31 diciembre 2010

2011


QUE LOS DIOSES NOS AMPAREN, a lo largo de ese número,   A LOS  HABITANTES, SIN NACIÓN, QUE VIVIMOS ENTRE  EL  CANTÁBRICO  y  MARRUECOS,   y   ENTRE EL ATLÁNTICO  y  EL MEDITERRANEO.

29 diciembre 2010

Razonando sobre la "raza" "vasca"

No hay razas humanas sino que sólo hay una raza, Homo sapiens sapiens, que llegó a Europa hace unos 40 mil años y que se asentó y sustituyó en todo el continente al hombre de Neandertal, con el que, por cierto, nada indica que llegase a mezclarse si no de modo excepcional o anecdótico.

Esta colonización paleolítica europea seguramente se produjo en oleadas desde la encrucijada de los montes del Cáucaso con las áreas próximas del Oriente Medio, desde donde nuestra especie accedió, seguramente en número bien limitado, a vastas regiones europeas comprendidas entre las orillas del mar Negro y las estribaciones de las cordilleras Cantábrica y Pirenaica, y sin que se aventurara a ir mucho más al norte porque los hielos (o, cuando menos, el frío) ocupaban perennemente la mayor parte de esos territorios.

Nuestro antepasado paleolítico era todo un artistazo que recolectaba frutos y cazaba bisontes, caballos y renos (que dejó pintados en Lascaux y Altamira), probablemente tenía una expectación de vida y una demografía muy pobres (y por eso no se extendió por el resto de la península Ibérica) y, no repugna en absoluto pensarlo, hablaría un idioma con fonemas y palabras que podrían haber llegado casi intactas vehiculadas en el vascuence hasta nuestros mismísimos días.

Estudios de la variabilidad genética efectuados con tecnología de RFLP de ciertos haplotipos H, del DNA mitocondrial (heredado sólo por vía materna), y 15, del cromosoma Y (heredado sólo por vía paterna) en diferentes poblaciones europeas, abonan la idea de un sustrato genético común a toda Europa y norte de África, de origen caucasiano, extendiéndose, por tanto, del Atlas marroquí a Finlandia y de los Urales al Atlántico, seguramente en relación con sucesivas oleadas migratorias producidas hasta hace 20 a 25 mil años, en periodo Pleistocénico, y desde las referidas regiones caucásicas.

Hace entre 11.000 y 13.700 (la datación es muy exacta)  aconteció en el hemisferio norte un cambio climático fundamental: el periodo de Bølling -Allerød, en el que las temperaturas ascendieron espectacularmente y los bosques boreales y el clima benigno sustituyeron en las planicies del centro y norte de Europa a la tundra y al hielo perenne.

Como consecuencia de ello nuestro hombre paleolítico asentado en los valles y las cuevas de las penínsulas europeas meridionales encontró un momento idóneo para expandirse en dirección septentrional, persiguiendo a las manadas de rumiantes que le servían de sustento, y ocupando así toda Europa, hasta Finlandia; y ello lo hizo, fundamentalmente, insisto, desde un área geográfica comprendida entre Cantabria y Cataluña y el Ebro y el Garona.

En 1998 se publicó (Am J Hum Gen 62: 1105-12) por miembros italianos de la escuela de Cavalli-Sforza (probablemente el antropólogo más reputado que existe) la teoría que acabo de enunciar, fundamentada en el estudio del haplotipo V del DNA mitocondrial de varias poblaciones europeas, según la cual, y resumiendo mucho, parecía deducirse que el hombre de Cromagnon se extendió por toda Europa a expensas de esta migración paleolítica al final del periodo de máxima glaciación y aprovechando ese otro periodo de 1.700 años de clima benigno.

Restos arqueológicos de la edad de Piedra tan alejados del suroeste europeo como los de Bélgica, Alemania y Polonia así lo acreditan.

Según Venneman y algunos lingüistas germánicos  esta expansión paleolítica tardía habría llevado un idioma protoeuskérico hasta los confines de Europa, de modo que algunas referencias toponímicas actuales en todo el continente con similitudes asombrosas entre sí tendrían esta explicación.

De modo muy interesante, el referido haplotipo V  está presente en altísima proporción entre las poblaciones vascas, catalano-levantinas y norteafricanas actuales; ello, unido a otros marcadores genéticos autosómicos (del complejo mayor de histocompatibilidad) también presentes en las poblaciones vascona y bereber y a algunas similitudes lingüísticas entre el euskera y el idioma imazigh de los bereberes hacen plausible la idea de una relación o contacto genético y cultural muy estrecho entre los pueblos ibéricos y sudoccidentales franceses (vascoiberoaquitanos, si se quiere) con los norteafricanos ya desde el Paleolítico tardío.

Uséase, para entendernos : desde antes de la Edad de Piedra había contactos genéticos entre bereberes africanos y habitantes del Pirineo y cercanías.
En esta época prehistórica, paleolítica, cabe preguntarse: ¿el contacto se produjo desde Iberia ("Euskoiberoaquitania", repito, si se quiere) al Atlas o desde el Atlas a Iberia?:

Bien. Dejábamos a nuestro pariente paleolítico chapurreando quizás en protoeuskera, "o así", hace 13000 años por las campas de POLONIA cuando sobrevino una nueva putada: la moderna glaciación (youngest Dryas), que duró desde hace 13000 años hasta hace 11.600 años.

Es de suponer que nuestro antepasado europeo aguantó como pudo y pasándolas canutas pero, para entonces, ya debía dominar muy bien la técnica del fuego, la caza, la construcción, la confección de armas, utensilios y vestidos, y como resultado de ello pudo sobrevivir para que su huella genética nos llegara visible hasta hoy en día.

Ya en el Neolítico (Mesolítico), en periodo geológico del Holoceno, con clima cálido (más calentitos, por tanto) la especie humana prosperó bastante .

Hasta la península Ibérica y el Occidente de Europa debió de llegar una nueva oleada migratoria con cultura de la Edad de los Metales y, sobre todo, dominio del pastoreo y la agricultura.
No repugna pensar, desde luego, que Asia Menor (Turquía) y el continente europeo así como, de nuevo, el norte de África y el correspondiente brazo de mar Mediterráneo fueron los orígenes y las vías de acceso del hombre neolítico pastor y agricultor a Iberia.

Además, hace aproximadamente 8000 años aconteció otro fenómeno climático y ecológico transcendente: la desertización del otrora fértil en pastos y cultivos Sahara verde, con todos los monumentales movimientos migratorios que ello debió llevar aparejados.
Que en ese escenario las poblaciones norteafricanas se vieran cada vez más empujadas hacia el norte y que, progresiva e imparablemente, colonizaran con su cultura avanzada el sur de Europa (y las islas Canarias, por cierto) resulta completamente lógico.

Los iberos (ya coetáneos de los antiguos egipcios y griegos) tuvieron que ser forzosamente NORTEAFRICANOS y "neolíticos avanzados".

Y, para mí, las poblaciones más ancestrales preexistentes en Cataluña, los valles pirenaicos y la cabecera del Ebro hasta el País Vasco actual fueron colonizadas desde la costa mediterránea siguiendo el curso del "río Ibero" (Ebro o Ibris) y de sus afluentes por estos pueblos pastores, morenos, mesocéfalos, hablantes de un idioma preindoeuropeo (un vascoibero rudimentario) y, por cierto, sexistas y taurófilos (Es sabido y se ha demostrado que la afición taurina de España nació en Navarra).

Es razonable pensar que la fusión de los primeros pobladores paleolíticos caucasianos con estos otros colonizadores neolíticos norteafricanos originaron la raíz étnica vascoibérica de la cuenca mediterránea de nuestra península, incluyendo la Vasconia de hoy, y de la actual Aquitania francesa.

Luego los pueblos CELTAS indoeuropeos vinieron a Vasconia y a la costa atlántica extendiéndose por buena parte de la España interior después.
En el País Vasco actual, como en Salamanca o en Guadalajara, forzosamente hubieron de fusionarse con los pueblos iberos que les precedieron en su implantación dando lugar a una etnia (si es que eso existe) celtíbera.

Que esa mezcla fuera menos importante  en los angostos valles de las estribaciones pirenaicas de Navarra, de Aragón y del País Vasco interior explicaría la preservación de una población autóctona vasca, genética y lingüísticamente más definida y singular,  hasta nuestros días.

Considérese, además, que  el escaso mutuo interés de los vascos con los visigodos, los moros y los judíos explican a la perfección la preservación del vascuence y de los marcadores genéticos que aquí he señalado hasta ahora, en las áreas más rurales del País Vasco.

De todo lo anterior no extraigo ninguna conclusión sociopolítica como no sea que cada ser humano, cada individuo es maravillosamente singular e irremplazable, y que no hay más genes ni más lenguas ni más atributos sagrados que los de la dignidad humana, y los de la libertad, la igualdad y el afán de justicia, belleza y verdad que nos son inherentes a nuestra condición humana.

Y el lector que, al fin de este maldito año, haya llegado hasta aquí sin haberse dormido, merece mi total reconocimiento y admiración.

Que vuesas mercedes disfruten con las fiestas, que los romanos denominaban Saturnales, y que ahora se traducen (para no desmerecer de la tradición) en formidables melopeas obnubilantes del inicio del nuevo año.

Cuando el día segundo del año se hallen, vuesas mercedes, despiertos por fin, proseguiremos dando la tabarra con este Blog en el que, hoy y con este rollo, inauguro la entrada Nº 1.000 del Blog, siendo que son así de raros y poco comunes los lectores que han tenido la bondad de efectuar a esta fecha más de 546.000 visitas, salvo que el contador esté impregnado de espíritus etílicos.

