Lo que está claro es que el hacer turismo es una forma de enriquecer la CULTURA PROPIA. Además de conocer lugares nuevos se empapa uno de las forma de vida y mentalidad de los lugares que visitamos. Claro que todo es es en referencia a la gente NORMAL, no a los gamberros mochileros que sólo buscan juerga y alcohol o sexo barato.
ResponderEliminarEl cine nos ha mostrado tantas veces algunas ciudades, como por ejemplo Nueva York, que cuando llegas allí parece que ya conoces la ciudad.
DON CARLOS
EliminarEfectivamente visitando Berlin o Hamburgo o Munich o Paris, y especialmente Nueva York y Estambul se aprende mucho más que leyendo toda una biblioteca pública, siempre que se sepa qué es lo que está mirando.
Porque hay gente que se va a Paris e ignora lo que son los Campos Eliseos o el Arco del triunfo o el Louvre o el edificio de la Opera, etc. etc.
No todos los turistas son unos cerdos integrales ni hozan en las calles dejando todo hecho un asco.
ResponderEliminarSi es verdad que en lugares demasiado masificados, se acaba haciendo daño a los locales, ya que todo se dirige, precios incluidos, a los turistas, y eso jode. O el caso extremo de Mallorca, donde ni la gente que curra alli encuentra donde dormir.
Pero a partir de ahi, casos como lo de Barcelona, donde se demoniza al turista por gentuza comunista, la Colau, etc.. eso es otro percal muy diferente. Esa fobia me da mucho asco, muchisimo, porque hiede a comunismo, a aldeanismo supino.
Todos querriamos ser punteros tecnologicos y tal, pero de ahi a despreciar al turismo, creo van varios trechos. Aquellas ciudades que no esten conformes con sus turistas, que exijan un poco de pundonor, pero desde el respeto al que viene a conocerte y dejarte dinero, no desde la pura fobia de tarados sin riego cerebral.
SEÑOR OGRO
EliminarLos turismofobos catalanes son exportables al Artico para que sepan lo que es vivir "en armonia local".
Yo recuerdo que en tiempos del Invicto los munipas prohibian circular por el centro de Donosti a los que no iban BIEN VESTIDOS.
Ahora ya no es necesario que eso ocurra porque los mochileros guarros desaparecen de escena en cuanto ven el "ambiente" decente y bien aseado de los lugares norteños.
El problema no es el turismo, sino el turismo borreguil. Vamos donde nos dicen y algunos de los que se han ido a Tailandia (por ejemplo), que está muy bien, no conocen las maravillas de las ciudades de alrededor de la suya, a alguna de la cuales pueden ir una tarde cualquiera a darse un paseíto y conocer alguna de las bellezas que encierran.
ResponderEliminarDON TRECCE
EliminarEsa es otra : jubilados que se van a Tailandia o a Viet-Nan y desconocen cómo son Toledo, Avila, Sevilla, Córdoba, Pamplona, Salamanca o Burgos, por citar algunas.