NOTA DE FIN DE AÑO
Vivir y dejar vivir era el lema de las fiestas Saturnales de fin de diciembre, y según cuenta el poeta Cátulo, sus mejores días. Catón el Viejo, que por lo demás calculaba con un rigor sin compasión los costos y utilidad del trabajo de los esclavos de sus posesiones rurales, les concedía en las Saturnales una racióm extra de 3,5 litros de vino a cada uno.
Lo que de ordinario estaba prohibido, se autorizaba en estos días locos. Las leyes contra el lujo permitían en las Saturnales gastar en comidas una cantidad mayor que en los días corrientes y quien no aprovechaba la oportunidad para cogerse una melopea resultaba desagradablemente llamativo.

Tellagorri


Conclusiones de fin de año

Una de las primeras enseñanzas de Homer Simpson a su hijo Bart fue hacer uso, en caso de emergencia, de la frase: "cuando yo llegué ya estaba así".
Es un puro ejercicio de cinismo que en el caso de un menor aceptamos con resignación.Es la manera más sencilla que existe de evitar una reprimenda. "Yo no he sido"; "no lo sabía"; "se me olvidó"; son las excusas más habituales. Y las practica a cada hora el leonés nacido en Valladolid.

En el caso de los niños es más normal puesto que forma parte de su propia evolución y en edades tempranas la conciencia de la responsabilidad no ha hecho aparición por lo que se mueven de acuerdo a premisas básicas de evitación del castigo y búsqueda del premio. Sin embargo, a un adulto cabe exigirle ciertos valores de orden superior que se hacen aún más imprescindibles ante la coincidencia de ser cargo representativo.

Los casos de corrupción pública y mala praxis que copan los titulares informativos a diario se acompañan, en una grotesca mayoría, del arte de la negación. El proceso es siempre el mismo, denuncia pública, investigación, aportación de pruebas, testificaciones, imputaciones y espera a juicio.

La directriz que sigue el crápula es fácil de aprender: Negar, negar, negar. En algunos casos se adereza de términos como "conspiración", "persecución", "electoralismo", etc. Ante la evidencia empírica del latrocinio se pasa a la estrategia número dos: Seguir negando. Y si se llega a la condena judicial aparece la estrategia número tres, sobre todo para aquellos que ponían la mano en el fuego por el reo: "Acatamos la sentencia pero no la compartimos".

Blanco, Rubalcaba, Salgado y Zapatero, esos que el año pasado se fundieron alrededor de 100.000 millones más de lo presupuestado, nos piden que paguemos más, aunque en realidad se refieren a que saquemos la cartera para que puedan proceder a desvalijarla.Pues sí, parece que darles el 43% de nuestra renta a unos señores cuyo más reseñable logro es hacernos la vida imposible se les antoja poco.

Lo peor que puede ocurrirle a cualquiera es confraternizar con mentirosos, hipócritas, totalitarios y trepadores. Sólo los nacionalistas de CIU y  los peneuveros tienen la necesidad de convivir en perfecta armonía con la estafa, el abuso o la impostura. Esas tres palabras representan al actual Gobierno.

Intentan un impacto de 11-M de nuevo (Estado de Alarma) que les permita seguir en el poder, al menos hasta que consigan los grandes negocios de los que va a vivir el PSOE el tiempo que esté en la oposición.

Puestos a elegir no sé qué es peor: los Homers o los sociatas dirigiendo nuestras vidas.

Tellagorri


28 diciembre 2010

La mansión de Sonsoles

Cada pocas semanas, los mandos a distancia de Eras de Renueva dejan de funcionar. Sólo los vecinos más avispados conocen la causa de estas repentinas averías colectivas. Y enseguida empiezan los cuchicheos: "Ya está aquí la nueva vecina".

La enigmática visitante que provoca estos apagones es Sonsoles Espinosa. Como siempre, la esposa del presidente viaja con un inhibidor de frecuencias que la protege de los coches-bomba. Y el aparatito sigue funcionando cuando llega al terreno que compró en este suburbio del norte de León a finales de 2008.
Es su futuro hogar.

A simple vista, se trata de un descampado de 674 metros enmoquetado con cientos de cardos borriqueros. Pero a Sonsoles no le importa: comparado con la "sartén hirviendo" de Madrid, le parece el paraíso. Aquí pretende reconstruir su vida cuando abandone La Moncloa junto a su marido.

"No es que Sonsoles eche de menos León... Es que echa de más Madrid", dice un amigo de la pareja.

Ahora mismo, los planes de futuro de Zapatero son el secreto mejor guardado de La Moncloa. Él mismo lo admitió este lunes: sólo ha informado a su esposa y a un cargo del PSOE (al parecer, José Blanco o José Antonio Alonso). La única incógnita pendiente es la fecha de su retirada. ¿Será tras las municipales? ¿A finales de 2011? ¿O quizá pasadas las elecciones de 2012?

Lo que sí está claro es que ZP pretende innovar con su retirada: "Voy a ser un ex presidente muy distinto a los que han conocido los españoles hasta ahora", ha dicho a sus fieles. Para empezar, será el primero que instalará su corte fuera de la capital.
Sonsoles ha dicho que pretende mudarse a León en cuanto abandone el poder. Él irá y vendrá a Madrid cuando sea necesario, pero ella huirá de una ciudad que siempre le ha resultado hostil.

La operación retorno comenzó a fraguarse hace tres años. Un mediador visitó varias inmobiliarias con un encargo de "una persona muy importante". Sus exigencias: una parcela de 1.000 metros en una zona tranquila, con buenas vistas y sin vecinos.

Desde el principio, la búsqueda se centró en Eras de Renueva, un pujante ensanche leonés. Pero los misteriosos clientes no se decidían a comprar ninguna de las 98 parcelas en venta.

Un día de 2008, ZP y Sonsoles visitaron varias parcela. Sobre el terreno, comprobaron cuál encajaba mejor con el boceto que les había preparado un arquitecto madrileño. Contaban con un consejero de lujo: el alcalde Francisco Fernández, amigo y correligionario del presidente. Y, tras muchas vueltas, decidieron hacer una oferta.

Al principio, pretendían comprar dos parcelas que, sumadas, superaban los 1.130 metros cuadrados. Pero, finalmente, se decantaron por un terreno de sólo 674,12 propiedad de la empresa Comercial Veterinaria Ovejero.

¿Estrecheces económicas? ¿O miedo al qué dirán en plena crisis? El caso es que la operación se cerró el 15 de diciembre de 2008 en el Registro nº1 de León.

El importe no consta en el documento de compraventa, pero los expertos del sector estiman que su precio de mercado supera los 300.000 euros. Además, la construcción del chalet supondría un mínimo de 700.000 euros adicionales. Es decir, que el retiro leonés de la pareja (dos plantas, cinco dormitorios y piscina) costará más de un millón de euros.

La parcela se encuentra junto al acceso de la urbanización y, por tanto, resulta vulnerable a un atentado. Un serio inconveniente para una familia que vivirá escoltada de por vida: unos 35 agentes protegerán a ZP, entre su escolta (vigilancia activa) y los que protejan su domicilio (vigilancia pasiva). El dispositivo, según fuentes de seguridad de Moncloa, costará más de un millón al año.

El leonés, claro está, no pagará esta factura. Y eso que en su primer año como jarrón chino cobrará 62.548 euros: el 80% de su sueldo. A eso, unirá coche con chófer, pase libre en las empresas de transporte estatales y una asignación anual de unos 90.000 euros para dos empleados y material de oficina.

Todo un alivio para un prejubilado que nunca ha ganado dinero fuera de la política.

"Estaré en silencio... El silencio de un ex presidente se valora mucho", ha dicho. "Cuando uno deja [la política], debe hacerlo de manera real, absoluta, plena".

Él mismo cambió la ley para que los ex presidentes tuvieran derecho a un puesto vitalicio de consejero, remunerado con unos 70.000 euros al año. Pero él será el único ex que aprovechará esta bagatela: Suárez renunció al cargo por problemas de salud, mientras que Aznar y González han preferido centrarse en sus empresas. "En cambio, José Luis no es un hombre apegado al dinero, eso de los negocios no entra en sus cálculos", cuenta un amigo.

Un miembro de su círculo asegura que su verdadero sueño sería obtener un cargo internacional relacionado con la paz y los derechos humanos. Una opción sería presidir la Alianza de Civilizaciones o la Comisión Internacional contra la Pena de Muerte.
Es mucho más tontaina de lo que aparenta. ¿Cómo va a dedicarse a los negocios el hombre que ha arruinado a un país, o a un puesto internacional alguien que no habla ni le hablan los colegas de otros países?

Tellagorri


27 diciembre 2010

Economía y Poder en la Baja Edad Media

En el siglo XIII, por Laredo, Santander, Castro Urdiales, San Sebastián y Bilbao la Castilla ganadera y agraria enviaba sus excedentes de materias primas.

En las bodegas de sus navíos, los marinos del norte transportaban las remesas de lana, hierro, aceite y vino hacia los puertos europeos, y de allí regresaban con las naves cargadas de armas, paños, ámbar báltico o figuras de alabastro inglés.

El siglo XIV trajo a la Península además de la peste bubónica, importada por navíos en 1348, las guerras entre Castilla y Aragón (1356 a 1365), y la guerra civil castellana (1365 a 1369)

Pedro el Ceremonioso de Aragón tuvo que hacer frente a una posible invasión de castellanos y una sublevación de catalanes. Pedro I el Cruel, de Castilla, fue asesinado y sustituido por su hermano ENRIQUE DE TRASTAMARA, quien tuvo que hacer frente, asimismo, a una invasión de ingleses del duque de Lancaster aliados con portugueses.

En el siglo XV, el matrimonio de Isabel de Castilla (hermana de Enrique de Trastamara) con Fernando de Aragón (en 1469), supuso una guerra civil por causa de la hija del de Trastamara, Juana la Beltraneja.

En 1492 Boabdil, último rey nazarí de Granada, entregaba las llaves de la ciudad.. Y en 1478 crearon la Inquisición para barrer de sus reinos todo lo que no fuera cristiano.

En 1492 dispusieron, siguiendo el ejemplo de Francia e Inglaterra, la expulsión de los judíos.

Tras el descubrimiento del Nuevo Mundo y la firma del Tratado de Tordesillas en 1494, Castilla y Aragón se repartían el globo marítimo entre dos potencias navales : Castilla-Aragon y Portugal. Todos peninsulares.

Simultaneamente, el Gran Capitán derrotaba a los franceses y se adueñaba de Italia, del Rosellón, la Cerdaña y Nápoles. En 1512 Fernando El católico lanza la ofensiva de su Duque de Alba sobre el viejo reyno de Navarra, agregándola a Castilla.

Y se forma el primer Estado moderno europeo : ESPAÑA.

Corto video sobre Economia medieval española :




Tellagorri

26 diciembre 2010

Duro futuro sociopolítico en España

La destrucción general de las formas de la conducta en la sociedad supone un empobrecimiento en el que España es triste vanguardia.

Celebrada con más o menos solemnidad la Navidad, para los niños estos días suponen por definición alegría e ilusión. Para los adultos siempre conlleva evocación, introspección, reflexión y recuerdo. O debiera de suponer.

Y por supuesto estas fechas de fin de año nos llevan a todos de alguna forma, queramos o no, a hacer balance. A muchos se les ha caído finalmente la venda de los ojos. Ya ven atónitos, o comienzan a darse cuenta, de las dimensiones del daño que se ha infligido a este país en los últimos años.

Este invierno será especialmente duro. Y si todos estamos preocupados por nuestra suerte individual, no deberíamos estarlo menos por la colectiva. Estamos asistiendo a un alarmante proceso de deterioro de nuestra convivencia, paralelo a nuestro declive económico y al empobrecimiento de muchas capas de nuestra sociedad.

Dos botones de muestra tan sólo. El miércoles unos sindicalistas en Murcia agredieron a un senador, y acorralaron en su vivienda al Presidente de la Comunidad. Por unas medidas de ahorro exigidas por el Gobierno socialista de Madrid. Los agresores surgieron de una manifestación ilegal en la que participaba con sus soflamas la candidata socialista a la presidencia de la Comunidad autónoma.

El Jueves, nacionalistas (CiU) y socialistas catalanes (PSC) confirmaron su intención de ignorar al Tribunal Supremo y despreciar la sentencia que exige la libertad de estudiar en español en Cataluña.
Abierto desacato al Tribunal por parte de los partidos que gobiernan en Cataluña y en España.
Si el Gobernador o el Congreso de un Estado de USA, por ejemplo Wisconsin, gritaran que no acatan al Tribunal Supremo de los Estados Unidos, está clarísimo que en 24 horas 200.000 marines ocupaban ese Estado federal.

La calamidad se extiende a todos los terrenos de nuestra convivencia. Existe un peligro real de que los retambufos, procedentes de la pobreza generada por el Calígula y sus muchachos, nos aboquen a conflictos de convivencia desconocidos para las generaciones que no conocimos la República.

Y lo aprovechan, cuando creen que van a perder las prebendas de jeques arabes que disfrutan, aquellos que ya han mostrado su vocación cainita con sus llamamientos a abrir viejas heridas y, cabalgando sobre la mentira histórica, dinamitar el intento de ser un país que ha superado el bandolerismo del XIX.

Hará falta buena voluntad para reparar los inmensos daños causados a España por ideologías tóxicas, insensatez, aventurerismo e ineptitud.

Más allá de navidades.

Tellagorri


24 diciembre 2010

Feliz Navidad

                    

          F E L I Z   N A V I D A D




Tellagorri

23 diciembre 2010

Navidad en 1965 y ahora

Navidad. La fiesta de la paz. Guirnaldas de bombillas en las calles principales de las capitales. Belenes parroquiales. Puestos de zambombas. Villancicos. El basurero, el cartero, la junta parroquial y las hermanitas de la Caridad van de puerta en puerta entregando su felicitación y recibiendo el aguinaldo.

Las familias se reencuentran. Hermanos, cuñados, cuñadas, yernos, nueras y demás familia se reúnen en el hogar familiar para la cena de Nochebuena. Alegría navideña no exenta de tristeza al evocar a los que faltan. Añoranza de tiempos pasados.
Recuerdos de tiempos más difíciles quizá, pero entrañables. Frecuentes libaciones. Brindis. Desinhibición etílica. Remembranza de añejos resquemores. Reyertas. Las familias se desencuentran ... calor de hogar.

-Se nota que va subiendo el nivel de vida de los españoles, -comenta el médico de guardia en la casa de socorro.
-¿En qué se nota? -pregunta la enfermera.
-Hemos tenido el doble de ingresos por corte accidental con cuchillo jamonero que el año pasado.
-Es que a la gente que en su vida ha comido jamón le ha dado por comprar una paletilla por Navidad y como no saben cortar ...
-Eso va a ser.
La gente realiza las últimas compras para la comida de Nochebuena. Manadas de inquietos pavos llegan, como todos los años, a las plazas de los pueblos.

Todo eso sucedía en la década de los años 1960. Ahora no es muy diferente. Quizá ya no haya tanta gente comprando jamón por méritos de Pepeluí, el Segundo Caudillo. Para terminar de copiar al Invicto sólo le falta nombrar ministros  a unos cuantos del Opus para salir de la crisis.

Tellagorri



22 diciembre 2010

Eco escribe de alemanes, franceses e italianos.....

El gran escritor Umberto Eco recupera el espíritu irreverente y provocador de la gran literatura. La literatura apenas logra respirar en una época que ha impuesto silenciosamente la autocensura. Nunca se publicó tanto y nunca proliferó tanto la mediocridad. Y ahora, usando una ficción literaria de cambios de nacionalidad, Eco expresa lo que piensa de los habitantes de varios países sin parar en barras de daños colaterales.
No tiene desperdicio.

Un alemán produce de media el doble de heces que un francés. Hiperactividad de la función intestinal en menoscabo de la cerebral, que demuestra su
inferioridad fisiológica. En los tiempos de las invasiones bárbaras, las hordas germanas sembraban su recorrido de irrazonables amasijos de materia fecal. Por otra parte, también en los siglos pasados, un viajero francés entendía al punto si ya había cruzado la frontera alsaciana por el tamaño anormal de los excrementos abandonados en los bordes de las carreteras.

Como si eso no bastara, es típica del alemán la bromhidrosis, es decir, el olor nauseabundo del sudor, y está probado que la orina de un alemán contiene el veinte por ciento de ázoe mientras la de las demás razas sólo el quince.

El alemán vive en un estado de perpetuo embarazo intestinal debido al exceso de cerveza y a esas salchichas de cerdo con las que se atiborra. Una noche, durante mi único viaje a Munich, en esa especie de catedrales desacralizadas llenas de humo como un puerto inglés y apestosas de manteca y tocino, los pude ver incluso a pares, ella y él, sus manos agarradas a esas jarras de cerveza que, por sí solas, saciarían la sed de un rebaño de paquidermos, nariz con nariz en un bestial diálogo amoroso, como dos perros que se olisquean, con sus carcajadas fragorosas y desgarbadas, su turbia hilaridad gutural, translúcidos por la grasa perenne que les pringa rostros y miembros, como el aceite en la piel de los atletas del circo antiguo.

Se llenan la boca de su Geist, que quiere decir espíritu, pero es el espíritu de la cerveza, que los entontece desde jóvenes, y explica por qué, más allá del Rhin, jamás se ha producido nada interesante en arte, salvo algunos cuadros con unas jetas repugnantes, y poemas de un aburrimiento mortal. Por no hablar de su música: no me refiero a ese Wagner ruidoso y funerario que hoy pasma también a los franceses, sino de lo poco que he oído de las composiciones del tal Bach, totalmente desprovistas de armonía, frías como una noche de invierno. Y las sinfonías de ese Beethoven: una bacanal de chabacanería.

El abuso de cerveza los vuelve incapaces de tener la menor idea de su vulgaridad, pero lo superlativo de esa vulgaridad es que no se avergüenzan de ser alemanes. Se han tomado en serio a un joven glotón y lujurioso como Lucero (¿puede casarse uno con una monja?), sólo porque ha echado a perder la Biblia al traducila a su lengua.

¿Quién dijo que los teutones habían abusado de los dos grandes narcóticos europeos, el alcohol y el cristianismo?
Se consideran profundos porque su lengua es vaga, no tiene la claridad de la francesa, y no dice exactamente lo que debería, de suerte que ningún alemán sabe nunca qué quiere decir, y va y toma esa incertidumbre por profundidad.

Con los alemanes es como con las mujeres, nunca se llega al fondo.

Desgraciadamente, esa lengua inexpresiva, con unos verbos que, al leer, tienes que buscarlos ansiosamente con los ojos, porque nunca están donde deberían estar.

Desde que me volví francés (y ya lo era a medias por mi madre), entendí hasta qué punto mis compatriotas eran perezosos, estafadores, rencorosos, celosos, orgullosos más allá de todo límite, tanto que piensan que el que no es francés es un salvaje, incapaz de aceptar reproches. 

Claro que he entendido que para inducir a un francés a reconocer una tara de su raza basta con hablarle mal de otro pueblo, como si dijéramos "Nosotros los polacos tenemos este o aquel defecto" y, como nunca quieren ser segundos de nadie, ni siquiera en lo malo, reaccionan al instante con "Oh, no, aquí en
Francia somos peores" y dale, dale a hablar mal de los franceses,

No aman a sus semejantes, ni siquiera cuando les sale a cuenta. Nadie es tan maleducado como un tabernero francés; tiene todas las trazas de odiar a sus clientes (y quizá sea verdad) y de desear no tenerlos (y eso es falso, porque el francés es codicioso hasta la médula). 

Son malos. Matan por aburrimiento. Es el único pueblo que ha mantenido ocupados a sus ciudadanos durante varios años en eso de cortarse la cabeza unos a otros, y suerte que Napoleón consiguió canalizar su rabia hacia las otras razas, movilizándolos para destruir Europa.
Están orgullosos de tener un Estado que dicen poderoso, pero se pasan el tiempo intentando que caiga: nadie como el francés tiene tanta habilidad para hacer barricadas por cualquier motivo y cada dos por tres, a menudo sin saber ni siquiera por qué, dejándose arrastrar a la calle por la peor chusma. 

El francés no sabe bien qué quiere, lo único que sabe a la perfección es que no quiere lo que tiene. Y para decirlo no sabe sino cantar canciones,
Quizá la ignorancia es efecto de su avaricia, el vicio nacional que los franceses toman por virtud y llaman parsimonia. Sólo en este país se ha podido idear toda una comedia alrededor de un avaro. Por no hablar de papá Grandet.
La avaricia la ves en sus viviendas polvorientas, con esas tapicerías que nunca se renuevan, con esos cachivaches que se remontan a sus antepasados, con esas escaleras de caracol de madera tambaleante para aprovechar el poco espacio. Injertad, como se hace con las plantas, un francés con un judío (mejor aún si es de origen alemán) y tendréis lo que tenemos.....

Si me he vuelto francés es porque ya no podía soportar ser italiano. En cuanto piamontés (de nacimiento), sentía que sólo era la caricatura de un galo, pero de ideas más estrechas. A los piarnonteses cualquier novedad los envara; lo inesperado les aterra; para que llegaran hasta las Dos Sicilias (aunque entre los garibaldinos había poquísimos piamonteses) fueron necesarios dos ligures: un exaltado como Garibaldi y un gafe como Mazzini. 

Y no hablemos de lo que descubrí cuando me mandaron a Palermo. Sólo ese vanidoso de Dumas amaba a esos pueblos, quizá porque lo adulaban más 'que los franceses, que, con todas sus lisonjas, no dejaban de considerado un mulato. Gustaba a napolitanos y sicilianos, mestizos también ellos, no por error de una madre pelleja sino por historia de generaciones, nacidos de cruces de levantinos desleales, árabes sudorientos y ostrogodos degenerados, que tomaron lo peor de cada uno de sus híbrido s antepasados: de los sarracenos, la indolencia; de los suevos, la ferocidad; de los griegos, la infructuosidad y el gusto de perderse en charlas con tal de dividir un pelo en cuatro.
Y, por lo demás, es suficiente ver a esos scugnizzi que en Nápoles encantan a los extranjeros, sofocándose con espaguetis que se echan al coleto con los dedos, pringándose de salsa de tomate rancio.

El italiano es de poco fiar, vil, traidor, se encuentra más a gusto con el puñal que con la espada, mejor con el veneno que con el fármaco, artero en los tratos, coherente sólo en cambiar de pendón según sople el viento.
Claro, es que los italianos se han modelado sobre los curas, el único gobierno auténtico que han tenido desde que los bárbaros sodomizaran a aquel pervertido del último emperador romano porque el cristianismo había debilitado el orgullo de la raza antigua.
Los curas ... ¿Cómo los conocí? Me parece, tengo el recuerdo oscuro de miradas huidizas, dentaduras podridas, alientos pesados, manos sudadas que intentaban acariciarme la nuca. Qué asco. Ociosos, pertenecen a las clases peligrosas, como los ladrones y los vagabundos. 

Uno se hace cura o fraile sólo para vivir en el ocio, y el ocio lo tienen garantizado por su número. Si hubiera, digamos, uno por cada mil almas, los curas tendrían tantos quehaceres que no podrían estar tumbados a la bartola mientras se echan capones entre pecho y espalda. Y entre los curas más indignos, el gobierno elige a los más estúpidos y los nombra obispos


Tellagorri


21 diciembre 2010

La cabeza de Enrique IV el hugonote

"Paris vaut bien une messe" es, en realidad, lo que dijo el 25 de julio de 1593 el hugonote Enrique de Navarra, antes de penetrar en la basílica católica parisina de Saint-Denis para abjurar del calvinismo, ser reconocido como nuevo rey de una Francia unificada tras décadas de guerras religiosas, el primer monarca Borbón.

Crecido en el entorno campesino del Bearn, heredero al trono francés de puro rebote, casado a la fuerza con Margarita de Valois (esa reina Margot a quien Patrice Chéreau dedicó en 1994 una fenomenal película), el monarca al que los súbditos llamaban el "buen rey Enrique" mudó de credo varias veces para salvar el pellejo, cambió a la Valois por una Médicis para quitarse de líos, tuvo seis hijos legítimos y 11 ilegítimos y, cuando logró el trono de Francia, prometió que cada familia tendría un pollo que echar a la olla cada domingo y firmó en 1598 el Edicto de Nantes, que establecía un régimen de tolerancia religiosa adelantado a su época.

Eso le costó que lo matara a puñaladas el fanático católico Francois Ravaillac el 14 de mayo de 1610.

Francia, país dado a conmemorar la Historia, celebró el cuarto centenario de su muerte esta primavera con exposiciones, ciclos de conferencias y diversos actos. Pero nadie podía prever que el aniversario del regicidio tendría un broche de oro, en diciembre, con titulares: Encuentran la cabeza de Henri IV.

Que un soberano pierda la testa es poco habitual, salvo en contadas intervenciones de la guillotina. Ocurre que, en pleno subidón de la Revolución Francesa (octubre de 1793), el pueblo de París saqueó el panteón real de Saint-Denis, desenterró los cuerpos, los usó durante tres días como piñata y los relegó luego al oprobio de la fosa común.

Al pobre Enrique de Navarra se le cayeron un brazo, una pierna y quien sabe si la cabeza.

"Cuando, 24 años después, Luis XVIII ordenó restituir los restos a la cripta, faltaban los cráneos de Enrique IV y de su hijo Luis XIII", comentaba el historiador Jean-Pierre Babelon.

¿Dónde ha estado todo este tiempo? Misterio. El caso es que la cabeza ha aparecido y, como en un lanzamiento de marketing bien orquestado, la noticia fue difundida el jueves 16 mediante una multitudinaria rueda de prensa en París y la publicación de un estudio en una revista científica, ese mismo día en Londres.

En cuanto al análisis del cráneo por un equipo de 19 especialistas (antropólogos, historiadores, forenses...) dirigido por Philippe Charlier, los detalles pueden leerse en el número de Navidad del British Medical Journal.

Charlier ha sido descrito como una especie de Indiana Jones, siempre a la caza de descubrimientos histórico-mortuorios. Utilizando los más vanguardistas métodos, Charlier y su gente han logrado reunir una treintena de argumentos que confirman que es la cabeza de Enrique IV.

"Hay correspondencias anatómicas, tales como la edad, el sexo, una cicatriz en el labio (fruto de un atentado fallido con arma blanca), así como el pendiente que llevaban algunos reyes en esa época, o un lunar que tenía en la nariz. Por otro lado, las superposiciones faciales comparadas con los retratos y bustos muestran una perfecta concordancia, y también es un argumento favorable que el monarca fuera embalsamado a la italiana, es decir, sin serrar el cráneo. La datación, la genética, la botánica y el precario estado dental de Enrique IV (sólo tenía cuatro dientes cuando falleció) fueron otras de las evidencias aportadas", indica una Agencia de prensa.

El cráneo está bien conservado, tiene los ojos medio cerrados y la boca abierta, presenta restos de pelo y de bigote e indica que el monarca de 57 años padecía cataratas, artrosis y problemas dentales.

Según el académico Babelon, esta reliquia habría sido adquirida en el siglo XVIII a un enterrador de París por el conde Erbach, quien se la llevaría a Alemania. Cien años más tarde, aparece en el estudio de Montmârtre de la pintora Emma Camille Nallet Poussin, cuyos herederos la venderían por sólo tres francos a un tal Bourdais, fotógrafo en Dinard.

Obsesionado con el cráneo, Bourdais trató de demostrar su autenticidad durante años y, a su muerte (1947), su hermana intentó colocarlo sin éxito al Museo del Louvre.

"Desde 1955, reposaba en las estanterías de un anónimo jubilado de 84 años que no quiere publicidad".

Ya son ganas las de ir comprando cabezas de los años 1.600 e ir coleccionándolas. Hay "gente pa tooo". Bueno, sé de un bloguero aficionado a casquerías y sangre que la habría adquirido gustoso para colocarla en su mesilla de noche.

Tellagorri


20 diciembre 2010

KOSOVO es la vergüenza de Europa

Se acuerdan vuesas mercedes de cuando en 1999 la OTAN metió mano a fondo en Yugoeslavia, bombardeó Belgrado como si fuera un desierto de pruebas en Arizona, y dejó en primer plano a unos albano-kosovares "aplastados por el Slobodan"?

Si alguna enseñanza contiene esta siniestra historia es que las guerras que destruyeron Yugoslavia pasarán a la historia como los más garrafales errores de la política exterior de unas democracias liberales que fueron incapaces de impedir las atrocidades del ejército serbio en Bosnia y, para resarcirse de su culpable inhibición en aquella fase de la contienda, avalaron la farsa montada por una narcoguerrilla cuyo interés prioritario era entonces blindar el pasillo kosovar de la droga con destino a Europa occidental.

Lo que hacía necesario, claro está, amputar una de las regiones históricas de Serbia y someterla a un Estado gamberro y racista bajo la protección de los Estados Unidos.
El informe del europarlamentario suizo Dick Marty sobre los asesinatos de prisioneros serbios y su posterior descuartizamiento por los esbirros del UCK (kosovares) para extraerles los riñones y ponerlos a la venta en los circuitos clandestinos de occidente trae a la memoria los horrores del campo de exterminio de Jasenovac, donde más de medio millón de serbios fueron masacrados durante la Segunda Guerra Mundial por los milicianos fascistas del dictador croata Ante Pavelic, que, por cierto, también coleccionaba órganos de sus víctimas.

Los crímenes de la guerrilla albanokosovar de Hashim Taci, actual presidente del tinglado pseudonacional de Kosova, no deberían quedar impunes.

Sospecho que en todo esto, como siempre, está la mano oculta de germanos instando a la eliminación de eslavos, porque aunque Adolf ya no está la mentalidad teutona antieslava es histórica.

Tellagorri



19 diciembre 2010

Esa canalla de ropones vendidos

Parece que la sociedad española, angustiada por la precariedad de sus existencias personales y familiares, es incapaz ya de indignarse ni frente a la peor injusticia en estos tiempos corruptos del socialismo español.

Si no llega a ser por la crisis económica, es posible que hasta estuvieran contentos, con el Atila de León, una mayoría de los españoles, indiferentes ante la impostura y la fechoría.

El general Justo Oreja fue asesinado por ETA en el año 2001. El 28 de junio de aquel año, una bomba colocada en una bicicleta junto a su domicilio de Madrid le causó gravísimas heridas. Murió un mes de sufrimiento más tarde, el 29 de julio.

Ahora, tras el juicio a los dos terroristas acusados como autores de aquel crimen, se ha dictado la indemnización que habrá de cobrar su familia. La Audiencia Nacional ha estipulado que la viuda reciba 70.000 euros y los cuatro hijos 20.000 cada uno. Total, 150.000 euros.
Es ya una cifra muy alejada de los 750.000 euros que recibieron hace tan sólo un mes la viuda y la hija de Manuel Indiano, concejal de Zumárraga también asesinado por ETA.
Pero ese agravio comparativo es una pequeña broma ante el insulto que espera a cualquiera que busque criterios aplicados. Porque resulta que si la pobre familia de Justo Oreja recibe la mínima, la máxima indemnización jamás otorgada por un tribunal a una víctima de ETA (¡tres millones de euros!) la recibió Eduardo Madina, flamante secretario general del grupo parlamentario socialista en el Congreso.

Madina perdió una pierna hasta la rodilla en un atentado, lo que todos lamentamos. Pero el señor Madina hace vida prácticamente normal y tiene comprobadas energías para ganarse su muy sabroso sueldo parlamentario mejorado. Hace buena vida social política y tiene siempre ganas y fuerzas para insultar a la oposición del PP, a la que parece considerar más peligrosa que a los amigos de la banda que le puso la bomba.

La indemnización sin precedentes de tres millones (¡43 veces la indemnización a la viuda del general Oreja!) se justifica en el escrito con los "padecimientos físicos y psíquicos" y que el atentado le impidió seguir como profesional en el equipo de voleibol.

¿Pretende quizás alguien que los padecimientos psíquicos de la familia de Oreja fueron leves? ¿O leve su sufrimiento físico con la mitad del cuerpo quemado agonizando un mes?

Que este escándalo pase inadvertido, que no provoque furia, es peor que triste. Y no para la viuda del general Oreja. Para todos nosotros.

Tellagorri


18 diciembre 2010

No es lo mismo crear riqueza que robarla

Los niños tienden a no entender la riqueza. La confunden con el dinero.
De hecho, la riqueza no es el dinero. El dinero es sólo una forma cómoda de cambiar una forma de riqueza por otra. La riqueza es lo que hay por debajo, los bienes y servicios que compramos.

Cuando viajamos de un país rico a uno pobre, no tenemos que mirar las cuentas bancarias de la gente para darnos cuenta de qué nivel de riqueza tienen. Podemos ver la riqueza: en edificios y calles, en las ropas y la salud de la gente.

¿De dónde viene la riqueza? La hace la gente, dice un economista. Y así es.

Aunque pocos de nosotros creamos riqueza directamente por nuestros propios medios. Principalmente creamos riqueza para otras personas a cambio de dinero, que posteriormente intercambiamos por las formas de riqueza que deseamos.

Se nos paga por hacer algo que quiere la gente y generalmente quienes hacen más dinero son sencillamente mejores haciendo las cosas que quiere la gente.
Hacer lo que quiere la gente no es la única forma de obtener dinero, por supuesto.

También podemos robar bancos, o pedir sobornos dedicándonos a la política. Esos trucos generan algo de la variación en la riqueza y así es como se formaron algunas de las mayores fortunas individuales, pero no son la causa principal de la existencia de riqueza nacional, sino lo contrario.

Los jugadores de futbol ganan alrededor de 128 veces más y los de béisbol unas 72 veces más. Los moralistas citan este tipo de estadísticas con horror. Pero yo no veo problemas en imaginar que una persona pueda ser 100 veces más productiva que otra.

"¿Realmente valen tanto como 100 de nosotros?", preguntan los del gentío. Depende de lo que queramos decir por "valen". Si decimos "valen" en el sentido de lo que la gente llegaría a pagar por sus habilidades, la respuesta aparentemente es sí.

Puede parecer raro en principio que un individuo pueda realmente generar mucha más riqueza que otro. La clave de este misterio es revisar la cuestión, ¿realmente valen tanto como 100 de nosotros? ¿Cambiaría un equipo de futbol galáctico a uno de sus jugadores por 100 personas al azar?.

En un mercado libre, los precios se determinan por lo que desean los compradores.

A la gente le gusta más el futbol que la poesía, así que los jugadores de baloncesto ganan más dinero que los poetas. Decir que un cierto tipo de trabajo está mal pagado es lo mismo que decir que la gente quiere las cosas equivocadas. Podría ser. Pero es lo que hay.

Es lamentable que la gente prefiera los reality shows y los perritos calientes a Shakespeare y la verdura al vapor pero, ¿injusto? Es como decir que el azul es pesado o que arriba es circular.

Cuando hablemos de "distribución desigual de los ingresos", deberíamos a la vez preguntarnos de dónde vienen esos ingresos.

Una vez que fue posible hacerse rico creando riqueza, la sociedad en general empezó a hacerse más rica muy rápidamente. Casi todo lo que tenemos lo creó la clase media.
La tecnología ha hecho posible crear riqueza más rápidamente de lo que podía robarse. El prototipo de rico en el siglo XIX no era un cortesano, sino un industrial.

"Detrás de cada gran fortuna, hay un crimen", escribió Balzac. Lo que realmente dijo es que una gran fortuna sin causa aparente se debe probablemente a un crimen tan bien ejecutado que ha sido olvidado. Si estamos hablando sobre la Europa del año 1000 o la mayoría del Tercer Mundo de hoy, la frase sería exacta. Pero Balzac vivió en la Francia del siglo XIX, donde estaba produciéndose la revolución industrial desde hacía tiempo. Él sabía que podíamos hacer una fortuna sin robarla. Después de todo, lo hizo él siendo un novelista popular.

Sólo unos pocos países (y no es coincidencia que sean los más ricos) han alcanzado esta etapa.

En la mayoría, la corrupción sigue estando a la orden del día. En la mayoría, la manera más rápida de obtener riqueza es robarla. Así que cuando vemos que aumentan las diferencias de ingresos en un país rico hay una tendencia a preocuparse porqué esté marchando hacia atrás para convertirse en otra Venezuela, o en la España de ZP.

Las empresas ganan más dinero fabricando un gran número de coches normales que un pequeño número de coches caros. Así que una empresa que fabrica un coche producido en masa puede permitirse gastar mucho más en diseño. Si compramos un coche hecho a medida, siempre habrá algo que no funcione. Comprar uno hoy día sólo tiene sentido para demostrar que podemos hacerlo. No por bueno ni util.

Si hay suficiente demanda de algo, la tecnología lo hará suficientemente barato como para venderlo en grandes cantidades y las versiones producidas en masa serán, si no mejores, al menos más prácticas. Y no hay nada que les guste más a los ricos que lo práctico.

Los ricos de hoy conducen los mismos coches, visten las mismas ropas, tienen el mismo tipo de muebles y comen lo mismo que el resto de las personas no ricas. Sus casas están en barrios diferentes, o si están en el mismo barrio son de diferente tamaño, pero dentro de ellas la vida es similar. Las casas se edifican empleando las mismas técnicas de construcción y contienen casi los mismos objetos. No es práctico hacer algo caro y a la medida.

Si Lenin se paseara por las oficinas de una empresa como Toyota o Intel o Renault, pensaría que el comunismo había triunfado. Todos vestirían la misma ropa, tendrían el mismo tipo de oficina (o de cubículo) con los mismos muebles y se tutearían usando sus nombres, en lugar de sus títulos. Todo sería tal como había predicho, hasta que mirara sus cuentas bancarias.

Tellagorri



16 diciembre 2010

Colón hijo del rey de Polonia, Lituania y Hungría

Entérense vuesas mercedes de que Colón era polaco, hijo del rey Ladislao III el cual vivía disfrazado de Henrique Alemán, y cuyo objetivo secreto era cumplir las órdenes del rey de Portugal de enviar a Castilla a navegar fuera de la zona de Africa, según dice el historiador Manuel Rosa.

El bloguero Isra, con su brillantez ingeniosa, nunca hubiera imaginado una historia así pero ahí está lo que dice este investigador luso-norteamericano.

Que vuesas mercedes disfruten del último de los origenes atribuidos al Almirante de las Castillas.

Invierno de 1484.
El conde de Penamacor, don Lopo de Albuquerque, triste y rabioso, atravesaba por última vez los portones de su Villa de Penamacor. No quiso aceptar las condiciones de perdón ofrecidas por el rey Juan II de Portugal, seguro de recibir mejores recompensas de la reina vecina, doña Isabel de Castilla, con quien había planeado en secreto asesinar al rey portugués.

Por eso puso rumbo hacia Castilla donde sería de inmediato nombrado Corregidor de Baeza y Úbeda. Era seguido por sus criados y por sus hijos, incluyendo al adoptivo Diego Méndez de Segura (que en el cuarto viaje salvaría la vida a Colón).

Su esposa, doña Catrina de Noronha, condesa de Penamacor, caminaba triste por dejar Portugal pero esperaba al menos el consuelo de su tía, Violante Moniz, casada con Miguel Molyart, un importante Flamenco, que vivía en una casa del Duque de Medina-Sidonia en Sevilla. Cabalgando al lado de Catrina, llegado a última hora y por razones que ella no entendía, iba su tío, un noble caballero de pelo rubio y ojos azules, portando a su hijo don Diego, ambos vestidos con sus armas: un escudo cortado con cinco anclas de oro en un campo azul en la mitad superior…
"¿Qué haría su tío rumbo a Castilla?", pensó la Condesa de Penamacor. "¿Será otro de los traidores al Rey?".

Si Colón llegó a Castilla caminando al lado del traidor Conde de Penamacor no es fácil saberlo. Tampoco determinar la verdad cuando se intenta mirar a través de las ondas del tiempo; pero lo que sí es cierto es que ambos salieron de Portugal a finales de 1484 durante las traiciones a don Juan II y que ambos cambiarían sus nombres (el conde cambió su Lopo de Albuquerque por Pedro Nunes, y el futuro almirante escogió Cristóbal Colón).
¿Por qué?

Era acogido por doña Isabel que le pagaba regularmente y por los más nobles del reino, como el duque de Medinaceli. Desde que Colón llega a Castilla, no tuvo otro empeño que llevar la bandera de Castilla y León al otro lado del Atlántico.

¿Por qué? ¿Quién fue realmente este Cristóbal Colón?

El hijo del navegante, Fernando Colón, nos dejó todas las pistas para llegar a la verdadera identidad noble de su familia. Pero ¿quién era el padre de Colón?

Henrique Alemán, nombre falso del rey Ladislao III, rey de Polonia, Lituania y Hungría que desapareció en la batalla de Varna, en 1444, y se refugió en tierras de Portugal.

La tradición narra, por otra parte, que Colón fue el mismo Cristóforo Colombo, un artesano nacido en Génova. Insistían los historiadores en que llegó a Portugal en agosto de 1474, con 25 años de edad, debido a un naufragio; sin dinero, casa, educación, títulos o estudios de alguna clase. Sólo dos años más tarde, se casó con una noble y de repente se integró en la corte del reino. Un cuento de hadas que rivaliza con Romeo y Julieta.

En realidad, el navegante jamás hubiera podido ser un "plebeyo Colombo genovés tejedor de lanas". Si así fuera, ¿por qué no escribía en italiano o genovés cuando se carteaba con genoveses como Fray Gaspar Gorricio, si no que siempre lo hacía en castellano con palabras portuguesas? ¿Por qué Colón y la corte de Castilla escondieron su identidad? ¿Cómo pudo contraer matrimonio con una noble portuguesa 15 años antes del primer viaje si no es porque era noble de cuna? ¿Por qué, estando en Castilla, poseía los importantes secretos de navegación del rey de Portugal? ¿Por qué mintió a Castilla diciendo que América era La India? ¿Por qué insistió durante siete años a Isabel de Castilla para navegar bajo su bandera? ¿Por qué navegó, de regreso de América, hacia Lisboa en marzo de 1493 en lugar de dirigirse directamente a Castilla? ¿Y por qué se entrevistó con el rey de Portugal a 50 km. de Lisboa dejando a la Niña en manos de supuestos enemigos?

Durante siglos, éstas y muchas otras preguntas no obtuvieron respuestas seguras. Al tiempo que algunos dudaban de la historia conocida, los estudiosos intentaron mantenerla en pie, incluso siendo ilógica en ocasiones; cuando los hechos no encajaban, se inventaban nuevas ideas para sofocar las dudas.

Dos de los sobrinos de Colón, Juan de Braganza y Lopo de Albuquerque, intentaron matar al rey Juan II con el apoyo de Isabel de Castilla. En pago a su ayuda, Castilla recibiría el derecho de navegar por las zonas de África, prohibidas a los barcos de Castilla por el Tratado de Alcáçovas de 1479. Viendo su vida y su reino en peligro, Juan II envía a Colón, en medio de sus sobrinos traidores, como su agente secreto a Castilla con la misión de alejar a los castellanos de su comercio con Guinea. Así, daba a los caballeros enemigos nuevas conquistas en tierras de Occidente. Aunque no fue fácil convencer a doña Isabel, el plan funcionó dejando África y el camino hasta La India, a través del Indico, libre para Portugal.

Según este historiador, Colón, antes, en 1477, “había navegado hasta Canadá en una misión secreta” urdida por los reyes de Portugal y Dinamarca.

El personaje que más tarde en Castilla insiste en llamarse Cristóbal Colón se casó con la noble Filipa Moniz, hija del primer capitán de la Isla Porto Santo, cercana a Madeira, en 1479. No es novedad. Todos los investigadores conocen el nombre de la esposa de Colón. Pero sólo el nombre conocían. Cualquiera que sepa las reglas sociales del siglo XV, poco más necesita para entender que la historia era falsa: un plebeyo jamás se casaría con una noble.

Es más, la señora que se casó con Colón jamás se habría podido unir con alguien que no fuera de los más nobles del reino, pues ella era una Dona Comendadora de la Orden de Santiago en Portugal que vivía en la Comenda de Todos-los-Santos y necesitaba que su maestre lo autorizase. En 1479 el maestre era Juan II. Todo esto puede ser comprobado gracias a las reglas de Santiago y a un documento de la misma orden con el nombre de Filipa Moniz, localizado en la Torre de Tombo en Lisboa.

En 1479, casándose con Filipa Moniz, el futuro navegante se convirtió en tío del marqués de Montemor, Juan de Braganza, un hermano del duque de Braganza. Sí en 1479 Colón no era sólo tío político del marqués de Montemor, sino también tío del conde de Penamacor, del Conde de Abrantes y tío del mayordomo de Juan II, Pedro de Noronha. El hijo de Pedro de Noronha se llamaba Martinho de Noronha y fue enviado por Juan II a Lisboa para buscar a Colón en marzo de 1493. Además Colón era cuñado de Pedro Correia, uno de los guardas reales, por no mencionar todos los otros parentescos.

Desmontada la antigua afirmación de que Colón era un plebeyo, queda claro que el mundo no conocía la verdad sobre su identidad real. Además de sus lazos con los más altos nobles portugueses, su conocimiento de la geografía, astronomía, álgebra, cartografía, navegación e incluso el hecho de que utilizaba cifras secretas para comunicarse con sus hermanos, apunta a la mejor educación.

Fue un académico y no el autodidacta que el mito nos dice. Cristóbal Colón era el nombre inventado por un noble de cuna que no quiso que sus padres fuesen conocidos.
Utilizando las crónicas, documentos, genealogías, la heráldica e incluso la descripción física de Colón, se ha descubierto el verdadero linaje y nacionalidad de este gran héroe.

El futuro almirante Colón fue bautizado Segismundo Henriques; su padre, conocido como Henrique Alemán, vivía en la isla de Madeira. Su madre fuera Senhorinha Annes, una noble Portuguesa hija de un criado del infante San Fernando. San Fernando, hermano más joven del infante Enrique el Navegante, murió mártir en Fez en 1443. El padre de Senhorinha Annes estuvo cautivo en Marruecos con su amo, regresando a Portugal tras la muerte de San Fernando. El rey de Portugal fue el padrino de boda de Henrique Alemán con Senhorinha Annes.

Muchas son las novedades contenidas en este trabajo donde además se prueba cómo Colón usaba los secretos conocimientos portugueses, los trucos y mentiras que perpetró contra los Reyes Católicos y como Juan II de Portugal y el almirante Colón, al tratar de engañar a Castilla con una falsa India, conseguirán también engañar al mundo por 500 años.


Manuel Rosa, historiador luso-estadounidense, es autor del libro "Colón: La historia nunca contada" (Ed. Esquilo).


15 diciembre 2010

Todos contentos y las putas más

Dice Hermann Tertsch que
"Resulta alarmante comprobar lo poco que alarma el Estado de alarma a la inmensa mayoría de ciudadanos, todos convencidos de que si no eres un apestado controlador, no te afecta en nada.


Te lo cuentan por todos los canales de televisión y radio sesudos analistas y perspicaces observadores de la realidad nacional. Si no eres un enemigo del pueblo declarado como esa banda de desalmados no tienes nada que temer, dicen los de la izquierda y los de la derecha.
Y todos se mecen en la nube de esa perfecta normalidad que, según nos cuentan, ha venido a imponer el estado de excepcionalidad constitucional en el que nos ha metido por primera vez en la historia de la democracia el actual presidente del Gobierno y su jefe y previsible sucesor, don Alfredo «Fouche» Rubalcaba"
.
Si el pueblo se siente cómodo en este Estado de alarma que tanto tranquiliza, no vean vuesas mercedes lo bien que se siente el Gobierno. Muchos de los miembros de esta tropa gobernante estarán pensando que ha sido un tonto despiste no darse cuenta antes de lo útil que resulta.

Como no van a remitir los temores a que repitan o reincidan los controladores, ya animados al ver que las chapuzas jurídicas del Gobierno con la cacareada militarización pueden dejarlos impunes, podemos tranquilamente convencer a la sociedad para que aplauda un Estado de alarma indefinido. Al fin y al cabo, no afecta a las personas decentes, como se solía decir de la "Ley de vagos y maleantes", antes de que naciera Zeta.

Pero quizás habría que advertir a algunos, por eso del decoro, que quizás estén ellos en colectivos de otros enemigos del pueblo que tengan que recibir el merecido escarmiento del poder.
Porque como molesten más de la cuenta o dañen a la economía nacional ( léase a "los privilegios de los políticos"), el Gobierno podría verse obligado a pararles los pies con las nuevas armas que se ha mercado. O si se ponen muy bordes, con otras nuevas, porque ahí están el Estado de emergencia y el Estado de sitio.

Todo ha sido pensado, nos cuentan, para que un gobierno, aunque sea el más incapaz y fracasado del mundo, pueda mantener el control sobre los conflictos y problemas que él mismo ha generado.

¿Alguien se atreve a descartar que nuestro Gran Timonel se vea obligado en este futuro agónico inmediato a darle otra vuelta de tuerca a sus necesidades de control ante la catástrofe que, lejos de paliarse, se agudiza según se acercan las próximas elecciones?

¿Están todos tan tranquilos ante la perspectiva de un estado permanente de excepción en el que gobierne el amo de las sombras y la doblez?

Fouche Rubalcaba, implicado como responsable de interior en el caso Faisan, en el presunto delito de alta traición más grave desde la llegada de Tejero a las Cortes, va a ser previsiblemente el jefe de toda esta operación cuyo fin último es impedir la alternancia política en España. Si estamos tranquilos es que ya, definitivamente, han logrado enloquecernos. Más a los periodistas de opinión que a la ciudadanía.

"Ansí" que, como en las zonas de cuarteles de cualquier parte, las casas de putas irán proliferando.

Tellagorri


14 diciembre 2010

Rosita Forbes

Aventurera empedernida, durante un tiempo el gobierno británico la observó muy de cerca, incómodo por cómo se movía por territorios en conflicto, pero la dejaban ir, normalmente a cambio de información, lo que llegó a conferirle una cierta fama de espía. Forbes no tenía escrúpulos para decir o hacer lo que fuera con el fin de obtener lo que quería. En una de sus cartas a un delegado del gobierno británico en el Mar Rojo al que llevaba tiempo insistiendo por un salvoconducto para viajar al Yemen, se lee: "…Puedo disfrazarme de cualquier cosa. Me puedo teñir la piel de cualquier color. Puedo fingir muy bien que soy musulmana. Viajo sola. Puedo decir que soy la segunda esposa de un jeque…".

En la primavera de 1931, Arthur y yo recorrimos España de camino a Portugal. El rey Alfonso estaba en Inglaterra pero la reina acababa de regresar a Madrid con su cuñada, Lady Carisbrooke. Fuimos a ver a Irene al Escorial. (…) En aquella habitación gélida, lo típico en muchos palacios de esa meseta azotada por el viento, "Nos dijo temblando de frío: "El peligro de revolución ya ha pasado. Estoy segura. Tenéis que decir en Inglaterra que el trono está a salvo. Ojalá hubiérais visto cómo recibieron a la reina cuando volvimos. Oíamos un ruido, mucho antes de que cesara la lluvia, y ninguno sabíamos de qué se trataba. Nos asomamos por la ventana y aguzamos el oído para escuchar a las multitudes, pero no distinguíamos si estaban aclamándonos o condenándonos." (…)

El rey, nos dijo, era demasiado popular para perder el trono por una cuestión política. Que la Guardia Civil le era leal. Igual que la iglesia y la mayor parte de la población. Que se podía asumir el riesgo de adelantar elecciones, sin problemas. Que el campesinado votaría al rey de corazón. Arthur y yo lo dudábamos. Ya habíamos visto muchas cosas en España. Sin embargo, aquel día de primavera en El Escorial, exactamente 15 días antes de que cayera el trono, la familia real al completo y todo el cuerpo de casa a su servicio, seguían convencidos de que el peligro había pasado. Su ignorancia me pareció pavorosa".

Dos semanas después, cuando Rosita Forbes y su esposo ya habían llegado a Portugal para embarcarse en un largo viaje por América, se proclamó la II República en España.

Así era el Adolf Hitler que Forbes entrevistó en 1933:

"Aquel día de junio, el canciller me recibió sentado detrás de una mesa enorme. Estaba dibujando unas casitas, arquitectónicamente bien diseñadas, en un trozo de papel secante. Levantó la mirada y dijo, sin presentaciones: "Detesto la destrucción". Probablemente pensaba en los viejos edificios que rodean el Tiergarten, que admiraría como artista, pero cuya demolición ya había aprobado como realista.

Herr Hanfstängel y yo nos sentamos al otro lado de la mesa y Hitler siguió modificando y añadiendo detalles a sus dibujos mientras conversaba. "Felicidad", dijo Adolf Hitler, "eso es lo que deseo para Alemania. Me gustaría devolver a los hombres a la tierra y a las mujeres al hogar. No es necesario que la vida sea tan complicada. Nos podemos apañar con bastante menos de lo que nos dicen que necesitamos, pero sí tenemos que tener algo... Ese algo es lo que yo voy a dar a Alemania, amor propio, confianza, seguridad y un poco de dinero, un poco de bienestar y, por supuesto, salud".

Detrás de la puerta del despacho del canciller se apostaban dos magníficos miembros de su guardia personal. Medían más de seis pies de alto y cuando levantaban los brazos para hacer el saludo romano, bien podría parecer que respondían al aplauso de un circo romano.

La primera parte de su obra autobiográfica contiene, además de su gran trasiego geográfico de 1921 a 1935, nombres como D'Annunzio, Mussolini, Clemenceau, Lawrence de Arabia, Roosevelt, Haile Selassie, el rey Faisal, miembros de la realeza y la aristocracia europeas que incluyen la Familia Real española, algunos dictadores y otros personajes, desde esclavas a adoradores del diablo.

En 1923 hizo un viaje al Marruecos colonial en pleno conflicto para confeccionar la insólita biografía del entonces célebre jerarca El Raisuni, que había adquirido fama por sus sonados secuestros de occidentales en la zona que inspiró, aunque lejanamente, la película El viento y el león. Para confeccionar El Raisuni, Sultán de las Montañas, cuenta que recurrió a sus contactos en España, entre ellos el duque de Alba.

Pero la expedición que le dio la fama a la manera de los grandes exploradores ya había tenido lugar en 1921: atravesó el desierto de Libia hasta llegar a los santos lugares de Al Kufra. Para ello se formó en topografía y cartografía, aprendió todo el árabe que pudo, estudió el Corán y se adiestró en los rituales islámicos. Tiró de sus enlaces diplomáticos, se vistió de árabe y se tiñó la piel haciéndose pasar por una joven viuda de familia egipcia que iba en peregrinación. Tal vez fuera la primera mujer blanca que consiguió llegar allí y la aventura concluyó en uno de sus mayores éxitos: The secret of the Sahara: Kufara.

Hay consecuencia escrita de casi todos sus viajes. Supo detectar los momentos clave con una mezcla de cierta frivolidad y perspicacia en un tono que hoy nos resulta muy actual. Su paso por el crack de 1929 la llevó hasta el mismísimo Roosevelt.

"En un santiamén ya estaba dándome la mano aquel hombre al que América consideraba el último y más indisoluble de los milagros. "Hábleme de los camellos. He oído que a usted se le dan bien", me propuso alegremente. "¿Les ha establecido algún código de actuación?", le pregunté yo, refiriéndome a la N.R.A [una agencia del New Deal americano]. "Oh, sí, eso lo llevamos muy bien", y sacó un paquete de cigarrillos Camel de su bolsillo y me ofreció uno. De esa manera tan irresponsable empezó mi relación con Franklin D. Roosevelt".

Forbes apenas emite juicios morales y se expresa con franqueza cuando algo le gusta o le desagrada.

"Viajé a Moscú con un grupo de maestras. Íbamos bajo el auspicio de la Sociedad para la Mejora de las Relaciones Culturales, de la cual fui miembro entusiasta hasta que la URSS pactó con Alemania en 1939. Entonces, dimití. (…) Algunas maestras eran muy rojas y otras, muy blancas. Las primeras estaban terriblemente desilusionadas pues esperaban el paraíso y quedaron consternadas ante las incomodidades y las inevitables privaciones que hay en la etapa experimental de la revolución. Las últimas estaban encantadas. Pues esperaban lo peor y, en vez de eso, encontraron un pueblo entusiasta, volcado en la creación de una realidad".

Cinco años después, recorrió Siria, Palestina, Irak y Jordania. También visitó Persia, Kenia y Rusia.

En 1935 atravesó Afganistán, país también prohibido a los extranjeros y sobre el que escribió su tercer libro: "La ruta prohibida: de Kabul a Samarcanda". Para cumplir esta proeza, Rosita alquiló un coche con chofer, echó su equipaje en el maletero, además de su cámara de fotos y muchos rollos y así emprendió el gran viaje desde Peshawar (Pakistán), al pie del paso Khyber, hasta Kabul, de allí a Mazar-I-Sharif y por último a Samarcanda.

Mujer independiente y poco convencional, durante años se esforzó, sin mucho éxito, en reflejar la realidad del mundo árabe y corregir estereotipos, tema por el que sentía verdadera pasión. Pero la prensa solía interesarse más por los vestidos y sombreros que llevaba. Ella supo, con disimulada amargura, que sus intereses reales y su talento quedarían siempre enturbiados por su imagen de aventurera glamourosa. Posiblemente por ello, y por sus propias renuncias, incluido su retiro a las Bahamas, su obra cayó en el olvido a pesar de su innegable interés y riqueza.

Rosita Forbes asumió los impulsos de la celebridad y resistió las consecuencias. Además del éxito editorial, recibió condecoraciones, reconocimientos e incluso propuestas políticas, pero entendió que eso implicaba perder lo que más le gustaba: viajar a su manera. Y así lo expresa en sus memorias: "Al final caí en la cuenta de que yo había empezado partiendo de tres graves errores. El más relevante de ellos era irrevocable. Por esos disparates de la vida, había nacido mujer. Además, era joven. Y, supongo que, en aquellos tiempos, era guapa. En América, en Rusia, en la Europa moderna, esas cosas no tendrían la menor importancia. Pero en Inglaterra aquel triple handicap era demasiado fuerte. (…) ".

Tellagorri



13 diciembre 2010

Los chivos expiatorios

Reconozco que me equivoqué a fondo en el post en el que calificaba de "canallas" a los controladores aereos, porque los auténticos canallas son los OTROS.

A fin de cuentas, ¿qué han hecho los controladores aéreos? Jorobar a unos cientos de miles de españoles, deteriorar la economía nacional y fortalecer en el exterior el estereotipo negativo de España.

Nada que el gobierno de Rodríguez no se haya esmerado en practicar sin descanso durante su Sexenio Revolucionario. Guinda podrida para un pastel hediondo, la huelga salvaje de los controladores no ha sido la catástrofe, sino un episodio menor y tardío (aunque, eso sí, espectacular) de la Catástrofe.

Como corporación privilegiada, la de los controladores aéreos tiende a ver al resto de la humanidad bajo la perspectiva de especie por ella directamente protegida y, en consecuencia,  inferior. Cree que justifica su estatuto la responsabilidad que asume sobre las vidas de los viajeros, que dependen de ella (y de la corporación, asimismo privilegiada, de los pilotos).

No es, por tanto, sorprendente que reaccione ante la merma del privilegio con desmesura e indiferencia ante la suerte ajena.

El regreso del particularismo a la vida española ha experimentado un fuerte incremento en las dos últimas legislaturas, porque la estrategia de Rodríguez ha consistido precisamente en sustituir la nivelación democrática por la generalización del privilegio.

Así ha sucedido en casi todos los casos desde 2004, empezando por los pactos de la izquierda y los nacionalismos contra el PP, y lo mismo ha pasado a raíz de la huelga de controladores. Para entender la dinámica de estos conflictos, hay que tener en cuenta un principio estratégico fundamental. En todo caso, el gobierno postulará que su aliado en la coalición representa el interés de la nación, y el adversario, sólo intereses particularistas y por ende antinacionales.

El problema es que, por grande que haya sido el número de viajeros afectados por la misma, estos no representaban interés general alguno. Viajar durante el puente no era una exigencia para todos los ciudadanos (la mayoría no pudo o no quiso hacerlo). Actuar como si unas medidas disciplinarias sobre un gremio que ha delinquido fueran la panacea para los males de la patria resulta, más que ridículo, peligroso.
Una cosa es sancionar con arreglo a la ley, y otra, muy distinta, crear un chivo expiatorio.

Tellagorri


12 diciembre 2010

Mediocridad, medianías

El semanario "The Economist" también apuesta por que las próximas elecciones en España las ganará el partido que se deshaga de su líder actual. Parece una 'boutade', pero no a la luz de las últimas encuestas. La nota de los dos mandatarios ya apenas alcanza el 3,5, y de hecho Rajoy frisa el 3.

Estas calificaciones son en sí mismas unas descalificaciones. La mitad de la población, según el barómetro, desaprueba el trabajo del Gobierno; y un porcentaje mayor desaprueba el trabajo de la oposición. Éste es ya su único aliciente: confiar en que el rival sea aún peor.

De momento, Zapatero sólo puede confiar en la mediocridad de Rajoy para sostenerse; pero también Rajoy fía su éxito a la mediocridad de Zapatero, viendo cómo a éste se le desmorona su electorado de semana en semana por el efecto corrosivo de su aluminosis intelectual entre improvisaciones erráticas.

Esto significa que aún puede ganar cualquiera, porque, a pesar de 'The Economist', las cuadras de Ferraz y Génova no van a cambiar de caballo.

Una y otra vez, los informes internacionales coinciden en colocarnos por debajo de la media en Educación. En la zona de los mediocres. Y una vez tras otra, fingimos sorprendernos como si se nos estuviera intentando humillar injustamente ante los demás países.
¿La octava potencia del mundo? ¿En qué?
Desgraciadamente, como la mayor parte del profesorado sabe muy bien, está sucediendo con mucha frecuencia que casi ningún alumno sabe nada de nada. Se abandona a los buenos. Reciben becas de otros países. Y en cuanto pueden se largan. En este país se profesa una generalizada desconfianza hacia el conocimiento.

Esto justifica el "Que inventen ellos", de Unamuno. Sonaba un poco triste, pero era real. El undécimo: conocerse uno mismo. Y para el que ignora cómo es este país de 1982 en adelante, le diré que como un rebaño de vulgaridad, mezquindad, adocenamiento, medianía. Lo contrario de excelencia, perfección.

Tellagorri



11 diciembre 2010

Los "probes" políticos en paro

Su partido, el PSC, cayó de 37 a 21 escaños.

Como vuesa merced, Montilla se quedó sin trabajo, pero durante dos años (la mitad del tiempo que ha durado su mandato) todos los catalanes, sus jefes, le pagarán el 80% del sueldo, 115.000 euros anuales (Montilla era el presidente autonómico mejor pagado con un salario de 144.030 euros). Además, gozará de despacho, chófer, servicio de seguridad y dos asistentes, todo a cargo del erario público. Pero hay más: cuando se jubile percibirá una pensión vitalicia el 60% de su sueldo, más de 86.000 euros.

Son los mismos privilegios que sus predecesores, Jordi Pujol y Pasqual Maragall.

Todo ello para que, según el Estatuto de los ex presidents, "puedan atender sus necesidades personales y políticas con la dignidad que corresponde a las altas funciones ejercidas".

Y lo mismo ocurre con el presidente del Parlamento catalán, Ernest Benach, el exjardinero. Su partido, ERC, se ha descalabrado en las últimas elecciones pasando de 21 a 10 parlamentarios, pero eso no significa que su cartera se vaya a resentir. Benach dejará las instituciones con un sueldazo de 104.000 euros anuales durante cuatro ejercicios.
Cuando llegue a los 65 años percibirá una pensión de 78.000 euros anuales, el 60% de su actual salario.
Otros destacados políticos catalanes disfrutarán de un buen retiro. Es el caso del vicepresidente de la Generalitat, Josep Lluís Carod-Rovira, el consejero de Interior, Joan Saura, y el titular de Economía, Antoni Castells.

Estos salarios son incompatibles con el ejercicio de un nuevo cargo público, pero pueden compaginarlos con una segunda nómina de su partido o del sector privado.

Esta misma semana el Zeta anunció que no se renovará la ayuda de 426 euros mensuales a los parados sin prestación. El Ejecutivo baraja subir la edad de jubilación a los 67 años y cada español necesita cotizar un mínimo de 15 años para optar a una pensión contributiva; 35 para conseguir el 100%.

Pero si usted es diputado o senador le basta con ejercer siete años para lograr el 80% de la pensión máxima y 11 para obtener el 100%, aunque no cotice a la Seguridad Social ni un día más.

Las jubilaciones de los políticos autonómicos no son patrimonio exclusivo de Cataluña.
Andalucía, Galicia, Navarra, País Vasco o Baleares tienen sistemas de cálculo similares, pero los sueldos de sus presidentes no son tan elevados como el de Cataluña. Montilla cobra más del doble que sus homólogos extremeño, cántabro o asturiano. De hecho, los 144.000 euros anuales del president superan ampliamente los 78.000 euros del mismísimo Zapatero.

El periodista Daniel Montero, autor del libro La Casta (La Esfera de los Libros), destaca que "en el podio de los políticos mejor pagados de España están el presidente de la Generalitat, el de la Diputación de Barcelona y el alcalde de Barcelona", todos por encima de los cien mil euros anuales, cifra que también supera el presidente de la Diputación de Lleida, el cuarto político del país con mejor sueldo.

Otras comunidades como la valenciana colocan a sus ex presidentes en el Consejo Consultivo con un sueldazo de 77.000 euros anuales. Entre las más austeras están La Rioja, Asturias y Murcia, donde los ex mandatarios no tienen privilegios especiales.

Cuando Zapatero abandone La Moncloa dispondrá del 80% de su nómina durante dos años. Podrá completar esos 62.000 euros anuales con otros 75.000 si decide ingresar en el Consejo de Estado. Además, gozará de una serie de prebendas vitalicias: una pensión de jubilación del 80% de su sueldo, despacho, coche con chófer, seguridad en su vivienda y en todos sus desplazamientos y dos asistentes de libre designación ( podrían ser sus niñas barrocas) sufragados por el Estado.

Calcular cuánto nos cuestan estos servicios a los españoles es imposible, ya que la Administración no revela, por ejemplo, el coste de los alrededor de 70 policías destinados a la protección de Aznar, González y sus respectivas familias (en el caso de Adolfo Suárez el número es muy inferior ya que apenas abandona su casa por enfermedad).

Mary Tere pasó de ingresar 73.500 euros anuales como vicepresidenta del Gobierno a más de 140.000 desde que salió del Ejecutivo. Ahora cobra 83.500 euros como miembro del Consejo de Estado más el 80% de su antiguo salario. Por su parte, Pedro Solbes disfruta de tres nóminas: 3.996 euros como diputado, 3.735 vitalicios por ex comisario de la UE y 5.763 durante dos años como ex ministro de Economía. En total, 13.500 euros al mes.

Tellagorri